Inaudita falacia en Venezuela y en el Norte a poco habrá elecciones

Viernes, 01/11/2024 12:37 PM

Es inaudito e insólito que a tres meses de las elecciones del 28J se siga estirando la arruga por un gobierno amparado en un régimen oprobioso para nuestro gentilicio. Se hacen los sordos, los ciegos y los mudos, y actúan como en la IV República como adecos y copeyanos de aquella épocas de abusos, de represión jacia el pueblo y cuando se pagaban y se daban el vuelto. Y cuando se piden explicaciones a NiMaMo, con su cara bien lavada nos dice que todo está de maravilla, y seguimos aguantando una crisis desde hace once años, con pelazón, por lo que entonces las izquierdas se alebrestaban y enfrentaban a los zánganos para que pararan bolas. La historia no se repite, el hombre sí choca dos veces con la misma piedra, y repite los equívocos, porque es la manera más fácil de evadir sus responsabilidades y echarle el carro a la nación. Pero más temprano que tarde, tendrán que rendirle cuentas al soberano, y no valdrá más tozudez por creerse más creyones, dándoselas de cuatriboliados porque tienen a sectores corruptos dentro de las fuerzas armadas y hacen del ejercicio gubernamental su Estado a la medida, atropellando desde las instituciones que ilegal e ilegítimamente desconocen la CRBV, las leyes y acuerdos nacionales e internacionales, y no respeta normas, ni los mínimos criterios de ecuanimidad y ponderación.

Son tiempos difíciles y críticos para la V República, el país lo sabe y lo sufre, la gente lo padece y lo aguanta hace ya una década, donde una minoría que se hace llamar burguesía revolucionaria, planteada por los gendarmes necesarios que mandan mandando, someten a la mayoría apresada en el país, sin posibilidades por edad y otras circunstancias, de poder emprender otros derroteros fuera del territorio nacional, como lo han hecho millones de compatriotas. Quienes hemos acompañado el proceso de cambios revolucionarios desde que asumió el Comandante Chávez, hasta su deceso a manos de sus enemigos, y que nos sentimos defraudados por NiMaMo, traidor a las causas y postulados que nos dimos desde 1998. Como criollos redivivos, los nimamistas se desviaron del legado de los libertadores inmolados por la patria, para darse un gobierno a la medida y hacerse con el país como si de un botín de guerra se tratara, metiendo en saco roto los principios y valores chavistas, socialistas, ideales y promesas incumplidas y esperanzas hueras que se han desvanecido, como el rumbo plasmado en el Plan de La Patria. NiMaMo es el primer responsable de los males que se han abalanzado sobre el país, y ya basta de estar buscando chivos expiatorios, porque es él, por si se le ha olvidado, falible como el resto de los humanos, lo que pasa es que el poder lo ha segado, ensoberbecido, y se comporta como lo que no es, porque no es él, es el pueblo.

Este régimen y sus cómplices por acción y por omisión tienen los días contados, están cada vez más cerca de su final, que no es el destino de Venezuela, ni del proceso de cambios bolivariano, chavista, socialista para el siglo XXI que ya arriba a su cuarto de siglo. El gobierno lo sabe, el nimamismo tiene que decidirse para el 10 de enero de 2025, qué hará el Psuv, se dejará arrastrar hacia ese abismo que se abrió el 28 de julio, y que desde entonces los tiros del gobierno les están saliendo por la culata. NiMaMo se está quedando más solo que la una en su laberinto, del cual no podrá salir, y de los negocios y los intereses que han favorecido más a los extraños que a los propios, ya la cuenta es larga, de lo cual han recibido sendos beneficios los y las burgueses revolucionarios, y los miembros del tren ejecutivo. Fue por lana a los BRICS+ y salió trasquilado, calculó mal, y lo dejaron en la estacada, perjudicando a Venezuela, al pueblo, porque NiMaMo y los suyos, socios y cercanos, no sufren las consecuencias, es hora de que termine esta pesadilla, una crisis que suma once años continuados donde la corrupción es lo único que es emblemático, y en ascenso, no así los millardos robados a la nación, y pareciera que no hay dolientes, que no les importa para nada. Los que no oyen consejo, no llegan a viejo, y el régimen y sus aláteres tampoco llegarán más lejos. Los que llevan enriqueciéndose en esta última década son muchos, ilícitamente han metido mano en el tesoro nacional, por interpuestas personas en PDVSA y sus filiales, en las empresas del Estado, el arco minero y las concesiones de la fachada Atlántica. Y qué será de la Guayana Esequiba.

Entraremos en noviembre y el 5 habrá elecciones presidenciales, donde el magnate Trump, y enemigo de los suramericanos, afrodescendientes y asiáticos, ni se diga de los árabes y musulmanes. Son demasiados frentes abiertos en todo el mundo, y los riesgos que corre cualquier administración que llegue a la Casa Blanca, estará marcada por el conflicto don las potencias del G7 y G20 frente al resto del escenario en el contexto internacional, de una economía en franca decadencia, de las cuentas por saldar con los socios de las corporaciones que controlan a los gobiernos y los bancos desde la reserva federal, y el daño al ecosistema por el mayor consumo y generación de contaminantes que ponen en peligro al planeta. Además, debemos mencionar la proliferación de armas y pertrechos que se están acumulando para una posible III Guerra ahora global, que vendrá antes del 2050 para instaurar el Nuevo Orden Global. De los secretos de Estado y del Pentágono nos encargaremos en próximas entregas, donde hablaremos de avistamientos y visitas de extraterrestres al planeta, que de alguna manera quieren con su presencia, tratar de preservar a la Tierra, de una posible y probable extinción para las especies que en ella existen.

Las alertas y alarmas en todas las agencias de seguridad del planeta está encendidas, los conflictos en el mundo y la grave situación de las relaciones con los países del orbe, donde los muchos que son pobres enfrentan desastres y situaciones graves para sus vidas, mientras los recursos se invierten en mayor tecnología para la guerra, la destrucción, sin detenerse en esa carrera sin cuartel por hacerse con los recursos de los países en vías de desarrollo, donde si llegara de nuevo a la presidencia Donald Trump, pese a jugar con fuego, por jugar con fichas marcadas, que se acerca a Vladimir Putin, mientras se aleja de los asiáticos, en una especie de componenda occidental. El planeta hay está repartido en cuatro toletes, lo que pasa es que no lo notamos, apenas si vemos la punta del iceberg, porque las penurias y calamidades apenas está comenzando a impactarnos directamente en el rostro por parte del 1% respecto del 99% restante, sin incluir las especies y especímenes, y también incluimos a los no humanos, habitantes de los más inverosímiles parajes del planeta. Estos temas todavía entre nosotros son tabú, somos ignorantes de lo que hay en realidad al sol de hoy. Porque estamos muy imbuidos y sometidos a lo que es lo común, las pugnas de los políticos, los empresarios, los industriales, magnates y nobles que todavía tenemos en los estados naciones donde son los pocos con poder y verdadero dominio de la realidad que vivimos, mientras los muchos nos refugiamos tras las plegarias y rezándole a cuanto dios, santo o santa se han inventado, además de satanás y su cohorte de demonios de los cuentos y las fábulas infantiles que las religiones inventan, pero niegan que existan los extraterrestres y demás entidades en el cosmos vasto, ancho, inconmensurable e infinito, como la misma idea al imaginarnos tantas narrativas, textos y contextos.

Acostumbrados como estamos, siempre enfrentados los unos contra los otros, ellos y ellas, hace ya bastante tiempo, desde que llegamos al mundo y comenzamos a medrar en el planeta, siendo naturaleza y haciendo con lo que hay de manera simbiótica, o sea, interactuando física, química, biológica y mental y espiritualmente, en relaciones y asociaciones de organismos, especies diferentes, y beneficios mutuos, mientras ocurre el desarrollo y la evolución de la vida. Otra cosa muy diferente es lo que hemos hecho como observadores y ejecutores de una existencia desde las experiencias individuales, potenciadas por lo negativo sobre lo positivo. Es decir, vivir en un mismo planeta entre cada vez más distintos intereses que en nada van acordes con los principios y valores, con los credos y los fundamentos de la conciencia de lo que encarnado en los seres que llamamos humanos, para diferenciarlos de qué, de quiénes, a los que negamos de su existencia. De esto ya nadie parece querer ocuparse, no para cambiar a alguien, que también, ni para salvar a alguien, que también, sino de elevar la conciencia, que no es que sea propia, porque o es y hay conciencia, o nada tendrá sentido. Es decir, si soy bueno lo soy por mí mismo, porque intuyo que siéndolo me ayudo a mí y por ende a los demás. Más gráfico, si lanzo un boomerang cargado de amor y bendiciones, qué obtendré. Y en caso contrario, lo lanzo con odio, animadversión y egoísmo, qué recibiré a cambio. El problema es de valores, de ser o no ser.

Es por eso que la situación no puede ser sino la que tenemos, donde las posturas están contrastadas entre los pocos que tienen poder de decisión por la fuerza y el control sobre los muchos, de quienes a su vez dependen para que hagan las cosas que aquellos no hacen, es decir trabajar y ganarse el pan con el sudor de la frente y los callos en las manos y los pies. O es que acaso con la Inteligencia Artificial ya no se requiere que los seres humanos hagan los trabajos de esclavos, de obreros, de campesinos, de pescadores, de artesanos, de técnicos, profesionales y demás. Si lo quisieran, se podría acabar en pocas décadas todas las diferencias habidas hasta ahora, pudiendo alimentar, medicar, darle salud, educación, vivienda, manutención y estipendios a cada persona. Y sobraría tiempo para dedicarnos al estudio, la investigación, el desarrollo y el progreso de los indígenas del planeta Tierra, y para relacionarnos con los extraterrestres y alienígenas de otros mundos, esos mundos que antes fueron considerados de dioses y semidioses desde los mitos, la magia y las religiones.

Qué cambios se esperan si seguimos haciendo las mismas cosas, cómo va a progresar el ser humano en el planeta, si ya no queda tiempo, porque se ha puesto en riesgo a la entera especie humana, pese a que hay quienes ya tienen tomadas sus previsiones ante cualquier evento sobrevenido y anómalo que pueda acelerar los desastres que se vienen anunciando insistentemente, por lo menos desde hace un siglo. Y qué se ha obtenido a cambio, más guerras, más destrucción, más odio. Qué tristeza da cuando vemos que hasta los animales más agresivos han demostrado ser mejores que algunos seres que se hacen llamar humanos. Y lo diré, es porque estamos saliendo de la era de la oscuridad, y no queremos abrir los ojos para ver lo que hay frente a nuestros ojos, que deben mirar desde dentro, desde el cerebro astral, el corazón y la glándula pineal, que nos relacionan con el equilibrio y la armonía que se requiere en este momento, para que el planeta entero, con todo lo que implica para la vida de una civilización terráquea, tenga posibilidades de alternar con otras civilizaciones que nos han precedido en este recorrido que se inició antes de que el tiempo fuera y el espacio y la materia como un todo permitiera esto que conocemos desde nuestra experiencia existencial. Solo si despertamos y nos damos cuenta, contará para cada cual desde lo que está, para que sea lo mejor de ambos mundos. No perdamos más tiempo, demandemos los 99% restantes en el planeta, que otro mundo es posible.

Así las cosas y casos de casa, podrán tener la significancia tantas veces anhelada y pocas veces alcanzada, es significativo que se comprenda, somos tradicionalistas, demócratas, nacionalistas, republicanos, populistas, de derechas y de izquierdas, de los países de los que somos, y los ponemos por encima de lo terráqueo, que son los discursos y las temáticas que esgrimen los candidatos a las presidencias de los diferentes partidos enfrentados en las justas electorales. Antes uno debía eliminar al otro o la otra, para poder ocupar el máximo cargo, el de emperador. Hoy pareciera que han cambiado las cosas, y en realidad sigue siendo lo mismo, donde los eufemismos edulcoran las píldoras que sirven para todo, sobre todo, para mantenernos dopados, ignorando que no están todos los que son, ni son todos los que están, sino los lobos enfrentados a otros lobos, y que me perdonen los lobos y las lobas. Basta con ver las figuras que nos representan en el escenario nacional, regional, hemisférico y mundial, y ahí veremos qué nos sobra y qué nos falta, como individuos e individuas, patria, nación, mundo, universo.

Vivimos en medio de diferencias y polarizaciones que nos sumergen en el torbellinos como sustentos del huracán que amenaza a las civilizaciones, llevadas de nuevo al enfrentamiento por el orbe, y de continuar por esta ruta, solo habrá desolación, destrucción y muerte. Vienen las elecciones en EEUU el 5 de noviembre entre los principales contendientes, ahora otra mujer, Kamala Harris se enfrenta a Donald Trump, reflejo de las dos visiones opuestas en el papel que juega el gobierno y la postura ante lo que se considera como justicia social y quienes se oponen al mundo de las grandes diferencias de percepción hoy en día. Veamos qué ocurre en tal política de inclusión, derechos civiles y apoyo de comunidades marginadas, que incluyen los derechos para las mujeres y las comunidades LGBT. En tanto que los conservador, con Trump a la cabeza se oponen a tales beneficios para el pueblo y los inmigrantes. En cuanto a la economía Kamala aboga por impuestos progresivos con mayor gasto en servicios públicos y salud, y reducir la brecha de desigualdad. Trump se inclina por los recortes, impuestos y desregulación, y enfatiza un crecimiento económico a través de incentivos empresariales. En cuanto a las relaciones internacionales, Kamala defiende las alianzas tradicionales, OTAN y política exterior basada en derechos humanos y democracia. Trump se inclina por un enfoque aislacionista, crítica a los acuerdos internacionales, y priorizar los intereses estadounidenses sobre los de las alianzas. Del cambio climático Kamala reconoce su urgencia y apoya políticas de transición hacia energías renovables. Trump minimiza la importancia del cambio climático, favorece la explotación de combustibles fósiles. En el tema de la inmigración, Kamala propone una reforma integral que incluya un camino hacia la ciudadanía para inmigrantes indocumentados. Trump promueve políticas de endurecimiento de fronteras y restricciones severas a la inmigración.

En las últimas décadas, en los EEUU se han experimentado cambios significativos en las simpatías hacia las políticas internas distribuidas por región y quedan del siguiente modo. En el Sur, histórico bastión demócrata, cambia su apoyo a los republicanos desde los años 60, en especial al implementarse las leyes en derechos civiles. En el Noreste, se mantienen con inclinación al Partido Demócrata, con políticas progresistas y sociales, también observando un aumento en el apoyo a candidatos republicanos en ciertas áreas. El Medio Oeste, considerado tradicionalmente un campo de batalla fluctuante entre los dos partidos, aunque en años recientes se ha notado un crecimiento apoyo republicano, sobre todo en áreas rurales. En el Oeste la tendencia es al progresismo en estados como California y Colorado, y apoyo firme a los demócratas, pero algunas áreas rurales pudieran inclinarse hacia los republicanos. Todo ello se debe en parte a los cambios habidos por los movimientos demográficos y la creciente diversidad étnica racial, sobre todo en los estados del Oeste y del Sur, con influencia en los demócratas; en tanto que el aumento del nacionalismo en sectores blancos fortalece al Partido Republicano. En las áreas urbanas la tendencia es más liberal y apoyan a los demócratas, y en las áreas rurales muestran su apoyo a los republicanos, evidenciando la polarización en ascenso. Estos cambios reflejan transformaciones políticas y demográficas, económicas y culturales en EE.UU. el populismo y el nacionalismo de derecha, desempeñan un papel significativo en la política estadounidense que es reciente y se manifiesta en los siguientes aspectos.

Desde el ascenso de Trump, marcando un punto de inflexión por su retórica populista y nacionalista en las elecciones de 2016 contra Ilary Klinton, retórica que le atrajo muchos votos de la gente desilusionada con el establishment político. Con un estilo directo y de confrontación se atrajo un amplio sector de la población en general, capitalizando el descontento frente a la globalización, prometiendo proteger a los empleos locales y restaurar la industria estadounidense, siendo positivo y efectivo, sobre todo en las regiones afectadas por las deslocalizaciones. Sin embargo, esa retórica nacionalista condujo al endurecimiento de políticas migratorias, y se levantaron muros, apelando a la idea de la America First y de protección a la identidad nacional. Su populismo contribuyó a la creciente polarización del país, y lo dividió en votantes de líneas ideológicas, como nacionalistas de derecha, envueltos como sinónimo de lealtad a Trump y a su agenda, siendo un enfoque divisionista. Entre los grupos y movimientos sociales como los Proud Boys, movimientos nacionalistas, se hicieron notar al promover una agenda opuesta a la diversidad y movimientos por los derechos civiles, generando tensiones sociales. El populismo reconfiguró al Partido Republicano, desplazando a figuras más tradicionales y moderadas y estableciendo un nuevo estándar en la retórica y las políticas del partido. Nótese que en medio de la crisis y la pandemia del COVID-19, el nacionalismo influyó en la narrativa de las respuestas gubernamentales, cuestionando la eficacia de las medidas adoptadas y promoviendo teorías de conspiración. En resumen, el populismo y el nacionalismo de derecha han cambiado el paisaje político estadounidense, afectando tanto la política electoral como el discurso público, y han creado un entorno de mayor polarización y conflicto social. Veremos qué ocurre en unos días.

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