Memorias de un escuálido en decadencia
Ética
Por: Roberto Malaver
Jueves, 28/04/2022 08:11 AM
Y es que no se cansan de jodernos. Nos clavaron el escudo y el himno y la bandera, y no nos dejan respirar y vienen y ¡zas!, nombran a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, y ahí están los mismos, parecen que los rasparon porque están repitiendo. Por lo visto los que están repitiendo ahí no son militantes del partido ese, porque si fueran tenían que pararle bola al código de ética de la militancia, pero no, que va, ahí van de nuevo, listos ya, a sus puestos, partida. Es que siempre nos encontramos con las mismas caras que se van rotando por todos los lugares, y tienen más puestos que un autobús. Así que si le preguntamos si leyeron el código de ética, seguro que se arrechan. Y el diputado Pedro Carreño tiene que informar si siguen allí en el TSJ las magistradas 33 y 34 mandando, como él lo denunció en su tiempo, y como dice el código de ética que debe hacer.
Nosotros en cambio estamos ahora a la calladita, como esperando una vaina grande. Ya el compañero Bernabé –Alegría- Gutiérrez anunció las elecciones del partido del pueblo para junio, y seguro que por allí viene Espoleta Allup y anuncia otra vaina para su AD particular, su propiedad privada, como diría la compañera Lila Morillo, de quien están hablando mucho últimamente porque parece que viene, y viene arrecha con un tronco seco.
“A leer el Código de honestidad y ética de la militancia, a leer, vamos todos a leer, no tengas miedo y lee tu código de honestidad” Así entró al apartamento el papá de Margot. Y siguió diciendo: “No tengas miedo. Léelo con confianza y denuncia al corrupto, no te denuncies a ti mismo, porque así no vale”. Después se detuvo y se sentó frente a la computadora y dijo: “Voy a descargar el Código de honestidad, ética y disciplina de la militancia del partido. Yo pensé que el primer día de vigencia de este código iban a meter preso a un montón de chavistas, pero parece que la vaina no es con ellos sino con otros”. Y después se puso de pie y fue al cuarto y le metió ese coñazo tan duro a la puerta, que la vecina gritó: “Te voy a denunciar gran carajo, para ver si te llevan preso por indisciplinado”.
-Soy el ladrón de tu amor.- me canta Margot