Lo de la igualdad social fue una gran mentira, que pudo mantenerse como verdad, hasta cuando hubo abundantes divisas (dólares). Es justo reconocer, que en momentos difíciles; Chávez mantuvo esta política social de picar un poquito mejor la torta.
En definitiva, le dieron curso a una política de igualdad social, bajo el lema de darle a los trabajadores un pedacito más de la torta de la renta. Hasta ahí llegó más o menos esa igualdad. Una vez que la renta petrolera se fue resintiendo, esta "igualdad" entra en una etapa crítica y hoy; social y políticamente somos más desiguales que ayer. En el fondo y con un bonito disfraz, se impone la tradicional política de ajuste, que no parece fondomonetarista (FMI), pero estamos como en presencia de una franquicia de ajustes propia del FMI.
Si algún "revolucionario" se viene con ese sainete de las sanciones y el bloqueo como excusa para explicar está profunda desigualdad que hoy confrontamos, sólo tiene que revisar algunos datos y podrá ver, sin mucho esfuerzo, que hoy, los viejos ricos son más ricos y a ese grupito viejo de ricos, se le ha sumado otro pequeño grupito de nuevos ricos.
Sin aún se creen, que está "revolución" tiene algún compromiso con los trabajadores y se orienta bajo una auténtica política de la igualdad, porque hay un presidente que dice ser obrero, pues debe pensar en esto de la tripartita, que apenas hace unos años la cuestionamos. Muchos revolucionarios criticaron a Teodoro Petkoff por la activación de una tripartita, que parece mejor que la de hoy.
Recientemente, Gustavo Martínez Rubio en casi en un hilo en las redes, no da detalles del sentido y orientación política de esta tripartita. Gustavo Martínez Rubio no lo dice en estos términos, pero leyendo lo expresado por él, cabe la calificación de una trampa para cazar bobos.
¿Cómo una tripartita cómo está, puede ser un instrumento de lucha, si en la tripartita están, TODOS los que han venido aprobando instrumento como la ley antibloqueo, la ley de las zonas económicas especiales, ley de protección a las inversiones extranjeras, ¿memorándum 2792 y últimamente el instructivo ONAPRE?
En el "diálogo" tripartito está el gobierno, que sabemos nada tiene de obrero, están unas centrales "sindicales" muy burocráticas, pero que es el mismo Gobierno. En la tripartita están prácticamente los que apoyan el memorándum 2792 y el instructivo ONAPRE. En está tripartita también está, la OIT que sabemos de antemano que pito toca y está los patrones de Fedecámaras. Un diálogo entre patrones para joder al obrero.
Gustavo Medina Rubio nos coloca frente a una situación que una organización de izquierda debe y tiene que saber valorar. Dice Gustavo Martínez Rubio:
"Hay que decir por la calle del medio que ese diálogo tripartito es un contubernio profundamente anti obrero. Y que el diálogo que necesitamos realmente los trabajadores es para discutir por abajo y entre iguales un poderoso plan de lucha (...) El diálogo del gobierno, los empresarios, algunas burocracias sindicales y la OIT es parte de la política ajustadora del gobierno y los patronos privados. Hay que decir claramente lo que es eso y ponernos a organizar realmente las luchas por abajo" https://mobile.twitter.com/gmartinezru1978/status/1574739353200627712
Nada, pero ni un tantito, puede esperarse de un gobierno que ya tiene todo un marco jurídico que le va dando forma perfecta a esta cosa que no es revolución y ni un capitalismo de Estado como el que conocimos. Nada puede esperarse de un gobierno que impuso, sin consulta con los trabajadores, un memorándum 2792 y un instructivo ONAPRE.
Es otra mentira y bien grande, esto de la democracia participativa.