Aprovecho esta oportunidad ya que Aporrea recién publicó una noticia sobre Miguel Cabrera, la cual me hizo pensar sobre esta otra noticia con respecto a su inminente retiro del béisbol.
Yo no sé nada sobre Miguel Cabrera, ni sobre le béisbol, pero sí sé que él sería muchísimo mejor presidente de Venezuela que el actual jefe de Estado venezolano.
¿Por qué digo eso?
Bueno …
1- Porque él ha sido muy exitoso en su carrera, una carrera donde para llegar a ser uno de los mejores del planeta requiere de muchísimo trabajo, de un sentido muy alto de precisión, de un comportamiento ético de muy alta calidad, y de un muy alto rendimiento físico, mental, y aun espiritual, donde se le exigiría las 24 horas la máxima dedicación, empeño, y honestidad.
Digo honestidad ya que nadie en esos niveles de tan alto rendimiento puede fingirlo, o sea, la persona debe ser fundamentalmente auténtico, si no, jamás habría llegado a esos niveles de profesionalismo. Uno no puede fingir ser el mejor, debe demostrarlo, y eso es precisamente lo que él ha hecho, frontalmente, sin engaños ni mentiras (supongo yo).
Eso significaría que, de él ser presidente de Venezuela, probablemente le podríamos creer todo lo que él diría, totalmente contrario al actual jefe de Estado venezolano, quien miente regularmente, engaña, encubre, obvia, y oculta la verdad y hace las cosas en secreto a nuestras espaldas.
2- Ya que él ha trabajado exitosamente en EEUU durante muchos años sin --- que yo sepa --- ser amenazado, bloqueado, o sancionado por el gobierno de EEUU, ni que hayan ofrecido $15.000.000 por su captura, eso significaría que él, de ser presidente de Venezuela, podría probablemente lidiar con cualquier situación relacionada a las relaciones entre los dos países (Venezuela y EEUU), además, estoy seguro que él es altamente respetado por no solamente la mayoría de los estadounidenses, sino también por los altos mandos del gobierno de EEUU y del mundo entero (muy bueno para nuestras relaciones exteriores), lo cual sería totalmente lo contrario del actual jefe de Estado venezolano, una persona en quien muy poca gente a nivel mundial le tendría confianza.
3- De ser presidente de Venezuela, estoy bastante seguro que cerca de 100% de la población venezolana, de todas las clases sociales, y de todos los ámbitos de actividad de nuestra sociedad, le tendrían un alto nivel de respeto y admiración hacia Miguel Cabrera, lo cual sería, ciertamente positivamente, totalmente lo contrario del actual jefe de Estado venezolano, quien en mi estimación no gozaría ni de un 10% de respeto, y mucho menos todavía, admiración.
CONCLUSIÓN
Ahora, voy a suponer que Miguel Cabrera no es ningún oportunista, no es un vivo, ni tampoco sería el tipo de persona que auspiciaría o propiciaría el nepotismo, la corrupción, y la impunidad, y cosas así … y eso lo digo porque en EEUU nadie puede avanzar en su carrera de ser así.
Para avanzar en cualquier carrera en EEUU, uno debe ser serio, realista, responsable, transparente, sensato, y sobre todo, honesto, uno jamás debe mentir, si no, se le impediría de alcanzar los altos niveles de ejercicio de su profesión, especialmente ya que al alcanzar esos altos niveles de estatus profesional, la persona debe poder dignamente satisfacer los niveles de confianza que, en este caso, los fanáticos y los dueños de los equipos de béisbol exigirían de él.
Ahora …
Para él ser presidente de Venezuela, él no necesitaría haber ejercido una carrera en la política, no señor, de hecho, el hecho de que él probablemente jamás habría ejercido en la política (especialmente en la totalmente podrida política venezolana), sería nuestra salvación, ya que ciertamente él consideraría el puesto de la presidencia de Venezuela como una meta más en su carrera OPERACIONAL (no política), donde me imagino lo que contaría para él, siendo el profesional que él es, serían los resultados de su gobernanza, y no el aparentar como ocurre con el actual jefe de Estado venezolano, y sobretodo, creo, que él estaría principalmente interesado en los resultado positivos sobre las mayorías pobres de nuestro país (hoy por lo menos 80% de la población) versus los resultados positivos únicamente para la minoría rica y corrupta de nuestro país (el 20%).
De ser presidente de Venezuela, para cumplir con ese DEBER de gobernar que todos los jefe de Estado tienen pero que aquí en Venezuela pocos cumplen o han cumplido, para cumplir este DEBER de gobernar de manera exitosa y positiva para nuestra sociedad, Miguel Cabrera simplemente tendría que rodearse de buena gente, de gente desinteresada, de gente no codiciosa, no corrupta, de gente auténtica, real, honesta, inteligente, creativa, de gente capaz de resolver los problemas oportunamente, de gente con bolas, de gente que no miente, de profesionales, pero de profesionales de verdad, no de profesionales ignorantes como los que tiene el actual jefe de Estado venezolano.
No es tan complicado.
Para ser presidente de Venezuela, bueno, él podría unirse a cualquier partido político venezolano existente (para no ser saboteado al formar otro nuevo partido político), y sin importar qué partido político él escogiera (o lo escogieran a él), aunque fuera conformado por un montón de mentirosos, hipócritas, oportunistas, corruptos, y ladrones (en mi opinión TODOS los partidos políticos de Venezuela son así), él sería el candidato presidencial para ese partido político para las próximas elecciones presidenciales, sin embargo, después de ser electo presidente de Venezuela, él se desafiliaría de ese partido político con el fin fundamental de poder gobernar el país de manera apolítica y objetiva (sin presiones ni favores ni nada al estilo), o sea, para que él pueda efectivamente gobernar con su equipo de manera completamente OPREATIVA (porque de no hacerlo ¡ya!, nuestro país desaparecerá de sobre este planeta), así como él siempre lo ha hecho con su propia carrera, y muy exitosamente además.
¿Queremos ser exitosos como país, o queremos seguir siendo un total desastre económico y social y una tremenda vergüenza para la humanidad como lo somos hoy bajo el mando de un montón de políticos mentirosos, oportunistas, y corruptos?
Si queremos seguir viviendo en un desastre total, bueno, entonces deberíamos seguir votando por la cuerda de políticos que tenemos, si no, entonces deberíamos votar por personas operacionales, no políticos, así como lo hicimos con Chávez, quien no era ningún político, él era una persona operativa, un militar dedicado a cumplir con sus metas y deberes y con sus responsabilidades de manera exitosa y ejemplar.
Miguel Cabrera haría lo mismo, pienso yo, porque siendo cómo él es, una persona extremadamente exigente con él mismo y con su entorno, bueno, dudo mucho que siendo presidente de Venezuela, él repentinamente cambiaría para transformarse en una persona irresponsable, contradictoria, y mediocre como lo es el actual jefe de Estado venezolano y casi todos los gobernantes de nuestro país, en mi apreciación.
De Miguel Cabrera ser uno de los candidatos para la presidencia en las próximas elecciones presidenciales, estoy convencido que, sin importar bajo qué partido político él se presentaría, él ganaría las elecciones presidenciales con por lo menos 80% de los votos.
¡Miguel Cabrera presidente de Venezuela!
oscar@oscarheck.com
Miguel Cabrera presidente de Venezuela
Por: Oscar Heck
Domingo, 05/02/2023 01:38 AM