"El que tiene un derecho
no obtiene con él
el de violar el ajeno
para mantener el suyo"
José Martí
Si, se atrevieron a proclamar, como presidente a Juan el creído, después de haberlo sacado de una caja de sorpresas; faltando poco para que lo agarraran por las orejas, como un conejo para la exhibición; uno de los tantos disparates de la oposición, con el visto bueno de Donald Trump; a nadie le puede extrañar, que hagan lo mismo, con un candidato, que al menos se inscribió antes el CNE, eso sí, llevado de la mano por la inhabilitada, y, al sentir la derrota a pesar de tratar de cobrar por adelantado, salen con el mismo cuento del fraude, como los propios estafadores, cuando obnubilan a inocentes y algunos que se la dan de avispados, empleando métodos y argumentos renovados, pero parecidos al desaparecido paquete chileno. En estos momentos la nueva versión de Guaidó, es Edmundo y su "niñera" para una película.
Ahora, aparece entrometido el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, completando el traspaso de la reencarnación del arrumado monstrico político de Guaidó en Edmundo, con un comunicado, casi una copia al carbón, cuando se lanzaron por la calle del medio, con el disparate antes señalado, con la desfachatez por un tiempo bastante largo de tratar de pisotear la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, al darle rienda suelta a la oposición, hasta envalentonarlos con mentiras, muchas veces repetidas, para terminar vaciados por momentos, pero no les quedó otra, que agarrar al autoproclamado, como los ventrílocuos, cuando finalizan la función y meten el muñeco en un cajón, no sin antes, repetir la expresión una y mil veces ¡mi presidente Guaidó! copiando los métodos de difusión manejados por Joseph Goebbels, jefe de propaganda de Hitler ¡una mentira dicha mil veces se convierte en verdad! pero no se les dio y no se les va a dar.
El siguiente ensayo: la proclamación Edmundo Urrutia, como presidente, pero no sabemos dónde y cuándo lo van hacer, porque ahora, viene la respuesta directa del gobierno sin contemplaciones, ya que, con guarimberos no se negocia y menos, después de la cantidad de atropellos, saqueos y lo más repudiable dentro del cuadro lamentable: el número de muertos, la mayoría formaban parte de las fuerzas de seguridad del estado venezolano, al desconocer los resultados, con un plan preparado con anticipación y en el cual el punto de partida era cantar fraude dentro y fuera del país, con el apoyo inmediato y directo por organismos internacionales, sin ninguna credibilidad, empezando por la OEA y su amargo secretario, tan desprestigiado a Guaidó, Edmundo y la no menos la manipuladora de María Corina Machado.
El "periodo" de Edmundo, comienza imaginariamente en la mente perversa de este macabro y denunciado personaje, incitado por su cuidadora vía telefónica, ya que, no hay otra, y lo más seguro, es que se le cruce en la mente el miedo reflexivo ¿Quién me mandaría a meter en este peo? Porque ahora le están apareciendo sus andanzas guiadas por la CIA y en una de esas incursiones lo acusan *https://www.aporrea.org/actualidad/n395343.html de haber participado en la matanza de seis curas en el salvador. Pero el que pierde la vergüenza y la dignidad por el dinero (dólar) puede pasar todo el día metido en una iglesia pidiéndole perdón a todos los santos habidos y por haber, al final sale viendo para tras, no lo vayan agarrar los apóstoles por asesino para que empiece a pagar, como es el caso de este excandidato, quien no la pensó dos veces aceptando el "enamoramiento" de la inhabilitada al pintarle pajaritos preñados haciéndole creer, que todo estaba, como agarrar un niño y llevarlo al kínder.
Ahora, sale el padre de estos monstruos tambaleantes, el departamento de estado de los Estados Unidos. Pero la preocupación y lamentos desatados nuevamente tienen algo de razón, no por la derrota del Edmundo –suena feo– si no, por la rodada de la inhabilitada, ya que, pierden una pieza muy manejable por ser una auténtica pitiyanqui, pero es tan pura en su amor a los gringos, como lo ha demostrado, que al revisar las listas de sus aliados no dejó ninguna duda y la desesperación terminó por enloquecerla, al no conseguir ni siquiera uno ¡uno!, que pudiera salir a darle la mano al pueblo, primero por estar quemados y segundo no conocer una prueba confiable y fidedigna, como es ella. Prefirió buscar, rebuscar y casi se llegó a un ancianato para salir, primero con una filósofa y a última hora, con este demonio disimulado por la vejez, pero probado por la CIA, con un negro currículo, que a lo mejor ni ella misma sabía, el cual asustó a muchos de sus partidarios, el cual todavía tienen algo de dignidad y vergüenza. Es decir, que de tanto buscar consiguió un mecate y ella misma se guindó ¡Y eso duele! ¿Verdad? Perdió el chivo el mecate y muchísimo más y no repito lo que me dijo una señora, porque los derrotados se merecen lo que nunca han tenido ¡RESPETO! Así, que mucha seriedad.
*https://www.aporrea.org/actualidad/n395343.html