No es igual saber la verdad que asumirla. La idea no es mía sino de Confucio quien habría dicho sic que "no es igual conocer la verdad que amarla".
Y a propósito, me apenó ver, telemáticamente, a María Díaz, antes tan amiga de Mario pero ahora oronda, obnubilada en la senda de María Machado echándole plomo a Maduro Moros, ella asumiendo el modus operandi del imperial laboratorio de guerra sucia, esgrimiendo cifras catastróficas contra Maduro y que por mampuesto son en realidad contra el Comandante Chávez.
Qué mosquito la mordió y dónde parte de su cuerpo y cuándo?, ¡no lo sé! Pero la noté rabiosa, como deslumbrada mentalmente y esgrimiendo, repito, cifras y más cifras del mal y casi expresamente llamando ladrón a Maduro e ignorando que no basta saber que estemos tan jodidos económicamente sino el porqué central. Sus fallidos esfuerzos para tratar de convencer al pueblo de que Maduro es el diablo y de que Trump ---a quien desde hace bastante tiempo ella le lanza panegíricos--- es un mesías, nos revela un contraste que apena ajenamente.
Yo en lugar de Mario le daría una relectura al caso. Entonces, cuando Mario la presentaba en "La Hojilla" la tercia lucía coherente y, mejor, como una lumbrera, así que yo en su lugar (de Mario) habría hecho lo mismo pero ahora ella no sólo se fue a la antípoda sino que todavía se da la cachaza de autocalificarse como chavista y para colmo de mal, de dura, por lo que a mi modo de ver le sale también ---como a otros según el verbo ique (valga así), duros ---tomarse un jarabe de sábila.
Cada quien tiene su propio prisma, el mío me hace ver que es vital impedir que se escape información trascendental alguna en el caso del Presidente Maduro porque hemos sido sometidos a una guerra bestial para asfixiarnos con eso de medidas coercitivas criminales y arbitrarias; además, Maduro tiene en sus manos una Ley que lo faculta para actuar con cautela al respecto pero el enemigo quiere informaciones tales como la que la tercia de marras demanda que se hagan públicas.
Hasta la llegada del Comandante Chávez ningún político de nuestro continente, excepto Fidel, se había propuesto fomentar esmeradamente en la generalidad de los pueblos la capacidad de conocer con su propia cabeza lo que estaba pasando, la realidad. Esa posibilidad era patrimonio de unos pocos "genios", el conocimiento no era para nosotros los tierrúos pero ahora no hay una sola razón para seguir reservándole a una élite de sinvergüenzas la capacidad, el privilegio de conocer la realidad y de manejar a los demás como a animales.
Entonces, RCTV y demás que todavía conspiran eran los papaúpas de esos privilegios, los capitostes de la "verdad".
Vale aclarar que Allende no pudo hacer lo debido en Chile porque no le dieron cuartel. Otros que pudieron tímidamente, tampoco llegaron a fondo como acá o en Cuba, al respecto.
En particular yo tengo plena confianza en Maduro, además el pueblo en general sabe lo que él hace, no olvidemos que la percepción rápida de la verdad es menester al pueblo de a pie y no es una faramallera la que va a darnos clase en ese sentido tan de cizaña. Sobradas demostraciones de honestidad y de gran inteligencia ha dado Maduro enfrentando al imperio sanguinario sino que también es de considerar que todas esas demostraciones las ha hecho en medio de urgencias inaplazables.
No baste saber que estamos al tope de necesidades enormes sino el porqué. Pero, venceremos.
Ñapa:
Por si faltare complementar al respecto de María Machado, en "La Patarú K y su partenaire el Patarú Ko de anime" os dejo un complemento.