La tragedia ocurrida en Las Tejerías, estado Aragua, producto de las fuertes lluvias que se han presentado en el país ha sido muy dolorosa para los venezolanos. En cada rincón de nuestra patria sentimos y lamentamos las enormes pérdidas humanas y materiales registradas en la zona tras el deslave y sin duda todos estamos unidos en oración para que nuestros hermanos puedan ir superando esta difícil situación a la brevedad posible. Desde aquí todo mi apoyo para las familias afectadas.
Han sido días de mucha tristeza en los que debemos destacar, como una luz en medio de la calamidad, las enormes y hermosas muestras de solidaridad que ha recibido este pueblo guerrero desde todos nuestros estados, demostrando una vez más el carácter humano que nos identifica y la fuerza que tiene la unidad en la acción para afrontar las situaciones adversas.
Con gran ímpetu ha surgido la vocación de ayuda ciudadana, el valor fundamental de apoyar y proteger a nuestro prójimo, y esto se ha traducido en la activación de centros de acopio por parte de las diferentes instituciones, organizaciones políticas, no gubernamentales, deportivas, musicales, fundaciones, pequeños y grandes comercios para recolectar importantes insumos que están siendo enviados a Las Tejerías desde toda Venezuela. ¡Es realmente admirable!
También hemos visto la entrega de nuestro presidente Nicolás Maduro, quien estuvo en el lugar dirigiendo personalmente las operaciones con todo su Gabinete, trabajando fuerte junto a los funcionarios, los cuerpos de seguridad ciudadana, la FANB, los voluntarios que se han trasladado hasta el lugar para colaborar y brindar una mano amiga a quienes tanta ayuda están necesitando y con esto ha iniciado la recuperación de esta localidad. Los resultados son y serán cada vez más visibles. Con el apoyo de todos y la bendición de Dios van a salir adelante.
La solidaridad, el optimismo, la unión y la organización entre nosotros mismos siempre dará buenos resultados. El sector Aricagua, en el municipio Antolín del Campo de mi amada Nueva Esparta, es también un gran ejemplo de lo que puede lograrse cuando la comunidad organizada se fija un objetivo y comienza a ejecutar acciones positivas para alcanzarlo.
Recientemente decidimos unirnos para desmalezar, limpiar y adecuar un gran terreno para el deporte y en cuestión de horas ya podían verse los primeros avances en gran parte del lugar. Cada quien puso su granito de arena: hubo quienes cortaron, quienes recogieron, quienes cocinaron y hasta cantaron. Entre todos trabajamos por un espacio para el disfrute y el sano esparcimiento de nuestros niños y jóvenes y sé que muy pronto el resultado será extraordinario.
Con determinación, constancia y esfuerzo podemos materializar cualquier meta que nos tracemos. Sigamos caminando siempre juntos forjando un destino bonito para todos. Un abrazo.