Todos los secretarios de Educación al servicio del presidente sean Muñoz, Bártlett, Josefina o Leticia

Martes, 16/08/2022 09:42 PM

1. La educación en México ha sido la misma desde hace 200 años; ha sido la búsqueda de cómo acomodarse en el sistema capitalista. Cualquiera que ocupe el cargo de secretario de educación –con título universitarios o normalista es un secretario, burócrata, sumiso a presidente. Su misión es dar la cara y su nombre para firmar lo que le ordenen desde arriba. Los planes, programas, asignaturas, metodologías, técnicas pedagógicas, son las mismas que cada sexenio le hacen algunas reformas (discursos de cambios para que nada cambie). Así que nadie se alarme, que no malgasten saliva. Para que cambie la educación hay que cambiar el sistema político-social.

2. Los únicos secretarios de Educación fuertes, con mucha independencia del presidente de la República, han sido Vasconcelos (1921-24), Bassols (1931-34) y el mismo Torres Bodet (1943-46) y (1958-64); los tres: el primero fundando la SEP, centralizando la educación, incluso siendo candidato independiente a la Presidencia de la República. Bassols se enfrentó a la derecha sin dar pasos atrás, con la educación sexual y Torres Bodet, único que ocupó dos veces la SEP para frenar la educación cardenista, para crear el sindicato (SNTE) de maestros y producir los libros de texto gratuitos. Todos, toditos, los demás sólo fueron secretarios obedientes del presidente.

3. El presidente de la República no es un sabio para conocer de todo, pero siempre está rodeado de 50 consejeros o asesores que le explican lo que pasa y qué camino debe tomar. Los secretarios del gabinete sólo obedecen ciegamente al presidente; cualquiera que demuestra algún signo de desacuerdo se va para afuera. El presidente pone y quita a su antojo. Así que ningún secretario de educación puede hacer nada sin las órdenes del presidente. No importa si tiene muchos títulos universitarios o simple maestro normalista porque funcionan como simples burócratas con muchos asesores que le trazan el rumbo.

4. Algunos muy políticos como Muñoz Ledo, Reyes Heroles y Bártlett, siendo secretarios de la SEP tuvieron confrontación con su presidente y tomaron el camino de pasar a otro cargo, pero todos los demás se la pasaron campantes cobrando buena lana y haciendo negocios como cualquier gris, sumiso, funcionario que sólo obedece órdenes. Cárdenas tuvo 2, Ávila Camacho a 3, durante 30 años (1946-76) sólo 1; López Portillo 2, De la Madrid 2, Salinas 4, así hasta llegar a los tres de López Obrador. Sin embargo, no depende de títulos, porque todos son burócratas que obedecen sin chistar, las políticas presidenciales que vienen siendo copias del anterior sexenio.

5. Estuve 42 años como profesor -siempre rebelde, en oposición permanente a los gobiernos- en todos los niveles educativos. Cuatro años profesor de primaria y militante del MRM, otros cuatro en la secundaria en oposición sindical; 15 años profesor del CCH-UNAM y dirigente sindical de profesores; 14 años en la UPN, dos años de investigador, más 18 años como profesor en la Universidad de Yucatán siendo militante de la CNTE. Participé en centenares de protestas, escribí libros y miles de artículos acerca del magisterio, su sindicalismo, la escolaridad y la educación. Me respondió un artículo sobre salarios mi muy amigo de Chihuahua, hoy diputado: yo sólo gano 73 mil al mes; le respondí que como profesor tiempo completo jamás cobré en 42 años, más de 25 mil.

6. No puede olvidarse que lo que jamás faltan en los funcionarios son los discursos para hablar de "cambios verdaderos"; pero tampoco se olvidan de sobornos a empresas periodísticas para ponerlas a las órdenes de las secretarías. En la SEP puede cada presidente nombrar a su amigo o pariente porque sólo servirán para firmar. Si acaso hay que leer un discurso pues tendrá una veintena de asesores para redactarlos. No olvidaré al presidente Fox, de los más tontos de la historia, que nombró a su amigo, el norteño Reyes Tamez que –en vez de estudiar y prepararse- iba con la pareja a cargar a los mercados los bultos de compra de la esposa: Marta Sahagún. Espero que ningún secretario de gabinete llegue a esa bajeza. (16/VIII/22)

 

Nota leída aproximadamente 1504 veces.

Las noticias más leídas: