"No hay persona más cobarde que la que utiliza mentiras como pretextos para alejarse sin culpa" (Anónimo)
Hay frases populares que dejan muy mal paradas a las personas cobardes, y que socialmente siempre han sido "muy mal vistas", cuando aseguran que los cobardes gritan, insultan, amenazan y dicen lo que les da la gana, solo cuando se sienten a salvo, de que no les va a pasar nada…y eso es lo que ha estado pasando por la mente de las y los venezolanos, en estos días con el caso del señor Edmundo González, el excandidato presidencial tapa – afiche de la oposición radical.
Nos referimos a que en un acto de verdadera cobardía política (lo hace desde Madrid) y aprovechándose que ahora tiene el estatus de asilado político de España, para decir que la carta firmada de su puño y letra (Edmundo González) en la que acata las decisiones de los poderes públicos de Venezuela y reconoce el triunfo electoral del Presidente de la República, Nicolás Maduro…ahora dice que firmó la carta bajo coacción.
En materia política, hay una triada actitudinal que las personas no perdonan: la cobardía, la traición y la corrupción, lo ven como acciones rastreras y antiéticas, que solo logran aumentar la desconfianza en las y los políticos, que se venden como "honestos y preparados" y que al final venden sus ideas al mejor postor, aplicando un miserable pragmatismo.
De verdad que éste personaje tapa – afiche es un caso bien particular, desde el llamado caso de las personas religiosas asesinadas en El Salvador y que se acusó fuertemente de serias sospechas de la participación intelectual del cuerpo diplomático de los que trabajaban en la embajada de Venezuela en la ciudad de San Salvador.
Luego de su salida y jubilación de la Cancillería Venezolana, el señor Edmundo González, disfrutaba de un largo retiro de los asuntos de Venezuela, y reaparece éste año 2024, con la misión de "prestar su nombre" para cumplir con la formalidad de "cuidar la tarjeta electoral" del sector opositor más antichavista y le aseguraron que no se preocupara por nada y de manera extraña, no firmó el respeto por los resultados de las elecciones presidenciales
Sin embargo, desde el mismo día de las elecciones, se escondió en la residencia del embajador de Los Países Bajos.