La tristeza y la alegría, son el pan nuestro de cada día, tanto como la rabia y la ternura, el amor y el odio, la guerra y la paz, múltiples palabras pareadas paradójicas de la forma ser y no ser, desde muy allá de las contradicciones, de los Vedas, de Buda, de Heráclito, de Laozi, y, de la grafía grata gratificante, en el lienzo pictórico blanquinegro del yin yang, y, de su sombría penumbra whitmaniana, de allá vienen estos barruntos de la tristeza y la alegría, como el pan nuestro de cada día. La tristeza y la alegría, el pan nuestro de cada día, asina, la rabia y la ternura, el amor y el odio, la guerra y la paz, casos correlativos límite contradictorios caliginosos Maleo 2001 de equilibrio dinámico dialéctico difuso en el medio maleoiano profundo Maleo 2001. A mas y a más, y, todas las contradicciones han de ser endosadas a Buda y a Heráclito y a Laozi con el yin y yang, abanderados y padres de las contradicciones. Buda decía, vivimos en un mundo plagado de contradicciones. Heráclito decía, la naturaleza se entiende, no con los semejantes, la naturaleza se entiende con los contrarios, en una relación correlativa recíproca tensa armónica simultánea contradictoria equilibrada. Heráclito, dejaba ver con la armonía alterna antagónica el equilibrio dinámico dialéctico difuso, y, ejemplificaba el movimiento, raíz dela contradicción, con el río, y, helo ahí su famosa paradoja de la catedral catacresis y del templo oxímoron cleuasmo quiasmo río efesoíta, a según y el cual, que un río no es dos veces el mismo rio y es el mismo rio las dos veces. Y, Buda y Heráclito, padres y abanderados de las contradicciones, y, vinculados con Laozi a la grafía gráfica gratificante del yin y yang y su sombría penumbra whitmaniana, eran los padres y los abanderados de la síntesis sincrética ecléctica, situados siempre simpatizantes del camino comino comido medio, el medio maleoiano profundo Maleo 2001. Y, Pitágoras y Sócrates, también jugaron en el center field eran jardineros centrales del Magallanes en la slash diagonal hipotenusa contrarrecíproca ad absurdum mayéutica del teorema directo y del teorema indirecto en el cuadrángulo rectángulo socrático, en que ha de encontrarse la verdad socrática profunda en que y donde Sócrates se pegaba a los escuálidos sofistas burgueses oligarcas de entonces antaños plañideros, y, esto dolía mucho a Aristóteles, que jugaba en los extremos exclusivos excluyentes de su lógica del tercio excluso, que la Iglesia de Santo Tomás y que el templo imperial capitalista neo liberal gringo go home le ha sacado la punta puta, y, hoy, asina está planteado, y, a mas y a más con el parlamento nefando nefasto de George W Bush, y, el derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas, parlamento exclusivo excluyente aristotélico del, de él, George W Bush: O estás conmigo o estás con mi enemigo, en que hablara Aristóteles con su lógica exclusiva del principio del tercio excluso, y, que no con el enfoque moral del exceso y el defecto, que admite el medio aristotélico abismal, el medio maleoiano profundo entre el tercio excluso y el tercio incluso de Maleo 2001. Y, como tiénese dicho que Pitágoras y Sócrates, y, que jugaron en el center field como jardineros centrales del Magallanes en la slash diagonal hipotenusa contrarrecíproca ad absurdum mayéutica del teorema directo y del teorema indirecto en el cuadrángulo rectángulo socrático, en que está la verdad socrática profunda de Sócrates, en que está la teoría holística unificada einsteiniana de Alberto Einstein, en que está la teoría céntrica universal unificada teilhardiana de Pierre Teilhar de Chardin. En la verdad socrática profunda de Sócrates, en la verdad maleoiana profunda de Maleo 2001 de todos los casos correlativos límite contradictorios caliginosos de la forma ser y no ser, es continente que contiene los contenidos de las múltiples palabras pareadas paradójicas de la forma ser y no ser, de la rabia y la ternura, del amor y el odio, de la guerra y la paz, tanto como el pan nuestro de cada día, la tristeza y la alegría.
Con digresión y sin digresión la tristeza y la alegría, tanto como el pan nuestro de cada día, tanto como el amor y el odio, la guerra y la paz, la rabia y la ternura, la guerra y la paz, han de tener al medio maleoiano profundo, a mas y a más del pan nuestro de cada día, han de tener al ojo de don Francisco entre manifiestas nalgas innegables de las mesas misas musas, las nalgas apaga fuego de la guerra entre Rusia y Ucrania. Agora ahora hogaño, acaso hemos de estar ausentes siempre de la de la tristeza y de la alegría, del dolor y la alegría, del samsara y nirvana, del nihilismo y eternalismo de Buda ¡Nunca jamás! La tristeza y la alegría, tanto como el pan nuestro de cada día, viajera diptica compañera, tanto como natura y persona, díptico del Libertador Simón Bolívar. La tristeza y la alegría, tanto como el pan nuestro de cada día, y, no sé si ya del, de él, con el vientre ya una trae a esta alada diptica compañera, a mas y a más, pero y empero, han habido hembras, que la han padecido durante el embarazo, y, a la larga el producto final ha de convertirse en un acongojado atrabiliario inválido, invadido mas y más de tristeza que de alegría, y, esto trae consigo el desequilibrio social, asina sea en una muestra, y, en el mundo hay bastante, que son bastante. La alegría y la tristeza, casos correlativos límite contradictorios caliginosos que han de tener equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico en el medio maleoiano profundo, y, que este se ha de encontrar en cada hombre y en cada mujer detrás de la nariz, punto crucial decisivo, en que se conjugan todos los sentidos del cuerpo y del alma, punto crucial decisivo que ha de desarrollarse a fin de equilibrar cuerpo y alma, y, asina ha de cumplirse el eslogan del deporte venezolano: Mente sana y cuerpo sano, y, asina ha de tenerlo nuestra atleta venezolana la campeona olímpica Yulimar Rojas 2021. Sin medio maleoiano profundo no ha de haber mesas misas musas ni nalgas graciosas quevedoianas ni ha de existir el ojo de don Francisco ni el ojo de don Quijote ni el ojo del Libertador Simón Bolívar ni el ojo de Jesucristo, asina muestren buen callo en el culo devenido de Rocinante, de Palomo y de la Pollina que le regalara María Magdalena al Nazareno de Nazaret Jesucristo que solían montar juntos y andar por montes y juncos egipcios en amores perrunos libérrimos, y, el callo de Cristo, María Magdalena, atocaba con caricias prohibidas con gusto, asina Manuelita, al callo, del Libertador Simón Bolívar en un lugar de Santa Marta, tanto como Dulcinea del Toboso, en el imaginario del Caballero de la Triste Figura Don Quijote en un lugar de La Mancha, a según el fino ojo mágico literario fantástico de don Cele Ávila, que contaba con gracia locuaz convincente en la plaza Bolívar de San Carlos, y, que chamos atentos escuchábamos a aquel hombre que nos acariciaba el alma con sus cuentos. Y, como tiénese dicho el callo en el culo de Jesucristo, del Quijote y de Simón Bolívar, es el mismo ojo de don Francisco de Quevedo, entre nalgas, tanto como el pan nuestro de cada día, el de hoy es siempre todavía, ha de estar entre la tristeza y la alegría.
Si la tristeza y la alegría, son el pan nuestro de cada día, tanto como la rabia y la ternura, el amor y el odio, la guerra y la paz. Entonces sea dicho que la tristeza y la alegría, que son como el pan nuestro de cada día, son contenido que contiene el continente de las múltiples palabras pareadas paradójicas de la forma ser y no ser. Ergo sea dicho que la tristeza y la alegría, que son el pan nuestro de cada día, ha de venir desde muy allá de las contradicciones, de los Vedas, de Buda, de Heráclito, de Laozi. Ergo vergo sea dicho que la tristeza y la alegría, que son el pan nuestro de cada día, ha de tener su grafía grata gratificante en el lienzo pictórico blanquinegro del yin yang. Ergo vergo sea dicho que el pan nuestro de cada día del Apóstol Mateo Evangelista del Padre Nuestro, es hoy siempre todavía entre el testimonial experiencial pretérito y el advertido devenir porvenir quijotesco, que el pan nuestro de cada día del Apóstol Mateo Evangelista en el Padre Nuestro, es fiel fidedigno justo medio maleoiano profundo Maleo 2001, es el equilibrio dinámico dialéctico difuso, en la perogrullada primera vez de Perogrullo entre la tristeza y la alegría.