En Europa reside el responsable de haber quemado vivo al venezolano Orlando Figuera, "confundido con un chavista aindiado bembón y con cara de obrero", descrito textualmente en las redes sociales por un bárbaro clasista, aunque el mismo quejoso social lamentaba el crimen afirmando que, "eso no debemos hacerlo", y dando a entender con disimulo que quien le prendió fuego posiblemente no era un manifestante opositor, sino un infiltrado chavista. Las investigaciones policiales y los videos indicaron plenamente que fue filmado el incendiario HDP, como los describía Perucho Conde cuando en su personaje expresaba a algún errático ciudadano "mira p´acá HDP hiju´e potranca, te agarró el serrucho de Perucho". Quien quemó al joven Figuera es descendiente de europeos y enviado a España permanece pese a petición de extradición a Venezuela.
El mundo vio a la víctima prendida en candela huyendo hacia unos matorrales, Figuera falleció días después. El autor de prenderle fuego continúa protegido en tierra española, es blanco y con billete, opositor acérrimo al Comandante Chávez y al presidente Maduro. En contraste me entero el 6 de abril 2022 que al escritor y periodista Anatoli Shari, ucraniano opositor al nuevo héroe de la derecha internacional, el orate Volodímir Zelensky, lo arrestaron en España, Shari es bloguero y difunde críticas internacionales contra el nazi fascista confeso Zelenski. Shai será deportado.
El Servicio de Seguridad ucraniano aseguró que a Shari, conocido por su postura crítica a los nazifascistoides, lo juzgarán en Ucrania. Información corroborada por la red social de mensajería telegram. Shari, quien reside en territorio de la unión europea desde 2012 tras recibir asilo político, será entregado porque Ucrania lo cataloga sospechoso de alta traición. La Policía Nacional española lo arrestó en Tarragona. El diario ucraniano Segodnya informó que la extradición de Shari se llevará a cabo sin duda. Usted estimado lector de Aporrea puede apreciar la diferencia con el venezolano de origen europeo, a quien defienden en España y en la derecha mundial, pese a haber quemado vivo a un manifestante de izquierda en el este de Caracas. La prensa hipocritócrata abandonó el caso hace tiempo, sin recordar siquiera el aniversario de la muerte del joven obrero Figuera, a quien destrozaron por aquellos días con mentiras sobre su vida, por el hecho de ser pobre y afro descendiente.
El gobierno venezolano no es intransigente como la oposición ultra derechista, no elimina organizaciones o movimientos, y superamos la era terrible de manifestaciones salvajes. El Gobierno de Zelenski en Ucrania prohibió varios partidos políticos de oposición, entre ellos el que fundó el periodista Shari, hoy en peligro su vida por los intereses de la "democracia pitiyanqui", desatados en rusofobia después del 24 de febrero 2022, y sin dar luz a la defensa de Rusia que no se cansa de explicar por qué actúa protegiendo sus fronteras ruso parlantes, que desde 1991 han tratado de ocupar mediante golpes de estado y triquiñuelas políticas, organizaciones serviles a EE UU, lo lograron en Ucrania.
Afortunadamente en Venezuela, con elecciones y paz, vacaciones y compras, pese a la explotación del hombre por el hombre liderada por sujetos deseosos de mayores ganancias, superamos paso a paso el sufrimiento de la hiperinflación inducida, las medidas coercitivas y las amenazas. Vamos saliendo día a día en paz revolucionaria socialista, anunciando elecciones a finales del 2024, para que sea el pueblo quien decida.
La mácula que oculta la oposición radical desconcertada y violenta, herida en su orgullo sembrando infundios sobre el gobierno, es que los resultados de las elecciones son firmados por representantes de partidos adversarios del chavismo e igualmente por los de la revolución, múltiples auditorías al conteo de votos electrónicos, sin embargo ante la prensa los opositores hablan de "elecciones libres", y sin vergüenza alguna les parece bien donde ganan, irascibles e intransigentes hacen lo que les viene en gana y llaman dictador a Nicolás Alejandro Maduro Moros.