Yo me había propuesto, no leer más los artículos que él publica en Aporrea, con los cuales nunca he estado de acuerdo en cuanto al contenido de los mismos, pero como por las razones que sean, lo conocí personalmente y me prestó un gran servicio que siempre agradeceré, yo consideré que podíamos ser amigos y él rechazó esa pretensión mía; me imagino debe ser porque él nació en Canadá, habla 4 idiomas, ha vivido en 43 países y ha trabajado como investigador de fraudes en grandes empresas transnacionales y yo un negrito barloventeño que apenas machuca el castellano, ¿como iba a aspirar atreverme a decir que éramos amigos?. Eso me pasó por salío…Y eso, que no se me ocurrió decirle "hermano", que es como acostumbro dirigirme a las personas con las cuales cotidianamente interactúo por wasap.
Lo que me hizo cambiar de opinión, fue el artículo que escribió en Aporrea el día domingo 5 de noviembre, donde acusa de Genocida al Presidente de todos los venezolanos, Nicolas Maduro Moro, por el cual yo voté. El hace comparaciones matemáticas con los crímenes de lesa humanidad que está realizando el gobierno sionista de Israel contra el Pueblo de Palestina. Es tanto su odio contra Maduro, que ni siquiera toma en consideración que aquí somos 30 millones de habitantes y los palestinos apenas llegan a los 2.5 millones. Es tanta la bilis que tiene represada, en el interior de su organismo, que llega a comparar las muertes por hambre y desnutrición con bombardeos y destrucción de casas y edificios habitados por civiles. Ante tamañas desproporciones y revisando sus últimos escritos, me dije a mi mismo: ¿Y si alguien los lee y le cree?. ¿Y llegan a pensar que nosotros podemos hacerle lo mismo a los guyaneses? .
Leo sus últimos escritos, donde nos cuenta que salvó la vida de una niña venezolana de 7 añitos que estuvo a punto de morir por faltarle una medicina, por culpa del gobierno de Maduro y él del dinero que recibe del exterior donó $60 dólares; luego en otro escrito nos cuenta que gasta $120 dólares mensuales en un servicio de Internet que no sirve y no funciona por causa de Maduro y su gobierno. Anteriormente nos había contado que después de varios años se había podido comprar un pollo para comer, pero debido a los constantes cortes y fallas eléctricas, por culpa de Maduro, el pollo se le había podrido.
En todos sus artículos llega a sostener que éste país, es una mierda y que él quiere irse y no puede, por no tener los recursos para hacerlo y además que está enfermo. En uno de ellos llega a decir que todos los venezolanos somos seres corruptos y que deberíamos ser gobernados por gente de otro país. Yo viendo ese cuadro trágico existencial, me atreví pedir al Presidente Maduro y a su esposa Cilia Flores, que le hicieran el favor de prestarle ayuda para salir del país y pudiera pasar sus últimos días con sus familiares en Canadá. Esto calentó de sobremanera a Oscar Heck y escribió que iba "destrozar" mi escrito y que él no era amigo mío. Un correo que él mismo mostró, aparece una señora que vive en el exterior, la cual se ofreció regalarle el boleto de avión.
Con este escrito, quiero solicitar seriamente al gobierno bolivariano, entre ellos a los organismos de seguridad, que ni se les ocurra meterse con éste señor. Diga lo que diga, no lo toquen ni con el pétalo de una rosa. Este señor es la mayor garantía de que aquí no hay una dictadura, ni se persigue a nadie por sus ideas y hay plena libertad de expresión. Más bien, pienso que debe protegérsele, no sea que la oposición lo use como conejillo de indias, "le pase algo" y se lo achaquen al gobierno. No olvidemos el ejemplo de Chávez con el crucifijo en la mano, cuando fue rescatado en el 2002 de la Orchilla por el pueblo, después del golpe de Estado, donde estaba custodiado por militares "preñados de buenas intenciones" como determinó el TSJ de la época.
Oscar Heck, está loquito porque Nicolas Maduro le pare bolas. Y si Chávez le dijo a María Corina, "que Águila no caza moscas", a Oscar Heck le sale que Maduro le diga que: Águila no caza mosquitos.