El misterio armónico racional sensorio, la evidente revelación secreta, que Albert Einstein sintiera por el universo expansivo de luz curvada. En él, en Einstein, hemos de ver a Heráclito, cuando hablaba de la armonía simultánea contradictoria. En él, en Einstein, hemos de ver a Buda, cuando decía que vivimos en un mundo plagado de contradicciones. Albert Einstein, lo plantea, con la teoría de la relatividad especial y la teoría de la relatividad general, la materia y la energía, el campo electromagnético y el campo gravitacional. Buda y Heráclito, en el aquí y en el ahora, endenantes, creían confiados optando con santa fe por el camino medio, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el aquí y el agora ahora hogaño, el hoy es siempre todavía, y el doctor Einstein no lo sabía. Buda y Heráclito, y, el camino medio, no estaban hablando de extremos aristotélicos exclusivos capitalistas gringos go home, estaban hablando, Buda y Heráclito, de los casos correlativos límite contradictorios caliginosos complementarios congruos coordinados de la forma y figura del ser y no ser, de la modernidad ilustrada originaria de la literatura védica upanishad sánscrita, aspectos armónicos límbico antagónicos ambiguos, de Buda y de Heráclito, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, y, al través y en de por medio por la calle de en medio, el medio maleoiano profundo, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el aquí y el agora ahora hogaño, el hoy es siempre todavía que el doctor Einstein no sabía. Aun y aún, el doctor Einstein, hablaba de armonía racional sensoria misteriosa. Y, el doctor Einstein, no margullera en el oxímoron cleuasmo quiasmo río heraclitoiano, por culpa de Aristóteles. Y, en la filosofía de las 4E de Maleo, del entendimiento y la estética ética espiritualidad, ha de existir esa armonía de las que nos ha hablado el doctor Einstein, y, decir armonía, es decir equilibrio. Mas y más, el doctor Einstein hablaba del universo expansivo einsteiniano de luz curvada, y, no aparece por ninguna parte el contrapeso a su universo, no existe el universo que equilibrara a su universo, con misteriosa armonía razonada sensoria equilibrada, entre la certidumbre y la incertidumbre einsteinianas, en que aparece el universo contractivo maleoiano de luz tragada, que surge de la voladura de las Torres Gemelas Neoyorquinas el día de la Virgen de la Coromoto de Venezuela el 11/09/2001. Fecha en que insurgen los cosos correlativos límite contradictorios caliginosos complementarios congruos coordinados de la forma y figura del ser y no ser, insurgen del nefasto nefando parlamento exclusivo egocéntrico de George W Bush, sobre las ruinas del World Trade Center con lo del o estás conmigo o estás con mi enemigo. Y, hasta esa fecha y día, 11/09/2001, se mantenía oculta la evidente revelación secreta, de Albert Einstein de los universos, el expansivo y el contractivo, que margullían en el oxímoron cleuasmo quiasmo río heraclitoiano, del misterio armónico racional sensorio einsteiniano.
Con digresión y sin digresión, el misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein, quizás y sin quizás, y, a buen seguro que si el abanderado de la teoría de la relatividad especial y la teoría de la relatividad general, hubiérase margullido en el oxímoron cleuasmo quiasmo río heraclitoiano, jamás de los jamases, Einstein, hubiera postergado la teoría holística unificada manifiesta entre la teoría especial de la relatividad y la teoría general de la relatividad. La teoría holística unificada entre el campo electromagnético y el campo gravitacional. El doctor Einstein, oía campanas y no sabía dónde, y, si lo hubiera sabido y si las hubiera oído, hubiera mandado al carajo a Aristóteles. Aristóteles arrumbó el tercio incluso de Maleo, por mas y más de 3 mil años hasta el derrumbe y ruinas del World Trade Center. Aristóteles, se dispuso a darle un cuarto al pregonero del tercio excluso, y, helo ahí el desastre histórico, y, que los platos rotos lo estaría pagando hoy el doctor Einstein, que no sabía que hoy es siempre todavía, y, aun y aún, hasta el día, 11/09/2001, manteníase oculta la evidente revelación secreta, de Albert Einstein de los universos, el expansivo y el contractivo, del misterio armónico racional sensorio.
Con divagancia y sin divagancia, el misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein, quizás y sin quizás, y, a buen seguro que si el abanderado de la teoría de la relatividad especial y la teoría de la relatividad general, hubiérase margullido en el oxímoron cleuasmo quiasmo río heraclitoiano, jamás de los jamases, Einstein, hubiera postergado la teoría holística unificada. En tanto que y en cambio Teilhard de Chardin, conjugaba la materia y la energía, en su famoso centro universal unificado reflexivo, similaricadencia tautológica repetitiva platónica de la teoría holística unificada einsteiniana. Ni Teilhard ni Einstein, tocaron ni con el pétalo de una florecita rosa roja de Maleo a Aristóteles, y, no sabe este cura ignaro raro cleuasmo asno, o sea, si lo de esos dos pensadores fuera por temor o por ignorancia supina sobrina sabrina, de enviar a Aristóteles largo al carajo, y, si bien es cierto que y a buen seguro que a Aristóteles le tocara su fin hasta la significativa fecha del 11/09/2001, del derrumbe y ruinas del World Trade Center en que insurgen los casos correlativos límite contradictorios caliginosos complementarios congruos coordinados de Maleo de la forma y figura del ser y no ser de la modernidad ilustrada originaria de la literatura védica upanishad sánscrita, aspectos armónicos límbico antagónicos ambiguos, de Buda y de Heráclito, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, y, al través y en de por medio por la calle de en medio, el medio maleoiano profundo, la perogrullada primera vez de Perogrullo, el aquí y el agora ahora hogaño, el hoy es siempre todavía que el doctor Einstein no sabía, y, que hasta el día, 11/09/2001, del derrumbe y ruinas del World Trade Center, manteníase oculta la evidente revelación secreta, de Albert Einstein de los universos, el expansivo y el contractivo, evidente revelación secreta del misterio armónico racional sensorio einsteiniano.
Si el misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein, manteníase oculto como la evidente revelación secreta hasta el 11/09/2001, del derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas. Entonces sea dicho que el misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein del universo en expansión einsteiniano de luz curvada y el universo contractivo maleoiano de luz tragada, insurge, el misterio armónico racional sensorio einsteiniano, del derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas. Ergo vergo sea dicho que el misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein es el mismo de Teilhard de Chardin, entre materia y energía, entre el campo electromagnético y el campo gravitatorio. Ergo vergo sea dicho que ni Albert Einstein ni Teilhard de Chardin tocaron con el pétalo de una florecita rosa roja de Maleo a Aristóteles, por temor o por ignorancia de enviar a Aristóteles largo al carajo, y, si bien es cierto que y a buen seguro que a Aristóteles le tocara su fin hasta el 11/09/2001, del derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas con la evidente revelación secreta del misterio armónico racional sensorio de Albert Einstein.