"Casi todo lo que realice será insignificante, pero es muy importante que lo haga". Mahatma Gandhi.
"Un alumno confesaba que se tomó como una responsabilidad irrenunciable la recuperación del viejo ornitorrinco que lleva más de un siglo en el instituto. El ornitorrinco, ese bicho que nunca dejará de ser exótico, con cuerpo de mamífero, y pico de ave convertido, tanto tiempo después, en símbolo del desafío que supone el impulso de aprender". Mercedes Banardo Timón.
Cada vez son más los lamentos de la grave crisis económica que atraviesa Venezuela, debido a este ornitorrinco modelo político, son muy pocos los lideres del mundo de la política, de la universidad, de la cultura y de las organizaciones sociales que denuncian el fracaso del actual modelo económico venezolano que en 23 años no logró erradicar la pobreza, y genera cada día que pasa, más desigualdades, y problemas medioambientales, con estos torrenciales aguaceros, y donde no se vislumbran, posibles vías para ir construyendo, un nuevo modelo socioeconómico más humano, y sostenible.
El actual poder económico-legitimador, que sustenta este modelo, parece que cada vez domina la enclenque economía improductiva e indigna, imponiendo su voluntad en contra de un ciudadano que lucha por sobrevivir, y sometiendo las vidas de los que sobreviven al parasitario poder militar.
¿Se podrá cambiar esta situación, con la ciudadanía descontenta de ambos bandos de chavistas y opositores? ¿La ciudadanía es capaz de hacerlo, organizándose bajo un solo mando? ¿Con una potente unidad, y un liderazgo fuerte se podrá superar el sentimiento de impotencia y de desmoralización que supone enfrentarse al actual poder militar, policial y totalitario? ¿Se podrá fabricar el David libertario, que venza al Goliat totalitario?
Las claves del éxito en la política, plantea que la historia de David y Goliat, busca replantear entre los estrategas políticos, lo que sabemos sobre el poder. Es lograr la victoria del pequeño frente al grande, del desvalido frente al poderoso, una batalla, aunque tengamos todo en contra, siempre con tácticas, y estrategias bien cimentadas, habrá posibilidades de salir triunfante.
Se ha reexaminado el mito o la táctica, por estrategas políticos militares en recientes análisis, donde: "los llamados débiles o, mejor dicho los eternos perdedores", no son en realidad las víctimas, de los comerciantes campesinos colonizadores explotadores: árabes, chinos e iraníes, sino aquellos que, precisamente por sus dificultades, no pueden llegar más lejos.
La fortaleza que exhibe el totalitarismo estalinista es sólo una apariencia, ya que todo el Goliat-alacrán tiene importantes puntos débiles que un adversario político avezado puede descubrir, y aprovechar, y así derrotarlos en el campo de la batalla electoral.
Para enfrentar, y derrotar al Goliat revolucionario, y al actual poder económico-financiero, legitimador de capiteles, la ciudadanía venezolana tiene que actuar como David y ser: "responsables, comprometidos, con una causa justa; social, para defender a los más débiles, y el bien común de el pueblo venezolano; el líder que nazca, debe ser audaz, sin temer a las dificultades, y a los riesgos; osado, convencido que podrá vencer; activo, decidido a la acción; valiente, arriesgando su integridad, y confort; inteligente, estudiando las estrategias adecuadas; ser perseverante, a pesar de la ingente tarea que tendrá por delante; ser inconforme contra: "el aquí no hay mas nada que hacer" la hija perversa de la indolencia.
Todos los venezolanos podemos ser David, todos podemos aportar nuestro granito de arena para conformar la piedra que pongamos en nuestra honda que derribe este modelo económico, o sea la fabrica de la injusta pobreza en la que vivimos.
Como personas, debemos ser como David; cuando interiorizamos, ejercitamos, y transmitimos valores de humanidad, universalidad, justicia, solidaridad, cooperación, moderación, austeridad, transparencia, coherencia, diversidad, defensa del medio ambiente, etc., cuando priorizamos las relaciones humanas, y familiares, cuando desarrollamos una conciencia crítica, y nacionalista informándonos, analizando, y compartiendo, cuando se aporta tiempo, y dinero a causas políticas coherentes, etc.
Como venezolanos, todos debemos ser como David cuando superemos la cultura de la trampa, y del éxodo de la patria, cuando hagamos un uso racional de los bienes, y servicios públicos, cuando exijamos, y ejerzamos nuestros derechos de control de los poderes políticos, y de participación en la vida pública a todos los niveles políticos, legislativos, cuando hagamos frente a los abusos e injusticias del sistema actual, cuando trabajemos por una educación que forme personas con valores humanos, etc.
Todos los profesionales, deben ser como David cuando se tenga en cuenta nuestras decisiones, los impactos sociales, y medioambientales además de los económicos, cuando la ética impregne la vida profesional, cuando se valore el trabajo como fuente de realización, y no solamente como vía para ganar más dinero, cuando se fomenten modelos jurídicos y organizativos basados en las personas y no en el capital especulador, cuando el sistema defienda los derechos de los trabajadores, etc.
Como consumidores, frente a la especulación, los ciudadanos deben ser como David, cuando el consumo se ejerza de manera crítica, consciente, y transformadora alineado con responsabilidad social, y se moderen los hábitos de consumo, y ocio, reduciéndolos, y racionalizándolos, cuando se utilice el gran poder de ciudadano al elegir bienes, y servicios valorando las condiciones sociales, laborales, y medioambientales de su producción, financiación y comercialización, cuando se participe en las denuncias, y boicots a la violación de los derechos humanos por los comerciantes árabes, y chinos explotadores, y ajenos a nuestra idiosincrasia.
Así como le ocurrió a David, a los demás les pareceremos locos, insensatos, utópicos, suicidas, soberbios, desestabilizadores etc. Pero, al final, la sociedad ganará, como lo hizo David contra Goliat. Estoy convencido que la ciudadanía venezolana vencerá con mucho esfuerzo, ánimo, y perseverancia, en este enfrentamiento con el actual poder económico-legitimador-colonizador, y logrará parir un nuevo modelo económico más equilibrado, y humano, socialmente justo, y respetuoso con el dolido pueblo venezolano.