En la antigua Grecia el término meteco significaba extranjero que vivía en una de las ciudades-estado griegas. Meteco no tenía el significado peyorativo actual aplicado a los extranjeros no considerados ciudadanos, condición padecida igualmente por las mujeres griegas y los esclavos así fuesen ya liberados. Los metecos debían pagar un impuesto especial y no podían disponer de propiedades inmobiliarias, excepto si tenían el privilegio de la igualdad de impuestos en otras palabras capital es capital y si tienes con que, paga pues. Los metecos carecían de derechos políticos obligados a las mismas cargas que los ciudadanos ricos.
Por lo general los metecos griegos que dieron origen al nombre de esta opinión, se dedicaban a actividades económicas no agrícolas, eran comerciantes artesanos. A Venezuela cuando el mandato del dictador Marcos Pérez Jiménez, hubo invasión silenciosa de europeos huyendo de la guerra y el servicio militar obligatorio, en particular prófugos con razón pues el trabajo y la situación de Europa destrozada por las bombas del conflicto mundial, los hacía proclives a irse a cualquier lugar.
Reforzaron las colonias europeas cuantitativamente y aprovechando circunstancias se dedicaron a negocios y no en proporción suficiente al cultivo de la tierra, excusa para el ingreso al país. Las tareas a desarrollar por los "musius" como solían decirle los venezolanos, les iban dando ascenso social, devengaban ganancias fáciles sin trabajo duro, se dedicaron a atender incluso bares y prostíbulos, sin olvidar y quiero ser justo, atender hoteles, posadas, montar casas de alquiler y ventas de todo y para todos.
Así fueron apartando a las bodegas criollas propiedad de los venezolanos de costumbres sencillas, los europeos (como hoy lo son numerosísimos chinos), se convirtieron en jefes, muchos metidos a metecos, sin conocer el origen de la palabra, pero como seres humanos con codicia y oportunismo, salvo excepciones, devengar mucho y ser empleadores imponiéndonos condiciones, apenas murmurábamos en pregunta habitual ¿y estos carajos extranjeros qué se creen?
Comunicadores sociales en este siglo XXI bajo el proceso bolivariano antimperialista, reciben a lo largo y ancho denuncias acerca del abuso cometido y a veces permitido por funcionarios de antes y después de 1999, se acostumbraron los extranjeros a corromper agentes de seguridad del estado, a quienes no se les prohíbe oficialmente recibir dádivas de los negociantes quienes los corrompen con ayudas para que te resuelvas…
Estos metecos siglo XXI van más alto, se sabe que tocan funcionarios de importantes, se sacuden de los impuestos municipales, estatales y nacionales, mediante la compra de conciencias impuras, ofreciendo desde bienes o sea lo que venden, hasta cantidades de dinero en efectivo y últimamente en dólares, contratando abogados para que les prevengan si caen en las disposiciones de la Fiscalía General de la República, presidida por el incorruptible Tareck William Saab.
Tengo relaciones comerciales con los "viejos", sus hijos y nietos de europeos, llegados a nuestra Venezuela antes y luego de la aparición del petróleo, la cordialidad y el respeto mutuo lo valoro como debe ser, sin embargo, por segunda vez en un mismo mes toco el tema de los desatinos por sectores reacios a aprender que, la generosidad y la paz venezolanas, son consecuencia de políticas acertadas.
Una advertencia de la mejor intención para los opositores que mal guiados no parecen aprender de experiencias ensayadas y fallidas. NO VAN A RECUPERAR EL DINERO QUE, LES ARRANCARON OPOSITORES POLITIQUEROS, URGIDOS EN DERROCAR EL CHAVISMO, SOCIALISTA, BOLIVARIANO Y ANTIIMPERIALISTA. MUCHO MEJOR SERIA QUE INGRESEN A SER EMPRENDEDORES DE BUENA FE Y DEJEN DE SER METECOS, ASPIRACION DE UNA POBLACION CONCIENTE Y PACIFICA.