Luz de la calle y oscuridad de la casa. La luz de la calle y la oscuridad de la casa, es expresión de la hipocresía astuta picaresca, que ha perdurado a lo largo del tiempo, transmitida de generación en generación, que al final hubo de convertirse en tradicional consuetudinaria costumbre. A lo que, esta característica consuetudinaria la hemos de llevar por dentro, unos más y otros menos, y, en de por medio y por la calle de en medio, lo menos es tanto como lo más y lo más es tanto como lo menos, el yin es tanto como yang y el yang es tanto como el yin, y, de entre el yin y el yang, la grisura en el lienzo pictórico blanquinegro de Laozi y de Walt Whitman, quien recitara medular sentencia, en el Canto a mí mismo en Hojas de hierba, que de la gris penumbra sombría whitmaniana, han de surgir iguales elementos contrarios, o sea y es decir, decir, el yin y el yang de Laozi y de Walt Whitman, asina ansí así de entre la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Agora ahora hogaño, todos los seres humanos, sin excepción alguna de nadie, ni el Papa, y, ni todos los Papas, y, pontificios ellos, han llevado esa piedrita en el zapato, han llevado la picardía en los ojos, a según el presiente Chávez, que púdolos ver de cerca al Papa Juan Pablo II, en la visita que hiciera el presidenta Chávez al Vaticano. Y, creo que en Venezuela, fuera Simón Díaz, quien púdose dar cuenta, lo del presidente Chávez, de la mirada del Papa Juan Pablo II, cuando cantara, endenates, Simón Díaz, La Tonada del Papa Amigo. El Papa, le clavara la penetrante mirada embutida picaresca, y, endespués, Simón Díaz trastrabillara en la canción, como que el Papa, estuviera desnudando a Tío Simón. Y, como que si Tío Simón, anduviera en el dicho expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario, de la luz de la calle y la oscuridad de la casa. El Papa, desvióse a la mirada tierna párvula de los niños venezolanos y a sus cantos ingenuos significativos conmovedores que descubrieran al Papa. En tanto que en la sinusoidal cíclica espiralina historia, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lo dijera a mas y a más, pero y empero, más bien mejor preferible quizás y sin quizás, asina ansí así el dicho expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario: "No queremos ser candil en la calle y oscuridad en la casa, yo sostengo que la mejor política exterior es la interior. Si estamos bien en México, nos respetan afuera", persistió el mandatario mexicano. Mas y más, pero y empero, más bien mejor preferible quizás y sin quizás, o sea y es decir, decir que de entre la política exterior de México y la política interior de México, el presidente de México, estaría pensando en el Ingenioso Hidalgo, en la ironía ofensiva defensiva quijotesca cervantina absurda medular estable profunda, que ha de ser y en donde ha de estar la hipocresía astuta picaresca del dicho expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario, la luz de la calle y la oscuridad de la casa.
Con digresión y sin digresión, la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Y, fuera el filósofo griego Diógenes de Sinope, 363 antes de Cristo, fuera el padre abanderado de la búsqueda del tiempo perdido al través del tiempo conocido convencido. Se hizo famoso por sus trucos filosóficos, como llevar una lámpara a las doce en punto del mediodía, y, afirmar estar buscando a un hombre de entre la honestidad y la deshonestidad, de entre lo racional y lo irracional, de entre el amor y el odio, de entre la locura y la cordura, de entre la razón y la sinrazón. Agora ahora hogaño, el filósofo griego Diógenes de Sinope, llevaba por dentro como el Papa Juan Pablo II, el sindrome expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario de la luz de la calle y la oscuridad de la casa. El sindrome expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario de la luz de la calle y la oscuridad de la casa, que para don Quijote, era la ironía ofensiva defensiva quijotesca cervantina absurda medular estable profunda de entre la locura y la cordura. Mas y mas, pero y empero, Diógenes, llevaba la ironía y el cinismo expresivo afuera y adentro, llevaba la ironía y la hipocresía expresiva por dentro. Ahora agora hogaño, Diógenes, don Quijote, Juan Pablo II y Andrés Manuel López Obrador, en circular cíclica espiralina historia, engastados en y con la luz de la calle y la oscuridad de la casa.
Las elecciones presidenciales en Venezuela. El Con divagancia y sin divagancia, la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Esta perola perorata paraulata llanera cojedeña cantarina que se orina de entre nube con agua y nube sin agua en mi rancho de Cantaclaro de San Carlos, a las cinco en punto de la mañana del día de Santa Sabina, en que sonaba María Teresa Chacín, En este País, cuando viéneseme la página web de la Iguana TV, https://www.laiguana.tv/articulos/1277713-reaccion-lopez-obrador-sentencia-tsj-sobre-presidenciales/ La reacción de López Obrador tras sentencia del TSJ sobre las presidenciales en Venezuela. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió este viernes esperar "que se den a conocer las actas" para reconocer la victoria electoral del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el pasado 28 de julio, que ya fue ratificado con una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) tras un peritaje técnico: "Vamos a esperarnos, en el caso de Venezuela (…) No queremos ser candil en la calle y oscuridad en la casa, yo sostengo que la mejor política exterior es la interior. Si estamos bien en México, nos respetan afuera", insistió el mandatario. En su sentencia, la Sala Electoral del TSJ le pidió al Consejo Nacional Electoral (CNE) que publicara los "resultados definitivos" en la Gaceta Electoral. Por ello, el jefe de Estado mexicano expresó que su Gobierno va a "esperar a que se den a conocer las actas". Al ser consultado sobre la lectura que le daba a la orden del TSJ al Poder Electoral, aseveró: "No hago conjeturas porque somos respetuosos". Por otro lado, López Obrador negó que hubiera tenido comunicaciones recientes con Maduro, tal como afirma la oposición mexicana "calumniosamente"; pero confirmó que sostuvo una llamada telefónica con los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sobre el tema de Venezuela. El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela convalidó los resultados oficiales de los comicios celebrados el pasado 28 de julio, que confirmaron la reelección del presidente Nicolás Maduro para el período 2025-2031. Lula y Petro sacaron nuevo comunicado sobre las presidenciales en Venezuela (+TSJ) Los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Gustavo Petro emitieron un comunicado conjunto tras sostener conversaciones telefónicas sobre el tema de texto señala que ambos mandatarios "siguen convencidos de que la credibilidad del proceso electoral sólo podrá restablecerse mediante la publicación transparente de datos desglosados y verificables". "Como países vecinos directamente interesados en la estabilidad de Venezuela y de la región, y testigos de los Acuerdos de Barbados, Brasil y Colombia mantienen abiertos sus canales de comunicación con las partes y reiteran su disposición a facilitar el entendimiento entre ellas", indica el comunicado. Además, señala que Brasil y Colombia toman nota de la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), el cual convalidó el triunfo del presidente Nicolás Maduro en los comicios presidenciales tras un peritaje de los resultados. Por último, Lula y Petro manifiestan su "total oposición a la continuada aplicación de sanciones unilaterales como instrumento de presión", pues aseguran que estas "perjudican la población de los países sancionados, en especial a los sectores más vulnerables". Agora ahora hogaño, el presidente de México, está bien claro sobre lo del cinismo y la ironía del filósofo griego Diógenes y sobre el cinismo y la ironía del ingenioso hidalgo, don Quijote de La Mancha, cuando dijera, Andrés Manuel López Obrador, que no queremos ser candil en la calle y oscuridad en la casa, yo sostengo que la mejor política exterior es la interior. Si estamos bien en México, nos respetan afuera. Esto representa una contundente expresión contradictoria caliginosa borrosa, de la tesis TINACO, de los casos correlativos articulados armónicos límite límbico grembo fronterizo simultáneos contradictorios caliginosos borrosos de equilibrio dinámico dialéctico difuso en la perogrullada primera vez de Perogrullo, que no es otra cosa que la ironía ofensiva defensiva quijotesca cervantina absurda medular estable profunda, que ha de ser y en donde ha de estar la hipocresía astuta picaresca del dicho expresiva explosiva metafórica reflexiva popular consuetudinario, la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Asina asín así, en esta situación histórica cíclica sinusoidal contradictoria borrosa, no han de estar ni Lula ni Petro, que endespués del 28 de julio de las elecciones en Venezuela, en que resultara ganador el presidente Nicolás Maduro, volaran la gallera y saltaran la talanquera y enfocáranse mas y más con el capitalismo histórico histérico rapaz, en tanto que, Andrés Manuel López Obrador, encaminárase, mas y más, con el materialismo histórico flemático capaz, cuando dijera: "No queremos ser candil en la calle y oscuridad en la casa."
Si, la luz de la calle y la oscuridad de la casa, es expresión de la hipocresía astuta picaresca. Entonces sea dicho que decir el sindrome expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario, es tanto como decir que ha de estar de entre la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Ergo vergo sea dicho que el filósofo griego Diógenes de Sinope, 363 antes de Cristo, fuera el padre abanderado de la búsqueda del tiempo perdido al través del tiempo conocido concebido. Que Diógenes de Sinope con una lámpara a las doce en punto del mediodía, afirmara estar buscando realengo por todas las calles de Atenas a un hombre de entre la honestidad y la deshonestidad, de entre lo racional y lo irracional, de entre el amor y el odio, de entre la locura y la cordura, de entre la razón y la sinrazón. Que el filósofo griego Diógenes de Sinope, llevaba por dentro el sindrome expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario de la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Que don Quijote con la ironía ofensiva defensiva quijotesca cervantina absurda medular estable profunda de entre la locura y la cordura, estaba nombrando al sindrome expresivo explosivo metafórico reflexivo popular consuetudinario de la luz de la calle y la oscuridad de la casa. Que Diógenes, llevaba la ironía y el cinismo, la ironía y la hipocresía por fuera y por dentro. Que Diógenes, don Quijote, Juan Pablo II y Andrés Manuel López Obrador, encaminados en la espiralina cíclica sinusoidal historia noria notoria, estuvieran engastados en y con la luz de la calle y la oscuridad de la casa.