A los trabajadores en su día
Estamos arribando a otro 1° de Mayo, día donde los trabajadores del mundo recuerdan cuando los obreros del Chicago de 1886 emprendieron jornadas de lucha por sus derechos y fueron reprimidos salvajemente, con saldo de trabajadores asesinados por el gobierno y la patronal de entonces. En este siglo XXI Venezuela ha ratificado las normas internacionales aplicables a la libertad sindical y negociación colectiva contenidas en los Convenios 87 y 98 de la OIT, pero para el gobierno de Nicolás Maduro esos acuerdos son letra muerta.
Los orígenes del movimiento obrero venezolano, tiene sus antecedentes, cuando un grupo de trabajadores caraqueños, decidieron organizarse y publicar un periodiquito llamado "Unión Obrera". Esta iniciativa influyó para que en el año 1908 se fundara la Asociación de Obreros y Artesanos del Distrito Federal, convirtiéndose a partir de ese momento, junto a otros grupos organizados, en la primera vanguardia clasista del país.
Maduro sabe muy bien que el Convenio 87 establece el derecho de los trabajadores y empleadores, sin ninguna distinción y sin autorización previa, de constituir las organizaciones que estimen conveniente, así como el de afiliarse a estas organizaciones, con la sola condición de observar los estatutos de las mismas. Él lo sabe, pero en su haber de desclasado ha llevado a la cárcel a dirigentes sindicales y ha destruido todos los convenios laborales.
Otra acción de trascendencia histórica se dio cuando en 1936 los obreros petroleros decidieron alzarse en Cabimas, San Lorenzo, Mene Grande, Bachaqueros, Mene Mauroa y en el campo de Cumarebo; levantándose así, las primeras revueltas contra las empresas Caribbean Petroleum Company, La Lago Petroleum Company y la Venezuela Oil Company.
La Constitución asegura que toda persona pueda tener ocupación productiva y adaptada a sus condiciones, en el caso de ancianos y ancianas. Además, ampara el ejercicio de los derechos laborales por los trabajadores no dependientes. Nicolas Maduro en su nueve años de gestión, arruinó a los pequeños y medianos emprendedores, les arrebató el salario a los trabajadores y a los pensionados y jubilados los tiene rumiando la miseria.
En el devenir de sus luchas nuestros trabajadores han fundado organizaciones sindicales como la Central de Trabajadores de Venezuela (CTV); Confederación de Sindicatos Autónomos de Venezuela (CODESA); Confederación General de Trabajadores (CGT) y la Central Unitaria de los Trabajadores de Venezuela (CTUV). Todas estas agrupaciones laborales tuvieron su origen en el Primer Congreso de Trabajadores de Venezuela realizado entre el 26 de diciembre de 1936 y el 7 de enero de 1937 en el teatro Bolívar de Caracas.
Nuestra Constitución como reflejo de las luchas de sus trabajadores y la del pueblo venezolano, contiene normas sobre seguridad, higiene y ambiente de trabajo; jornada de trabajo, descanso semanal y vacaciones remuneradas; salario suficiente, salario mínimo, igualdad salarial, participación en los beneficios de las empresas, inembargabilidad del salario; prestaciones sociales por antigüedad y cesantía y estabilidad en el trabajo.
Todos estos derechos han sido aplastados por este esbirro de la clase obrera, llamado Nicolás Maduro Moros, quien se ufana de ser chofer y presidente obrero.
Presidente obrero
Por: Douglas Zabala
Domingo, 01/05/2022 10:53 AM