La parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio. La parábola cristiana de Jesucristo de la perla de gran precio es de la espiritualidad bíblica en el apóstol Mateo. Y, fuera narrativa del apóstol Mateo 13:45-46 en el Nuevo Testamento. Y, a mas y a más, pero y empero, la parábola cristiana de Cristo la perla de gran precio, ha de ser, muestra descriptiva espiritual que no novelística prosa prosaica real. Asina asín así, el trigo y la cizaña. Asina ansí así, el hijo pródigo. Asina asín así, el buen samaritano. Asina ansí así, la oveja perdida. Asina asín así, el rico insensato. Aqueste este cura ignaro raro cleuasmo asno, perro loco perdidoso perdido que de perdido se pierde, acógese a seguir, a pie juntilla, a Apeles, el pintor elegido por Alejandro Magno para perpetuar su imagen, 330 años antes de Cristo, a según Apeles: "Zapatero a sus zapatos". Mas y más, pero y empero, la Filosofía de las 4E del entendimiento y la estética ética espiritual de Maleo 2001, ha de ser continente que contiene los contenidos de los cuatro aspectos casos atributivos en perfecto equilibrio dinámico dialéctico difuso en la perogrullada primera vez de Perogrullo. Agora ahora hogaño, la parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio, deviene, en aquel día, en que Jesús salió de su casa y se sentó a la orilla del lago. Y, como sucede y acontece con quien atrae a multitudes, mucha gente se le acercó. Jesucristo se subió a una barca y se sentó, mientras y en tanto que la gente se quedara en la playa. Entonces y a la sazón, Jesucristo, con su sentido elocuente parlamentario perceptivo pensante sensorio, asina ansí así, les habló con y por moraleja parábola metafórica paradójica de muchas cosas. Y, a la multitud les dijo, y, como que si estuviera bien atento, el apóstol Mateo 13:45-46 en el Nuevo Testamento, habló Jesús por paradójicas parábolas absurdas a la gente, y en que recogiera lo que sigue el apóstol Mateo: "Todo esto sin parábolas no hablara; para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; declararé cosas secretas y verdades escondidas desde la fundación del mundo, que sólo las descubren aquellos justos que la buscan diligentemente". Agora ahora hogaño, los justos con la perla de gran precio situados de entre las semejanzas y las antípodas, de entre las cosas conocidas y las cosas desconocidas, de entre las cosas buenas y las cosas malas, de entre lo escondido y lo no escondido, de entre lo secreto y lo no secreto, de entre lo enterrado y lo no enterrado, de entre la liberación verdadera cristiana y la no liberación verdadera cristiana. Agora ahora hogaño, atento el apóstol Mateo 13:45-46 en el Nuevo Testamento, que dijera: "También el reino de los cielos, los justos con la perla de gran precio, es semejante a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró". Asina ansí así, ha de ser Jesucristo una perla de gran precio. Jesucristo, el reino de los cielos, los justos con la perla de gran precio. Jesús, tiene un valor inmenso porque el comerciante vende todas sus otras propiedades que posee y asina obtenerla. Asina asín así, Jesucristo es el mundo atesorado. Jesucristo, el reino de los cielos, de los justos con la perla de gran precio tesoro en el campo. En Jesucristo, en Él, hemos de hallar hallando denodados diligentemente todo lo que necesitamos. No más intentar diligentemente hallar un propósito en la misión ministerial menesterosa. Asina ansí así, denodada diligencia realización familiar. No más buscar formas de agradar a los contenidos de la familia, siempre a lo de Buda, en de por medio, por la calle de en medio, en el camino medio budaiano absurdo medular estable profundo, Jesucristo mundo atesorado reino de los cielos, de los justos con la perla de gran precio atesorada en el campo, que ha de estar de entre las cosas conocidas y las cosas desconocidas, de entre lo escondido y lo no escondido, de entre lo secreto y lo no secreto, de entre lo enterrado y lo no enterrado, de entre la libración verdadera cristiana y la no liberación verdadera cristiana de entre la duda y la convicción, de entre el valor y el miedo, en que ha de estar parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio.
Con digresión y sin digresión, la parábola cristiana de Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos reino de Dios en la vida del ser humano es similaricadente tautológico repetitivo a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró, a según el apóstol Mateo 13:45-46 en el Nuevo Testamento, lo de la parábola cristiana de Cristo la perla de gran precio, ha de ser Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos el reino de Dios en la vida del ser humano de entre la certidumbre y la incertidumbre, lo visible y lo invisible, el fuego y el fontanero, el suelo y el cielo, el mar y el desierto, la inteligencia y el objeto, el sujeto y el predicado, el símbolo y la realidad, el espacio y la ubicuidad, la esperanza y la desesperanza, la eternidad y la historia, las cosas conocidas y las cosas desconocidas, lo escondido y lo no escondido, lo secreto y lo no secreto, lo enterrado y lo no enterrado, la libración verdadera cristiana y la no liberación verdadera cristiana, la duda y la convicción, el valor y el miedo. O sea y es decir, decir la parábola del tesoro escondida, es tanto como decir, la perla de gran precio, es tanto como decir el reino de Dios en la vida del ser humano, el inmenso valor que el reino de los cielos tiene en la vida del hombre, el Dios bueno en gran manera, Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos reino de Dios en la vida del ser humano, ha de estar de entre lo bueno y lo malo. y, que a según el apóstol Mateo 13: 45-46 en el Nuevo Testamento, narrara en que había un hombre que buscaba una buena perla de gran precio, pero y empero y en de por medio por la calle de en medio de entre las cosas buenas y las cosas malas, existe la perogrullada primera vez de Perogrullo la cosa que es preciosa en gran manera que excede su valor respecto a todas las demás, la vida, el encuentro sorpresivo tesoro escondido, que el evangelio ofrece a través de la fe hebrea paradójica sanpabloiana absurda medular estable profunda en Jesucristo. Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos el reino de Dios en la vida del ser humano. Jesucristo que se revela en la conversión en San Pablo mismo en el camino de Damasco es el ejecútese testimonial demostrativo espiritual sanpabloiano de Saulo, el perseguidor y capturador de los cristianos, hasta que se hizo la luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del Sol, y de entre el suelo y el cielo, Saulo, cayera. Y, sin querer queriendo, Saulo, el hombre ha andado en busca de Dios y el hombre lo ha encontrado, en que Cristo es la mayor de todas las perlas del despojo orgullo nugatorio de la vida mundana, Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos el reino de Dios en la vida del ser humano de entre el salvar la vida y el perder la vida, de entre el que lo ha perdido todo en el mundo y lo ha ganarlo todo en el mundo, de entre el que todo lo tuvo y todo lo perdió, de entre hombres y mujeres en que ha de estar la parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio.
Con divagancia y sin divagancia, la parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio. Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos el reino de Dios en la vida del ser humano de entre el salvar la vida y el perder la vida, de entre el que lo ha perdido todo en el mundo y lo ha ganado todo en el mundo, de entre el que todo lo tuvo y todo lo perdió, de entre los hombres y las mujeres, ha de tener como grafías gratas gratificantes, a mas y a más, de los triángulos en el cuadrángulo de Pitágoras, 500 años antes de Cristo, y, las pirámides pareadas paradójicas de Hans Kelsen 1927, a la esquemática línea curva parabólica de Picasso 1927 y a la representada línea curva lemniscata de Bernoulli 1741, ha de tener a la slash diagonal hipotenusa contrarrecíproca correlativa ad absurdum mayéutica pitagórica socrática del gigantesco cartón cuadrángulo rectángulo que guindara del techo del botiquín de Miguelito de San Carlos de Cojedes, en que por una de las caras leíase, la frase de la otra cara es falsa y por la otra, la frase de la otra cara es verdadera, y, en este botiquín báquico mundano cuántico, se mandara al carajo al principio de incertidumbre de Heisenberg. La espiritual parábola cristiana de Jesucristo, la parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio, ha de tener, como grafías gratas gratificantes, al lienzo pictórico blanquinegro del yin yang de Laozi, 530 años de Cristo y de Walt Whitman 1855, y, ha de tener al lienzo pictórico blanquinegro cúbico de la composición con hoja de Fernand Léger 1918, ha de tener a la bacinilla de Rosa María, la mitad llena de miao y la mitad vacía de Maleo 2001, ha de tener al cóncavo convexo contradictorio caliginoso concupiscente 69 cojedeño de Cojedes de Maleo 2001. Y, de entre todas las grafías gratas gratificantes, up supra, hase de tener a Jesucristo perla de gran precio atesorada reina de los cielos de los justos el reino de Dios en la vida del ser humano Y, como tiénese dicho y deténtase mentado, fuera la narrativa del apóstol Mateo 13:45-46 en el Nuevo Testamento, que dejara mostrada, demostrada, afirmada y plasmada por los siglos la espiritual parábola cristiana de Jesucristo la perla de gran precio.
Si la espiritual parábola cristiana de Jesucristo de la perla de gran precio es contenido que contiene el continente de la Filosofía de las 4E del entendimiento y la estética ética espiritual de Maleo 2001. Entonces sea dicho que la espiritual parábola cristiana de Jesucristo de la perla de gran precio es contenido que contiene el continente de los casos correlativos límite límbico grembo fronterizo contradictorios caliginosos de equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático diabético en la perogrullada primera vez de Perogrullo de la tesis inédita innovadora novedosa avanzada, cáscara amarga, cojedeña de Cojedes, TINACO de Maleo 2001. Ergo vergo sea dicho que fuera la narrativa del apóstol Mateo, 13:45-46 en el Nuevo Testamento, que dejara mostrada, demostrada, afirmada y plasmada por los siglos la paradójica espiritual parábola cristiana de Jesucristo de la perla de gran precio.