El concepto de Patria es más que un eufemismo. Es más que un falso positivo o un sustantivo prefabricado.
Patria es el hogar y en consecuencia es un templo sagrado que sólo las patriotas y patriotas estamos obligados a preservar y proteger.
En nuestro días, ¿acaso no es un hecho falso de toda falsedad qué los apátridas utilizan el color del tricolor que en fecha 3 de agosto de 1806, el precursor de la independencia Francisco de Miranda, en la Vela de Coro, estado Falcón, izó como el pabellón nacional? A tal extremo que denigran de la octava estrella.
No podría catalogarse un ultraje que factores vende patria (disociados psicóticos), utilicen uno de nuestros símbolos patrios, más glorioso, y sea manipulado por traidores, desvergonzados para ufanarse de la Patria de Bolívar, aparentando que son bolivarianos, cuando es un hecho, público y comunicacional, que la bandera, para estas sanguijuelas apátridas, es la del criminal imperialismo estadounidense.
¿Por qué tanta hipocresía?, hasta para honrar su estirpe vende patria, son cobardes. Esta criminalidad tiene antecedentes reseñada en la historia Patria, desde la época del Santanderismo.
Ahí está la Sociedad Patriota, una agrupación revolucionaria fundada por Juan Germán Roscio, en julio de 1810, a raíz de los sucesos del 19 de abril de 1810. En la que en diciembre de 1810 se integra Francisco de Miranda, que comienza a liderarla.
En esa época ya comienza sentirse en toda su criminalidad, el apátrida opuestos a la independencia de la naciente República de Venezuela. El temor de los traidores crecía cada día y cada día veían con peores ojos a la imbatible nueva República Bolivariana.
Los apátridas vende patria de la época advertían a través de falsos positivos, que la Sociedad Patriota estaba integrada por "los más inmorales y los más libertinos", con mucha amargura alegaban entre otras criminalidades que la Sociedad Patriota se proponía el espantoso quebrantamiento de "disipar la ignorancia de los pueblos, elevar la idea de los ciudadanos a la más alta dignidad de un hombre libre…". La ideas de la oligarquia o de la burguesía han sido incolume a través de los años.
En esa época la voz del joven Simón Bolivar ya se sentía, por lo a la infamia de los entreguistas vende patria le responde: "…esas dudas son triste efecto de las antiguas cadenas…", pues debía oírse a la Sociedad Patriota, centro de luces de todos los intereses revolucionarios, por tanto, "pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad sudamericana, vacilar es perdernos".
Esta síntesis responde, según este escribidor, el concepto de Patria que los apátridas entreguistas, vende patria, pregonan en su vulgar y criminal, fariseísmo.