Recientemente, el Embajador de Venezuela ante la ONU, el Historiador y Diplomático Samuel Moncada, compareció ante la Asamblea Nacional (AN) y se instauró un ciclo de preguntas y respuestas por parte de los Diputados participantes a las cuales respondió una por una, a pesar del veto-censura que le quiso imponer, el presidente de la AN, Jorge Rodríguez, quien forma parte del "Grupo de los Rodríguez", alegando razones de "reserva"; pero no obstante a pesar de esta obstrucción, con fines de esconder la verdad, el Embajador Moncada logró dar su mensaje y se entendió claramente el propósito de su visita, que mas que todo fue un llamado de alerta al país, dado el momento existencial que esta vivienda la patria y no solo Venezuela y Nuestramérica sino todo el globo terráqueo, ya que estamos viviendo un cambio de época, es decir, está muriendo definitivamente el mundo de la explotación del hombre por el hombre, expresado en el Imperialismo Anglosajón (USA, Inglaterra, Canadá, Australia y Nueva Zelanda; "Los 5 Ojos"), pudieran caer con Europa, si Francia, Alemania e Italia, no se zafan de la dependencia de los gringos, los jefes del imperio anglosajón, y el Japón, recientemente autorizado indebidamente por los anglosajones, al igual que Alemania, a rearmarse, ambos, tienen un puesto y caben, en un mundo multipolar.
Moncada fue muy claro y excesivamente explicito, a pesar de las obstrucciones, de dos cosas: Que los Estados Unidos de Norte-América (USA), el caporal de los anglosajones, no es confiable; es decir, ningún acuerdo que hagamos con ellos será cumplido; su única meta obsesivamente prefijada, es recolonizar a Venezuela y apoderarse de nuestro petróleo, que ahora lo necesita más que nunca; y en segundo lugar, y más que todo, lo segundo, Venezuela, literal y verdaderamente hablando "Está en el Ojo del Huracán"; en otras palabras vienen por nuestro petróleo, por las buenas o por las malas; lo que implica que tenemos que prepararnos para la guerra sino queremos retrotraernos a épocas anteriores a 1810, o sea, volver a ser colonia, en sentido estricto.
Entre los parlamentarios preguntantes, estuvo Timoteo Zambrano de la derecha democrática y nacionalista (No golpista, no pitiyanqui), quien hizo una pregunta muy acertada, que a todos luces demostraba que había entendido con claridad meridiana lo que quiso decir el Embajador, consistente, en: qué sentido tendría el "dialogo de México" con el Imperialismo Anglosajón y una derecha que es su apéndice, si, este de todas maneras vendría por nuestro petróleo, por las buenas o por las malas (Ojo: lo digo en mis palabras, pero Timoteo las dijo en las palabras del), que aquí fue cuando, el presidente de la AN, invoco "la reserva" que prácticamente le censuró la respuesta al Embajador; pero afortunadamente el Diputado Bolivariano Revolucionario Pedro Carreño, reformulo la misma pregunta pero desde otro ángulo y Moncada, dijo, lo que ya había dicho en la intervención y respondió en forma categórica, el mensaje de este escrito "Los Anglosajones, No Son Confiables", no tenemos nada que dialogar con ellos a no ser que reclamarle la forma en que nos van a devolver e indemnizar, tanto el dinero que nos han robado como los daños ocasionados por la guerra económica; y con la derecha lacaya, creo que es el poder judicial quien tiene que hablar con ellos y desde un estrado como reos por los delitos de terrorismo, violación de DDHH, delitos de lesa humanidad y traición a la patria; lo que sucede con el "grupo de los Rodríguez", en donde no solo están Delcy y Jorge sino que hay otros Rodríguez, por ahí y otros que no son Rodríguez pero que pertenecen a ese equipo; quienes serian "neoliberales tardíos", llegan al banquete del monetarismo o miltonfriedismo demasiado tarde, muy tarde, ya cuando se acabó el güisque y la orquesta esta guardando los instrumentos.
Estos "Rodríguez", se precipitaron a celebrar, el hecho que los gringos hayan anunciado (Fue el mero anuncio nada mas) que iban a "aliviar" las ilegales y de lesa humanidad sanciones, leyes extraterritoriales que violan el derecho internacional, humanitario y de gentes; violan la carta fundante de la ONU; y son tan osados, estos Rodríguez, que se atrevieron a "cantar victoria" por ese anuncio de los imperialistas y "la amenaza" de llegar a un trato petrolero con Venezuela.
El Embajador Moncada, desde las entrañas de la bestia, en donde corre muy buena información, actualizada y verdadera, vino a alertarnos a prevenirnos a decirnos "Hay que Desechar las Ilusiones y Prepararse para la Guerra" (Nótese que digo "guerra" y no lucha como lo dijo Mao, porque es una guerra de verdad), que el Imperialismo Anglosajón, en nada ha cambiado sigue con los mismos planes, y más bien viene en escalada, viene por nuestro petróleo, por las buenas o por las malas. Moncada lo dijo de esta forma: "No Son Confiables" y "Venezuela Esta en el Ojo del Huracán"; esto último traduce que: El Imperialismo Anglosajón y sus perritos falderos de la Unión Europea, no tienen petróleo y urgen de manera desesperada, existencial del petróleo venezolano, la principal reserva del mundo; y para extraerlo, no van a pedir permiso". Vienen por nuestro petróleo, por las buenas o por las malas; significa que "Venezuela Esta en el Ojo del Huracán".
Moncada puso como ejemplo el embargo petrolero de los países árabes de la OPEP del año 1973, por el ataque Israelí a Palestina, que ocasionó un abrupto aumento del precio petrolero, cuestión esta que ayudó a Venezuela y se dio el fenómeno conocido como "La Venezuela Saudita" con CAP I. En aquella oportunidad, hubo apenas una posibilidad de dejar sin petróleo a los países del Atlántico Norte, apenas una posibilidad; y Nixon amenazó con invadir los campos petroleros por la seguridad del capitalismo. Que será hoy en día, mayo del 22, 49 años después, cuando no es solo una posibilidad sino una realidad; El Imperialismo Anglosajón, no tiene petróleo y está urgido de petróleo, él y sus aliados o cómplices europeos y estando en Venezuela la principal reserva petrolera del mundo inactiva, obviamente que no lo van a permitir. Hay que desechar las ilusiones y armarse para la guerra; en contra de nuestra voluntad y querencia, ya estamos involucrados en la III Tercera Guerra Mundial.
Razón tuvo el compañero, Diosdado Cabello, cuando desde su programa nos alertó que USA no había aliviado nada las mal llamadas sanciones, verdaderos actos de guerra económica; fue un preventivo, al discurso del Embajador Moncada. "No Son Confiables" y "Venezuela está en el Ojo del Huracán". Nos decía, al igual que el Embajador Moncada, al día siguiente, no hay que cantar victoria, y nada que celebrar, hay que desechar las ilusiones.
El mundo, al menos en los próximos 10 años, cuidado si no mas o para siempre, ha de dividirse en dos, antes del 24 de febrero del 22 y posterior a esa fecha cierta del inicio de la tercera guerra mundial, que marcara el principio del fin del Imperialismo Anglosajón y con ellos morirán el capitalismo salvaje y de barbarie cuyo máximo exponente son ellos precisamente; una vez derrotado militarmente por Rusia y económicamente por China y se empiece a darle vigencia a la carta de San Francisco Carta Constitutiva de la ONU.
Una vez en vigencia eficaz, la carta de la ONU, el mundo será otro, aunque siga predominando el capitalismo pero ya será un capitalismo domesticado, un capitalismo con sentido social, en donde prevalezca el ser humano y no las riquezas materiales, aparte que Nuestramérica será socialista
Los diálogos de México y las medidas que han venido tomando el gobierno bolivariano, por la influyente y de pesada presión de Los Rodríguez dentro del proceso revolucionario; pertenecen a tácticas de conveniencia pre-24-Febrero pasado; ya toda estrategia diagramada en fecha anterior al 24-F-22, esta obsoleta, ha caducado hay que reformatearla; impera una alianza estratégica militar-económica con la Rusia de Putin para protegernos al máximo de la agresión imperialista, quienes vienen por nuestros campos petroleros y apara aprovechar esta coyuntura para liberarnos definitivamente del Imperialismo Anglosajón, tal y como aprovecharon nuestros Libertadores, Miranda y Bolívar, las guerra Napoleónicas para independizarnos de España; de lo contrario volveremos a ser colonia como lo éramos antes de 1810 y perderemos la integridad como país y como sociedad.