Esta vez, a nivel judicial y el tal Récord, parece que no sólo es para Venezuela, sino, mundial: Un juicio iniciado hace 20 años por conspiración, duerme el sueño de los justos en los archivos tribunalicios, sin que se hayan adelantado diligencias y mucho menos sentencia.
En efecto, reseña Últimas Noticias, que:
El procesamiento penal contra María Corina Machado se inició en marzo de 2004, cuando en Venezuela se hablaba de activar un referéndum revocatorio contra el entonces presidente Hugo Chávez. Dirigentes del chavismo detectaron que Machado usaría el evento electoral para atentar contra el Estado (Sí en algo se parece a la realidad actual es pura coincidencia).
Por ello se formularon dos denuncias contra Machado ante el Ministerio Público, mediante documentos suscritos por Carlos Delgado, Beatriz Rodríguez, Ramón Márquez, Ismael García, Francisco Ameliach, William Lara, Rodolfo Sanz, Olga Azuaje y Oscar Figuera.
Qué extraña casualidad, con lo que está sucediendo actualmente, con motivo de la realización de las elecciones para presidente de la república (2024): USAR EL EVENTO ELECTORAL PARA ATENTAR CONTRA EL ESTADO, Y FOMENTAR UN GOLPE.
Continúa narrando la nota de Últimas Noticias:
La investigación fue asignada a la entonces fiscal sexta nacional Luisa Ortega Díaz (auto exiliada) quien recabó documentos donde se establecía una vinculación entre la asociación civil Súmate, dirigida por María Corina Machado y entes estadounidenses como el Fondo Nacional para la Democracia (NED). Precisamente el Ministerio Público recabó el contrato suscrito entre el NED y Súmate, destinado a financiar supuestas jornadas de educación para los electores, signado con el número 2003-548.0. Pero en ese tiempo Súmate, desvió el dinero y financió la recolección de firmas para el revocatorio contra Chávez.
Si los sucesos relatados en la nota no tuvieran una fecha determinada, pudiéramos concluir sólo de ver los personajes involucrados que nos estamos refiriendo al momento actual, casi los mismos protagonistas, la misma organización involucrada hoy en el fraude de la Actas Falsas, los mismos protagonistas. Es decir la misma película, el mismo argumento, mutatis mutandi. Es decir una saga cinematográfica.
En la primera película que inició la saga se narra que:
"El Consejo Nacional Electoral (CNE), el ente comicial detectó 876.017 firmas irregulares, por tratarse de igual caligrafía que la prensa denominó "Firmas Planas". La Sala Electoral de entonces intervino y ordenó al CNE aceptar como válidas las 876.017 firmas planas, según sentencia número 24 difundida el 15 de marzo de 2005. La aludida sentencia fue redactada por el presidente de la Sala Alberto Martini Urdaneta y respaldada por sus colegas Orlando Gravina y Rafael Hernández Uzcátegui.
Si observamos con detenimiento, vemos en estas acciones, el mismo proceder intencional, planificado con alevosía, falsear datos, firmas, actas, planillas, para distorsionar la realidad, preparar un escándalo, que justifique la violencia e ir desarrollando un clima propicio para atentar contra el Estado, dando un golpe contra todas las instituciones del país.
Dice un refrán, que he escuchado por allí, que el hombre es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra. En el caso de los conspiradores venezolanos, se han tropezado, en su afán golpista, más dos veces y no con una piedra sino con una roca, como Roca Tarpeya.
Pero lo oportuno de esta nota periodística, publicada por el Diario Últimas Noticias, es que nos lleva a una reflexión:
¿Cuántos males se hubieran evitado al país?, ¿Cuánta violencia se hubiese impedido?, ¿Cuánto desasosiego e intranquilidad se hubiese evitado? ¿Cuántas vidas se hubieran salvado?, si la justicia hubiera actuado oportunamente, en este juicio.
Pero lamentablemente, la lentitud en la aplicación de la justicia en Venezuela, es realmente alarmante. De allí el cuadro de impunidad que todos percibimos: Auto proclamados como presidentes pavoneándose por las calles y la justicia no los tocan ni con guantes de seda; líderes políticos que desbancan los bienes del pueblo venezolano entregándoles a otros países y nuestra justicia, mustia. Desalmados que han quemado vivos a otros venezolanos y salen del país como Pedro por su Casa, por el Aeropuerto sin ninguna vigilancia; los mismos personajes que repiten y repiten sus conductas delictivas contra el Estado y continúan desafiando la legalidad institucional y a toda la autoridad del Estado.
Si esto no lo contará alguien, de otro país, no lo creeremos, pero señores, lo estamos viendo en vivo y en directo. No sabemos si la saga continuará y nos esperan más episodios desagradables que pongan en vilo la ansiada paz y tranquilidad que esperan los venezolanos. Frase célebre dice: "Que la Justicia es ciega, pero parece que en Venezuela también es sorda, muda y mocha.