Juan Veroes y sus blasfemias (I)

Sábado, 11/06/2022 11:13 AM

Y el hombre creó a dios a su imagen y semejanza

Juan Veroes

Habiendo cumplido el mes pasado 82 años de edad y considerando que tengo pleno derecho a expresarme por escrito y compartir con quien quiera leer mis experiencias y vivencias, voy a comenzar a realizar la tarea para la cual pienso vine a este mundo, o sea plasmar un mensaje y regresar al infinito a donde inexorablemente debo volver.

https://www.swissinfo.ch/spa/nigeria-ataque_unos-estudiantes-matan-a-una-compa%C3%B1era-en-nigeria-por-blasfemar-contra-mahoma/47590538

Sabiendo que todavía hoy en dia se corre el peligro de ser asesinado por "blasfemar", yo me voy a arriesgar hacerlo, de pronto con eso me gano mi pasaporte para entrar al cielo. Primero debo llegar a ciertos acuerdos con mis lectores (aunque usted no lo crea, los tengo, no son muchos pero los pocos han sido consecuentes),.

Primera Blasfemia: La Palabra Creó a Dios. Desde que el hombre, ser humano, Pitecantropus Erectus, Hability o Sapiens, o como se le quiera llamar, hizo su aparición o evolucionó desplazándose erguido en sus dos extremidades inferiores ha necesitado de emitir sonidos para comunicarse con sus semejantes u otras especies. Esos sonidos fueron evolucionando hasta llegar a construir los idiomas o lenguas hasta hacer la pronunciación homogénea que se expresa mediante símbolos, letras o gráficos. En todas las civilizaciones hasta ahora conocidas, la palabra oral y escrita ha sido de primordial importancia y el mundo que hoy tenemos es un producto de La Palabra.

En la actual civilización, solamente es posible entendernos por medio de símbolos; producto de acuerdos previamente aceptados y enseñados mediante la educación que se les hace a todo nuevo miembro cuando ingresa a uno de los grupos nacionales ya constituidos. La Biblia en Juan:1 comienza con EL VERBO HECHO CARNE: " En el principio era el Verbo y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios''.( o sea La Palabra era Dios).

El faltar a La Palabra, el no ser Respetuoso y Responsable de lo que se dice, siempre ha traído consecuencias a quien las emite. Con La Palabra se construye y se destruye; lo que se dice o deja de decirse, es y ha sido fundamental en todas las épocas de la historia humana.

Es La Palabra quien ha determinado, quienes son todos y todas esas grandes figuras humanas que la historia universal ha registrado como las mas importantes. Estoy completamente seguro que las mismas Energías, Fuerzas, Luces, Dioses o el nombre que les queramos dar, que hicieron posible la aparición en el planeta que llamamos Tierra, a seres humanos como, Moisés, Sócrates, Jesús, María, Spinoza, Marx, Bolívar, Hitler, Einstein, Fidel, El Che y Chávez, entre otros y miles mas que la llamada Civilización Occidental venera, son las mismas que hicieron posible mi aparición en la ciudad de Caracas un 14 de mayo de 1940 y como yo la de millones de personas que conformamos la población mundial actualmente estimada en más de los 8 mil millones; cada uno(a) con un propósito y una identidad programada en su ADN. No ha existido, ni existe ninguna evidencia científica que haga suponer que los llamados grandes hombres y mujeres ilustres han surgido de una clase superior y yo de una casta inferior. Si existe alguna diferencia es debido a los Acuerdos establecidos creados a través de La Palabra Humana, la misma que Creó a Dios. Muchos han sido los dioses creados por el hombre y cada civilización y épocas históricas han tenido los suyos.

Hay unas diferencias que son fundamentales en los términos: CRIATURAS y CREATURAS. Si aceptamos que los seres humanos somos Criaturas y además hechos a la Imagen y Semejanza de Dios, entonces Dios tuvo que ser criado por alguien y si somos Creaturas, o sea CREADOS, entonces toda la Responsabilidad de nuestra existencia es de quien nos Creó. Bueno, dejemos esta primera blasfemia hasta allí y los invito a continuar en el próximo escrito que debe aparecer el lunes.

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