"La libertad es siempre la libertad de
Aquellos que piensan de otra manera"
Rosa Luxemburgo.
Leyendo los artículos de opinión que publican en el prestigioso portal informativo "Aporrea", sobre todo de autores que abominan del gobierno del Presidente Maduro me he dado cuenta que hay una visión, o mejor dicho, una intensión que, lejos de castigar a Maduro y a su gobierno, le hacen un grandioso favor a la derecha fascista que aspira ganar las elecciones el próximo 28 de julio.
Entiendo que el equipo de gobierno del Presidente Maduro ha tenido fallas y cometido errores que tienen, por un lado, sometido a la población en una situación de emergencia, por llamarla de alguna manera.
Indudablemente que las culpas recaen en la persona del presidente toda vez que él es responsable de los aciertos y desatinos, fallas y logros, éxitos o fracasos de su gestión.
La corrupción dentro del gobierno, el personalismo, el autocratismo, el abandono a las funciones por parte de los funcionarios públicos y muchas cosas más, que afectan a la población son atribuidas al Presidente ya que, a pesar de las denuncias hechas por la población éstas no han sido atendidas lo que ha generado un rechazo a la acción gubernamental.
Empero, tenemos que tener claro que las medidas unilaterales decretadas contra Venezuela en el año 2014 así como el sabotaje contra el sistema eléctrico nacional en marzo del año 2022 han afectado el funcionamiento del Estado Venezolano, entre ellos la reparación de vías de comunicación, sistema de agua servidas y surtimiento de agua potable a las comunidades, inversión en sistema eléctrico, aumento del salario a los empleados públicos.
Y que el dólar paralelo viene afectando la capacidad adquisitiva del pueblo así como el acceso los servicios de primera necesidad, salud, educación…
Pero hay que evaluar el hecho que, una victoria de la derecha sería una catástrofe mayúscula dado las intenciones aviesas de la misma.
La derecha entreguista representada por María Corina Machado y su candidato Edmundo González tienen su objetivo claramente definido si logran ganar las elecciones.
En primer lugar todos los beneficios al pueblo otorgados por las Misiones y Grandes Misiones van a ser eliminados.
Las empresas del estado van a ser nuevamente entregadas a manos privadas y sus beneficios sólo van a ser manejados por los dueños y sus socios extranjeros.
El reclamo sobre el Esequibo va a ser desechado ya que es uno de los aspectos fundamentales que se negoció con los E.U. y María Corina. Es decir, el Esequibo será territorio del Gobierno Guyanes y todas las riquezas que hay en sus tierras serán negociadas con los E.U. y los países que lo apoyen.
Pero, al algo más importante. Y quizás es la parte más crítica es la persecución que van a hacer a los simpatizantes, militantes de la izquierda (incluso a los que van a votar castigo a Maduro porque ya están idenficados.)
Y esta es la parte más álgida del tema.
Desde hace días vienen corriendo en las redes que la oposición fascista (aclaro que hay otra oposición que transita por el camino de la paz) antes que se anuncien los resultados electorales, y temiendo que salga derrotado su candidato, y anunciando que va a haber un fraude por parte del CNE que favorezca a Maduro, van a llamar a la calle, a generar actos de violencia en los urbanismos, a dirigirse a Miraflores, a llamar a la FANB a perpetrar un golpe de estado y si esto no ocurre, los E.U., Inglaterra y otros países de la entente, invadirán al país, someterán a Maduro y todos los miembros de su gabinete, y decretarán el retorno a la democracia puntofijista para lo cual ya están preparados.
Pero al igual que durante el Golpe de Estado del año 2002, se desatará una persecución contra los militantes y simpatizantes de la izquierda, del chavismo, del madurismo y todo aquello que huela a revolucionario.
Es decir, la abstención o el voto nulo por parte de aquellos que militan en el pensamiento y en la praxis revolucionaria, no es un voto protesta, es un voto a favor de la derecha, del fascismo, de los E.U. y la OTAN. O sea.
Si no se está consciente y claro con esto, significa entonces que toda su pretendida consciencia revolucionaria por su desacuerdo con Maduro y su gestión, era una falsa y farsa su accionar y pensamiento crítico.
Ante esta situación es bueno hacer un llamado a quienes mantienen esta posición para que reflexiones y tengan claro sus consecuencias y efectos.
Hasta la victoria siempre. Venceremos.