"A escribir de otra suerte —dijo don Quijote—,
no fuera escribir verdades,
sino mentiras;
y los historiadores que de mentiras
se valen habían de ser quemados,
como los que hacen moneda falsa"
El Quijote de Cervantes
La conversación entre dos viejos amigos llevaba varios minutos y de golpe se acaloró, hasta romperse, como el amor de una pareja, cuando se dan cuenta, que las discusiones son irreconciliables y es mejor tomar la determinación: cada quien por su lado ¡y que te vaya bien! Los motivos se presentan cada momento, muchas veces de manera imprudente y en esta oportunidad con una pregunta de manera directa ¿Tú todavía estás apoyando a este gobierno? La interrogante buscaba desmoralizar al de mirada firme y pensamiento muy bien definido, porque más allá de la amistad, defiende a la patria y aprendió a resistir antes cualquier tempestad, halago o provocación, que aparecen, desparecen y parecen el medio para atraer a cada momento a los traidores en esta ardua e interminable lucha de clase, impulsada precisamente por los poderosos oligarcas de siempre, con el ingrediente extremadamente peligroso: el imperialismo enseñando los dientes para defenderse y todo el mundo sabe de qué están afilados.
Contra el gobierno venezolano, desde el mismo momento de la llegada del comandante Chávez al poder, montaron una verdadera artillería por todos los flancos posibles, tratando de asestar un golpe mortífero contra la economía venezolana, asignando los mejores francotiradores. Es alarmante y preocupante la manera, como el dólar sube en comparación con la moneda venezolana; la explicación es muy sencilla y no se necesitan títulos académicos en economía para entender, ya que, las consecuencias se sienten todos los días al aumentar de precio todo lo que compras y por supuesto la moneda venezolana es desvalorizada y despreciada frente al dólar, mientras nos aprietan cada día, con la moneda estadounidense y a la vez van creando un espejismo lo que ha motivado una migración, sin precedente y todavía los incitadores niegan el cuchillo ensangrentado, con el cual han arremetido descaradamente contra el pueblo venezolano, sin los resultados que esperaban, pero el efecto psicológico está en cualquier rincón del país.
La muestra más clara la tienen los pequeños productores del campo y el llano venezolano, especialmente de los estados Apure, Táchira y Zulia por su ubicación geografía en los límites, con la hermana República de Colombia, ya que, se encuentran haciendo frente a un medio marcado por tres monedas : el dólar, el peso y por supuesto nuestro símbolo monetario el bolívar y con ninguna llevan las de ganar, porque el interés criminal de los antes señalados lo trazaron con estos mecanismos para atentar por esa vía y destrozar en mil pesados el bolívar, hasta desvalorizarlo y muchos incautos en las primeras de cambio creían en algunas ventajas del dólar, pero ahora, empiezan a ver el camino con demasiados vericuetos, sin poder desechar el dólar, ya que, a pesar de andar en picada su penetración ha sido tan fuerte, que una porción importante de la población mundial, quiere marcharse para los Estados Unidos, así, lo recibían en medio de un fuerte tiroteo de esos muy comunes en la tierra del "sueño americano" ¿Cómo les parece?.
En comercio por supuesto todo tiene su precio y muchos casos llega a romperse los vínculos familiares, como sucedió en Acarigua, con un problema suscitado en un negocio sociedad de hermanos, terminó a plomo y el resultado: un muerto. Nos podemos imaginar a los que ansían el poder, después de haber fracasado en reiteradas oportunidades por la vía electoral. Apelan a los miles de artimañas, sin importarles a quien están perjudicando. Por eso, el ritmo que lleva el aumento del dólar, es para tomar medidas urgentes de lo contrario, nadie puede aguantar el peso, que le están montando en la espalda. Los mismos pequeños productores de los estados antes señalados se encuentran acorralados y prácticamente venden "regalando" la producción. Un kilo de queso se lo pagan en un dólar y medio, cuando en cualquiera ciudad por muy cercana lo venden en 5 o 6 de los verdes. Por la otra parte, los grandes productores montan su show al botar algunos productos para luego regar por las redes "el culpable es Maduro" sin acordarse de las bravuconadas de María Corina, Guaidó, Leopoldo López, Antonio Ledezma y paremos de contar, quienes ayudaron a crear la dependencia monetaria.
La tecnología y los avances electrónicos han cambiado todo, menos las formas de hacer el amor, aunque los románticos se los está llevando el capitalismo a través de la moda. Ahora, no necesitan llevarse los billetes en toneladas, como sucedió en años pasado, cuando la guerra economía estaba encendida y no estaban dejando sin comida y sin moneda venezolana, ya que, por casualidad agarraron un camión, que se volteó en Paraguay y el cargamento estaba por las 30 toneladas de billetes de cien. ¡Algo increíble! ¡Todavía no lo puede creer! Ahora, todo se maneja en los cada día más sofisticados medios a través de redes y por eso los ya corridos: Trump, Iván Duque y Bolsonaro a última hora, montaron la trampa con el dólar y el peso frente al bolívar, el cual les parecía imposible que fallara, Sin embargo, aquí estamos, batallando contra viento y marea.