Campo minado y campo laureado. Casos correlativos concordados coordinados tensos armónicos articulados límite límbico grembo fronterizo simultáneos contradictorios caliginosos difusos borrosos de equilibrio dinámico dialéctico difuso en la perogrullada primera vez de Perogrullo. Campo minado y campo laureado, han de margullir en el metafórico cleuasmo quiasmo río heraclitoiano de Heráclito, 500 años antes de Cristo. Y, la importancia que tiene la tesis TINACO y la Filosofía de las 4E de Maleo 2001, ha de estar en el equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico. O sea y es decir, decir en la perogrullada primera vez de Perogrullo. Y, hemos de recordar al equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático, en el camino medio moral budaiano absurdo medular estable profundo de entre el ser y no ser de Buda, en la grisura sombría penumbra whitmaniana laoziana de ente el yin y el yang en el lienzo pictórico blanquinegro de Walt Whitman y Laozi. Y, hemos de recordar a Buda, padre abanderado de las contradicciones caliginosas borrosas difusas de Oriente, cuando expresara que vivimos en un mundo plagado de contradicciones caliginosas difusas, y, el símbolo y la realidad, han de ser una de esas contradicciones, asina ansí así, como el blanco y el negro, el marfil y el azabache. Y, el camino medio moral budaiano absurdo medular estable profundo ha de estar de entre el símbolo y la realidad, el marfil y el azabache. El camino medio moral budaiano absurdo medular estable profundo ha de estar de entre el campo minado y el campo laureado.
Con digresión y sin digresión, el campo minado y el campo laureado, asina asín así, el símbolo y la realidad, el marfil y el azabache, y, de entre estos casos correlativos simultáneos contradictorios, ha de estar la gris penumbra sombría whitmaniana laoziana, el camino medio moral budaiano absurdo medular estable profundo. Y, toda esta perola perorata paraulata, deviene de las contradicciones de lo que Ociel Alí López, nos presentara el 2 de octubre de 2024, al través de la página web de la Iguana TV, https: //actualidad.rt.com/opinion/ociel-ali-lopez/525147-sexenio-sheinbaum-pronostico-laureles-campo-minado. En que, Ociel Alí López, nos informara sobre el sexenio de Sheinbaum, en que Alí, nos abriera la metáfora de los casos correlativos concordados coordinados tensos armónicos articulados simultáneos contradictorios caliginosos difusos borrosos, asina ansí asín así, del campo minado y el campo laureado. Y, asina ansí asín así, Ociel Alí López, enfocara lo que sigue: "La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, saluda a sus partidarios en el Zócalo. El primero de octubre de 2024. La flamante presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ya posicionada en un acto repleto de elementos simbólicos, tiene muchas condiciones a favor para desarrollar una labor exitosa durante su sexenio. Tiene mayoría calificada en las dos Cámaras del Congreso; goza de una inmensa legitimidad debido a su triunfo con una ventaja de más de treinta puntos de su seguidora más cercana; va a transitar por una economía relativamente estable y comienza su trabajo diplomático con amplia fluidez, entre aliados y adversarios ideológicos. El gobierno del presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, supo mantener relaciones estables con EE.UU., incluso cuando gobernaba el volátil Donald Trump, que enfiló todas sus baterías contra México en la campaña presidencial en la que resultó ganador. En ese horizonte podrían augurarse altibajos, pero no hay atisbos de ruptura con su poderoso vecino del norte. Por otra parte, el partido Morena ha cumplido a cabalidad la estrategia de hacerse hegemónico a lo largo del país, tras elecciones a diversa escala. Con su avance, ha hecho prácticamente desaparecer a los espacios políticos que habían dominado la escena política en México por más de cien años: el Partido de la Revolución Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN). Tanto el PAN como el PRI aglutinaron períodos de mucho poder, pero ahora están en desbandada y divididos. De hecho, pese a su enorme poder financiero y mediático, los espacios conservadores no han sabido enfrentarse al movimiento renovador inaugurado por López Obrador, y de allí su nefasto resultado en las pasadas presidenciales. Todo parece indicar que le esperan tiempos fulgurantes, sin embargo, los riesgos no son marginales. Es mucho lo que se juega la nueva administración, con campos minados que le costará traspasar en un México tan complejo como indeterminado. Así las cosas, no se vislumbra un sexenio atribulado o una gestión debilitada. Además, la presidenta tiene una formación política y técnica que está generando confianza y entusiasmo en el país. México va a gozar de la estabilidad necesaria, va a llevar unas relaciones pragmáticas con el resto de países con los que no guarda muchas coincidencias y, en líneas generales, la herencia diplomática que recibe le permitirá sortear las eventuales dificultades sin que eso afecte las relaciones comerciales, especialmente con EE.UU. y Canadá, sus socios del T-MEC. Todo parece indicar que le esperan tiempos fulgurantes, sin embargo, los riesgos no son marginales. Es mucho lo que se juega la nueva administración, con dificultades que le costará traspasar en un México tan complejo como indeterminado.
México y los campos minados. Hasta ahora, los gobiernos izquierdistas que emprendieron el ciclo progresista latinoamericano han tenido problemas en cuanto a la sustitución de sus líderes históricos. Ha pasado en diversos países y puede generar sombra en las actuales experiencias. Cualquier relevo generacional se estima necesario, pero genera sospechas de variada índole. Sheinbaum se enfrenta a esas dudas. Es indudable que para gobernar un país tan conflictivo e ininteligible como México hace falta mucho más que enaltecer elementos simbólicos. Sheinbaum trae formidables fortalezas: es la primera mujer presidenta de un país de importancia medular para la región; tiene un manejo ético del lenguaje hacia los más vulnerables, como las personas empobrecidas y las comunidades indígenas; y procede del mundo científico, lo que le suma una potencia inigualable, pocas veces vista. La presidenta entrante de México, Claudia Sheinbaum, y el saliente, Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, la situación social en México es difícil. Si bien la política se ve muy estable, el tejido social ha sufrido tremendas dislocaciones a lo largo de sus historia reciente. El tema de la violencia criminal no pudo ser cauterizado ni encapsulado por el gobierno de López Obrador. Es un problema social profundo e histórico que ha calado hondo en todo el país, ya que no es un fenómeno que se circunscribe solamente al norte, sino que se ve con fuerza en el sur del país y en muchos estados. El gobierno de López Obrador sobrevivió a esta situación, pero después de seis años gobierno, este flagelo sigue desarrollándose. De los territorios se desprenden imágenes que indican un rotundo descontrol por parte del Estado y hay declaraciones de militares le dan beligerancia a los actores criminales. Entendemos que la situación no es de fácil depuración y sigue siendo una pradera que puede arder por algún costado. El caso irresoluto de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa es otro punto que enloda el final de la gestión de su López Obrador, pero que también genera más dudas que certezas sobre la nueva administración. Sheinbaum hereda una estructura institucional con unas bases muy sólidas, pero recibe problemas histórico-sociales que se han venido reproduciendo, expandiendo y mutando de la forma más cruenta. Pareciera que el problema de la impunidad tiene niveles de profundidad tal que los gobiernos de turno no van a tener la capacidad de resolverlos. Sheinbaum hereda una estructura institucional con unas bases muy sólidas, pero recibe problemas histórico-sociales que se han venido reproduciendo, expandiendo y mutando de la forma más cruenta. Ya hay situaciones que la nueva administración tiene que resolver porque superarlas será clave para la continuidad o no del proyecto político de la llamada 'Cuarta Transformación'. No es sencillo el panorama para la flamante presidenta. Llega con mucha fuerza, pero también con unos problemas gigantes que ninguna gestión ha podido superar y que van creciendo e impactando la cotidianidad del mexicano. Claudia Sheinbaum enumera los 100 compromisos de su Gobierno. La capacidad de Sheinbaum para sortear estos obstáculos, enfrentándolos de manera real, es lo que va a marcar la diferencia de su gestión. La continuidad con el gobierno anterior no puede derivar en un proceso de burocratización que recuerde las malas experiencias de la hegemonía priísta. El objetivo de la flamante mandataria es construir un "segundo piso" para esta nueva etapa histórica, que reimpulse la gestión progresista. La posibilidad de concreción es uno de los criterios por la que será evaluada estos seis años. Sheinbaum apenas empieza. Parece que transitará un camino lineal y cómodo, pero realmente se enfrentará a monstruos en medio de campos minados. Todo está por verse." Agora ahora hogaño, la flamante presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ya posicionada en un acto repleto de elementos simbólicos, en que se destaca su vestido de marfil. El marfil con que ella representa a la clase indígena y el azabache que lo representa la oposición de la clase política del Partido de la Revolución Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN). Y, a buen seguro que la presidenta, Claudia Sheinbaum, se ha de mover como un peso pluma en el centro del cuadrilátero en equilibrada optimalidad ortogonal pitagórica y como un pez en el agua nadando de entre dos aguas. Pues, ha de tener, mayoría calificada en las dos Cámaras del Congreso. Ha de gozar de una inmensa legitimidad debido a su triunfo con una ventaja de más de treinta puntos de su seguidora más cercana. Ha de transitar por una economía relativamente estable. Ha de comenzar su trabajo diplomático con amplia fluidez, entre aliados y adversarios ideológicos. Ha de mantener relaciones estables con EE.UU., pues, el gobierno del presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, la supo mantener. No ha de haber atisbos de ruptura con su poderoso vecino del norte. Agora ahora hogaño, todo parece indicar que, a la presidenta, Claudia Sheinbaum, le esperan tiempos fulgurantes, asina ansí así como lo de lo de la histórica paz octaviana absurda medular estable profunda de entre la paz y la guerra de Octavio César, año 14 después de Cristo. Asina ansí así como lo de la borrosidad diplomática venezolana, en que el padre abanderado ha de ser el presidente Nicolás Maduro con 931 medidas coercitivas unilaterales ilegales criminales y 16 intentos de magnicidio. La borrosidad diplomática venezolana, ha de tener vinculación con el presidente Maduro. El presidente Maduro, abrevara ingurgitando diplomacia pacífica amorosa aguerrida acerada pura dinámica dialéctica dialógica diabética equilibrada absurda medular estable profunda de entre el materialismo histórico flemático capaz y el capitalismo histórico histérico rapaz, de entre las contradicciones, de entre las opositivas caliginosas borrosidades. El presidente Maduro, de entre la guerra y la paz, el amor y el odio, la rabia y la ternura, la razón y la sinrazón, la cordura y la locura, la tesis y la antítesis, el exceso y el defecto, lo consciente y lo inconsciente. El presidente Maduro, con la diplomacia pacífica amorosa aguerrida acerada pura dinámica dialéctica dialógica diabética equilibrada absurda medular estable profunda, o sea y es decir, decir la borrosidad diplomática venezolana. A la presidenta, Claudia Sheinbaum, le esperan tiempos fulgurantes, de entre los casos correlativos concordados coordinados tensos armónicos articulados límite límbico grembo fronterizo simultáneos contradictorios caliginosos difusos borrosos de equilibrio dinámico dialéctico difuso en la perogrullada primera vez de Perogrullo de entre el materialismo histórico flemático capaz y el capitalismo histórico histérico rapaz, o sea y es decir, decir de entre el campo minado y el campo laureado.
Si el campo minado y el campo laureado, es tanto como decir el materialismo histórico flemático capaz y el capitalismo histórico histérico rapaz. Entonces sea dicho que el campo minado y el campo laureado, han de margullir en el metafórico cleuasmo quiasmo río heraclitoiano de Heráclito, 500 años antes de Cristo. Ergo vergo sea dicho que la presidenta, de México, Claudia Sheinbaum, que con su vestimenta de marfil representa a la clase indígena y el azabache que lo representa la oposición de la clase política del Partido de la Revolución Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN). Que a la presidenta, Claudia Sheinbaum, le esperan tiempos fulgurantes, que como lo de lo de la histórica paz octaviana absurda medular estable profunda de entre la paz y la guerra de Octavio César, año 14 después de Cristo. Que la presidenta, Claudia Sheinbaum, ha de aferrarse a una diplomacia pacífica amorosa aguerrida acerada pura dinámica dialéctica dialógica diabética equilibrada absurda medular estable profunda de entre el materialismo histórico flemático capaz y el capitalismo histórico histérico rapaz. Que es tanto como decir el campo minado y el campo laureado.