En estos últimos meses he estado proponiendo la creación a un grupo de empresarios y estado nacional la creación de un Centro Internacional Biotemático (CIB), como institución comprometida con la protección y preservación de la Cordillera Andina, y alineado con Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas y políticas de Estado. El plan se sustenta en el posible apoyo de universidades de la región e iniciativa privada, como agentes interventores de los destinos turísticos físicos recreativos de la montaña andina tachirense y zona de frontera. Agentes que plantearían como metodología la promoción e incorporación de un mapa de múltiples actores, para la acción turística recreativas, docencia e investigación, en búsqueda de una relación respetuosa con la naturaleza, el paisaje, la gente, el urbanismo, sus sitios históricos, como expresión de pertenencia e identidad y adopción de decisiones informadas. Se propone como ambientes de uso: un centro bio temático, los caminos reales y de recuas y los escenarios andinos. Todos ellos dirigidos y sostenidos en datos oportunos, abiertos y desglosados, que permita no solo una relación de goce, afecto de calidad y de reflexión, sino igualmente la visibilización del impacto de sus acciones, facilitando adoptar decisiones informadas a los agentes turísticos, población y comunidades rurales intervinientes, que, con igual condición del recreado, se apropiaran de la información científica como derecho humano, como fortalecedor del proceso vivencial recreacional, en toda variedad de situaciones, aprehendiendo y aprendiendo a ver y observar, como herramienta de diálogo con la naturaleza y sus espacios. Su proceso investigativo permanente no solo será un elemento de valor para la salud y seguridad sostenible de la región montañosa andina. Sino igualmente, la ciencia sería un Valor de Marqueting de los agentes turísticos y población, ya que permitiría un dialogo entre el intervenido y el interventor.
La ley orgánica del turismo del estado venezolano, establece esta actividad como una cultura encargada de llenar de contenido afectivo tanto a las personas como a los lugares, en toda la variedad de situaciones; el paisaje, el urbanismo, sus sitios históricos. Ellos deben formar parte del imaginario colectiv6o, y entre estos y la gente debe FORTALECERSE UN DIÁLOGO como
expresión de pertenencia e identidad"
en búsqueda de este dialogo me he puesto en la tarea de proponer una institución, -El CIB-, que, sostenido en el turismo físico recreacional, abra un dialogo, sostenido en datos oportunos, abiertos y desglosados de los ambientes naturales, dando a conocer como derecho humano y Valor de Marca, el saber que esconden nuestros caminos
El CIB, sería una institución comprometida con los Andes Venezolanos, alineado con Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas y políticas del Estado Venezolano. Su fin básico sería el turismo físico-recreativo, dirigido y sostenido en datos oportunos, abiertos y desglosados de los ambientes naturales, que permita una relación de goce y afecto de calidad, de igual manera un proceso de reflexión y visibilización del impacto de sus acciones; facilitando adoptar decisiones informadas.
El proyecto sostiene el principio democrático de orientar el acceso de la población a un derecho de apropiarse del quehacer científico, como fortalecedor del proceso vivencial recreacional, en toda variedad de situaciones, aprehendiendo y aprendiendo a ver y observar, como herramienta de dialogo con la naturaleza y sus diversos espacios; transformándose esta apropiación del saber, en gestor de su protección, cuido y dador de un producto para una satisfacción de calidad como valor de Marketing.
EL CIB, como proyecto a desarrollar se plantea la creación de un parque Bio temático en un sector de la ciudad de San Cristóbal y el uso turístico físico recreativo de los transectos y Caminos reales y de recuas, de los Parques y caminos Nacionales, reponiendo el derecho de conocer su historia, encontrarse a solas al aire libre, tener acceso a la belleza natural, en igual condición que el derecho de libre expresión y la opción de cuestionar a sus semejantes.
Caminos y transectos que servirán y consolidarán la aventura, la cultura, el buscar científico, la práctica de la actividad física, el ocio, la diversión, la vuelta a la naturaleza, la evasión de la rutina y del estrés diario, la búsqueda de los orígenes culturales y naturales del individuo; consolidando el derecho a la contemplación, el deseo de aproximación e interacción con el medio natural, como derecho humano.
El CIB, a través de su centro bio temático, ruta de caminos de nuestros conquistadores y escenarios andinos, tendría como elemento rector el turismo físico-recreativo, sostenido en la Docencia, investigación y lineamientos políticos ambientales de desarrollo nacional, regional y municipal. Como agente turístico, será apoyo sostenible de los gestores administrativos del estado nacional, dando data investigativa para seguridad, orientación y articulación de su protección y uso recreativo inteligente de las áreas bajo administración especial y de alta sensibilidad ecológica de los Andes Tachirenses.
Y así, mediante la apropiación del saber por parte de toda la población interviniente ser gestores de su protección, cuido y seguridad, ello sería el valor de Marketing del producto turístico recreativo y sustentabilidad y protección a la naturaleza en uso.