El Reloj del Tiempo

Desconcierto en La Nueva Izquierda, y lo inquisitorio de las alcaldías en el proyecto bolivariano de las naciones

Miércoles, 26/06/2024 12:32 PM

Lo peor que pudo pasarle a Cipriano Castro, entre los años de 1898 y 1899, es reunirse en Curazao y Trinidad para afianzar los comités de lucha revolucionaria, y atacar a Venezuela por el Estado Táchira, a sabiendas que estas islas fueron y son colonias de Holanda e Inglaterra, (Reino Unido), y que ambos países son apéndices de los Estados Unidos de Norteamérica. De allí que el mar de confusiones en el aspecto civil y militar, siempre ha sido un presente en el gobierno bolivariano de Venezuela, que, ahora pretende arropar a los protestantes para su control y captar sufragios electorales.

Colombia, siempre se ha prestado a favor de los traidores de la patria, obviando que era parte de La Gran Colombia, que en su expansión llegaba hasta Ecuador y Bolivia. Es obvio, los militares han desconocido siempre el papel de la sociedad civil en Venezuela, aún teniendo un presidente devenido de esta sociedad, pero, es desconocedor de la realidad venezolana aguas abajo, sucedió con el comandante Ernesto Guevara De La Serna, un argentino graduado de médico que llegó a Ciudad de México, y luego prosiguió sus aventuras políticas y guerrilleras hacía la isla de Cuba, muy cerca – pocas millas marítimas-de las costas de Florida, jamás pensó que la CIA seguiría sus huellas, hasta llegar a él en Bolivia, ¡ Es lo insólito!, no pensar más allá de una verdad territorial y geopolítica, a sabiendas del papel de los traidores. Lo escrito en el primer diagrama del Libro Azul, cuyo autor es el comandante Hugo Chávez Frías, fue cambiado por un proyecto neoliberal, regido por La Nueva Izquierda Latinoamericana, que echa a un lado los preceptos del Foro de Sao Paulo, con sede en Brasil.

Lo que sucede en nuestra tierra, (Venezuela), es solo un pretexto, cayó en manos de la corrupción y desconstrucción de un país, a base de ofensas al ciudadano común, y el engaño.

En estos tiempos, ningún político puede regirse con una mentalidad estrecha, porque hay que elevar la personalidad, ser ilustrado para manejarse en el mundo de las ideas. Hay en Venezuela muchos conspiradores y traidores. El presidente se reúne con infieles, los mismos que bordaron al presidente Chávez, ahora se reúne con protestantes y, en las alcaldías le dieron un salón, pocos tienen ideas libertarias, abrazan la bandera de Israel y, las colocan al lado del altar o púlpito, cuando se supone que es el comunismo y el islam, los programadores de nuestra tendencia ideológica. Los musulmanes crecen y fortalecen cada día en Latinoamérica

Curazao y Trinidad, siempre han sido islas preparadas para el complot contra Venezuela, y le suministramos materia prima para sus asuntos de gobierno en el plano industrial. Siempre, hemos vivido tiempos de veletas. Era un hilo, Curazao, Trinidad, Caracas, Barranquilla, Bucaramanga y Cúcuta. Lugares de encierro hostil y de traidores a la patria de Bolívar que los liberó, y les dio propiedades, aún más allá de ser colonias y tierra firme.

El mal manejo del campo político y administrativo del país, lo han dejado a solas, miles de venezolanos han tomado sus marusas y poco dinero para emigrar, entre ellos jóvenes académicos y científicos, dejando el país en manos de comuneros que se acantonan en las alcaldías para ser parásitos y creyentes consumidores, porque el poco ideal que tienen de revolución y democracia es para alimentar su odio, a quienes trabajan por un país contemporáneo.

La pirámide social esta emparejado entre el burgués, cada vez menos clase media, y los judíos y protestantes reformistas que dirigen la economía internacional, con un sistema bancario bien preservado por sus ancestros.

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