La trayectoria política y militar de Sebastián Francisco de Miranda, aunque se desarrolla en otras latitudes, siempre tuvo como objetivo, alcanzar la libertad de Venezuela y toda la América hispana.
La discriminación social y racial era una característica de la sociedad colonial caraqueña y la familia del precursor aunque tenía recursos materiales, fue víctima de ese flagelo por el origen canario de su padre don Sebastián Miranda que además era comerciante, actividad económica mal vista por la élite de los blancos criollos y esta situación se convirtió en elemento motivador para que el joven Miranda, de 21 años, decidiera buscar nuevos horizontes e irse a Europa, incorporarse al ejército real de España y luego transitar un largo periplo de viajes cual "trotamundos" por todo el viejo continente y eurasia (específicamente Rusia).
La persecución a la que fue sometido Francisco de Miranda por la realeza española, la desconfianza de los revolucionarios franceses y las falsas acusaciones de traición en su contra, que lo llevaron a prisión en la cárcel "la force" de París por más de 18 meses. La actitud inconsecuente del gobierno inglés al negarle el apoyo a Miranda para la expedición libertadora hacia Venezuela, indican que la posición política del creador de la "Colombeia" y el proyecto de unidad de las colonias españolas, estaba en lo correcto.
Francisco de Miranda pensaba acertadamente en una sociedad libre, con poderes independientes y democracia social. Pero esas ideas chocaban en contra de los planes de dominación de las grandes potencias de aquel momento histórico como Inglaterra, España y Francia.
Junto a la persecución de la que fue objeto Francisco de Miranda por la inquisición y gobiernos europeos, se sumó la incomprensión de los dirigentes patriotas venezolanos que no valoraron al experimentado político e intelectual, su disciplina y visión universal de la lucha independentista.
Cuando se perdió el Arsenal del castillo San Felipe en Puerto Cabello en manos de Simón Bolívar, comenzó el fin de una República:¡ Venezuela ha sido herida en el corazón ! Exclamó Miranda.
Este grande hombre tenía todas las razones para capitular ante el general español Domingo Monteverde el 25 de julio de 1812 en San Mateo, pero los jóvenes que lo apresaron: Simón Bolívar, Tomás Montilla, Rafael Chatillón entre otros, apoyados por las tropas de Manuel María de las Casas, comandante del puerto de la Guaira, prefirieron hacerle más fácil la tarea al régimen español que buscaba detenerlo hacía décadas y lo sometieron, haciéndolo prisionero en la cárcel de la Guaira, Puerto Cabello, la cárcel del morro en Puerto Rico.
Sebastián Francisco de Miranda, fue dejado a merced de la muerte en la prisión de "la carraca", en Cádiz España, donde su vida termina tristemente, víctima de una apoplejía, el 14 de julio de 1816.