¿Sabia Ud. Amigo lector que hoy se celebra el Dia del Politólogo?. Seguro que no lo sabía y no se perdió de nada con no saberlo. Bueno, sobre ese tema quiero llamar su atención, pues es posible que alguna vez se encuentre con un espécimen frente a usted y que cuando se lo presenten le digan: "Le presento a fulano o a fulana de tal que es Politólogo (a)" y usted no sepa qué hacer con esa información. Aclaro, imagínese que a usted le presenten a un médico o medica; a un ingeniero o ingeniera, a un abogado o abogada, a un veterinario o veterinaria; usted inmediatamente sabe de su utilidad y el tema de conversación a iniciar durante el encuentro. ¿Cree Ud., que con un Politólogo o Politóloga le pasará lo mismo?
Bueno, le presento al Señor aquí presente, autor del artículo y Politólogo graduado en la ilustre Universidad de los Andes de Mérida, mención Cum Laude; grado universitario logrado durante 5 años de estudios- (1990-1995). Así que tengo propiedad y autoridad para hablar del tema. ¿De acuerdo? Si no lo está, con no seguir leyendo no pierde ni gana nada. Si continua no me eche la culpa, ni me recuerde a mi progenitora.
¿Sabía usted que existe una profesión la cual está catalogada como la más antigua del mundo?, bueno la de Politólogo (a) es la más nueva y nadie paga un centavo por ella. Yo tengo 27 años de graduado y nunca he conseguido un cliente o paciente que haya solicitado mis servicios profesionales, es tal que cuando conozco a alguien y sabe que soy Politólogo, lo primero que hace es tratar de demostrarme que él sabe más que yo sobre cualquier tema que tenga que ver con la vida política. Mientras menos grado académico tiene, más demostraciones hace para convencer a los que podrían estar a nuestro alrededor, que quien sabe es él y no yó y que mi título me lo puedo meter en el bolsillo.
La pregunta que viene del lector: Bueno. ¿Y por qué estudiaste eso? Yo le respondo: Es la mejor decisión que he tomado en mi vida, pues gracias a esa carrera universitaria adquirí una visión del mundo que me ha ayudado a entender y a comprender los hechos que a mi alrededor suceden, a asumir las responsabilidades que a mí me corresponden y a saber cuál es mi ubicación en el espacio de acuerdo al tiempo que me ha correspondido estar en este planeta llamado tierra. Hoy a los 82 años de edad puedo decir que aporté lo que debía y recibí lo que merecía.
El Politólogo(a) sabe que con los conocimientos adquiridos sobre la Teoría de Sistemas, está en capacidad de encontrar la lógica de funcionamiento de cualquier Sistema Productivo, Social o Cultural en el cual existan Insumos que pasen por un Proceso para obtener un Producto del tipo que sea y este Saber les dá las herramientas básicas con el cual puede hacer su Aporte al crecimiento evolutivo de la especie a la cual pertenece. Cuando sabes que está pasando a tu alrededor, el por qué y el para qué; entonces tienes la opción de participar, abstenerte o negarte y pasas de simple espectador a ser un Actor activo en el drama de la vida. Y eso vale la pena y le dá sentido a la existencia humana.
Yo pienso que la existencia de la Profesión de Politólogo debe ser eliminada como tal e incorporar su contenido básico como una materia, la cual prive su aprobación para obtener cualquier otro título profesional. Si existe alguna razón lógica para no eliminarla entonces re direccionar el contenido del pensum curricular hacia el manejo de las técnicas que son necesarias para ejercer cargos en el gobierno; de manera tal que quien salga graduado de Politólogo sea el primer candidato a ejercer los cargos de elección popular o por designación en los cargos públicos donde se decidan cuáles serán las políticas públicas a ejecutar en cualquier ente de los Poderes Públicos del Estado.
El Doctor Hugo Moyer en la Escuela Latinoamericana de Gobierno, la cual está funcionando en el Estado Táchira, seguro estoy podrá hacer un valioso aporte a la idea que he expresado en este artículo, el cual tiene como único propósito llamar la atención a las autoridades educativas del país para que hagan una revisión de las Carreras Universitarias que ahora están impartiendo y puedan tener criterios para las que realmente sirven al desarrollo del país.
Les agradezco a los colegas que seguro leerán este artículo, solo por la curiosidad del titulo, que yo no estoy atentando contra sus economías personales, pues seguro estoy que nadie gana un centavo por ser Politólogo, sino para que se especialicen en el ejercicio de gobernar en forma democrática al servicio de los menos favorecidos. Así que ni se les ocurra recordar a mi progenitora.