Lo que está ocurriendo en algunas urbanizaciones del sureste de Miranda no es una coincidencia, todo forma parte de un modelo económico privatizador donde lo más importante son los intereses económicos de un grupo o de una élite, sin tomar en cuenta los intereses de la comunidad. Hoy por hoy es noticia las intenciones del burgomaestre de Baruta, Darwin González, de despojar a los vecinos de sus parques, terrenos, campos deportivos y sitios de recreación para entregarlos en comodato a la empresa privada.
Las urbanizaciones San Luis, la Alameda, Santa Paula y otras del sureste, están viviendo actualmente situaciones embarazosas como consecuencia del interés del alcalde mencionado de convertir terrenos del municipio para otros usos y así entregárselo a la empresa privada. Tal menoscabo se hará mediante un comodato, para transformar dichas zonas en centros o clubes donde funcionarán canchas de pádel, un deporte que practica una minoría elitesca. Tal cambio de zona, de zona residencial a comercial, creará desasosiego entre los vecinos, consecuencia de las incomodidades como aumento del tránsito automovilístico, problemas de estacionamiento en la zona, escándalos durante el día y la noche, dificultades por el consumo de alcohol de quienes asisten a tales eventos. Así mismo, la utilización de la policía del municipio para cuidar los carros estacionados cerca de dichos clubes, en detrimento de la vigilancia vecinal.
En el caso específico de Santa Paula, el alcalde Darwin González, pretende entregar a la banca privada (el banco Plaza) el polideportivo Chiquitín Ettedgui ubicado en la urbanización Santa Paula. Tal escamoteo ciudadano se realizará por medio de un comodato que durará quince años. Como se sabe, tal intención tiene un año de estudio sin habérsele consultado a los vecinos tal convenio el cual viola la constitución, como es derecho de los jóvenes de practicar deporte, además el derecho a la recreación, del mismo modo, la transgresión referida a normas municipales. Es sabido por todos que a dicho campo deportivo asisten niños y jóvenes a practicar softbol, béisbol, basquetbol, fútbol, así mismo, se ven en la pista jóvenes trotando y adultos mayores caminando, otros disfrutando de bailoterapia, prácticas de yoga y otras disciplinas deportivas. Como se ve, el referido polideportivo está diseñado para deportes colectivos que mantiene ocupados y entretenidos tanto a jóvenes como adultos. Lamentablemente, el alcalde Darwin González, cuyo objetivo debería propiciar el deporte masivo, prefiere entregar dicho terreno a la banca privada para convertir el poli deportivo en una especie de club de pádel, para cierta elite, donde funcionará además de nueve canchas de pádel, un bodegón, una cafetería y otros divertimentos.
El negocio del alcalde de Baruta da la impresión de apestar a billete verde, este solo beneficiará, evidentemente, al alcalde y sus secuaces, al banco Plaza y no a los vecinos de Santa Paula. Estos se verán agobiados por el aumento del tránsito, de estacionamiento, de escándalos consecuencias de los consumidores de licor, de bulla y la peor de todo, que los jóvenes y adultos serán despojados de un polideportivo que pertenece a la comunidad, el cual será arrebatado de forma ilegal por el alcalde de Baruta Darwin Gonzáles. La paz y el sosiego de la zona no puede ser interrumpida por las ambiciones pecuniarias de un grupo.
Como consecuencia de las graves irregularidades cometidas por el alcalde Darwin Gonzáles es de ley que el Ministerio Público y la Fiscalía procedan a investigar el despojo de una propiedad perteneciente al municipio para ser entregada, de forma ilegal, en un inmoral comodato, al banco Plaza. No se debe permitir que un alcalde y una empresa privada les arrebaten a los vecinos el derecho que tienen a practicar deportes y disfrutar de horas de recreación, simplemente por las apetencias monetarias de unos pocos en pesadilla de muchos.
Enoc Sánchez