Fascismo doctrina o qué

Martes, 03/12/2024 12:50 AM

Atilio Borón, El fascismo como categoría histórica: en torno al problema de las dictaduras en América Latina. Estado, capitalismo y democracia en América Latina. Buenos Aires: CLACSO, 2003.

En el siglo XIX Charles Maurras desarrolla un movimiento y lo llama Acción Francesa, de ideología nacionalista y racista, pretendía el retorno a la monarquía, pero es en Italia donde propiamente nace el fascismo, de la idea de Gabriele D’Annunzio, bajo el influjo de la lectura y las ideas de Nietzsche. Soldado en la I Guerra Mundial, cuando repara en una visión ultranacionalista, y es reconocido como héroe. En 1918 los aliados se reparten el botín de todo lo que habían arrebatado en los territorios conquistados, pero a Italia le tocó una miseria, además no obtuvo Dalmacia, una región de Croacia. D’Annunzio reunió un ejército y con dos mil soldados tomó la ciudad de Fiume, atestada de italianos, con Alceste de Ambris un sindicalista, redactan una constitución, La Carta de Carnaro, instaurando un régimen con rasgos particulares y en 1920, D’Annunzio se dio a sí mismo amplios poderes, obviando las encuestas y la democracia, y estableció un decálogo corporativo, en el cual todos debían pertenecer a uno como: obreros agricultores, técnicos agrícolas, comerciantes, empleados, funcionarios públicos, administradores, profesionales, cooperativas, pescadores y, los superiores; solo para superhombres, héroes y poetas. Un orador grandilocuente, daba discursos desde los balcones, y organizaba ceremonias simbólicas, casi religiosas, recurriendo al pasado de la historia romana, donde adoptó el ahora infame saludo que aparece en los frescos y esculturas de la antigua Roma, buscaba recuperar la grandeza latina, y creó un cuerpo de élite que bautizó los Arditi, osados o temerarios. Una milicia de camisas negras, que se encargaban de reprimir y encarcelar a críticos y disidentes, a quienes torturaban laxándolos con aceite de ricino. D’Annunzio se hizo llamar Il Duce, o guía, entonces otro paisano suyo iba ganando poder aprovechando el descontento generalizado en la población, al recibir escasos beneficios al salir de la guerra donde participaron. Era Benito Mussolini, y culpó de tal desventura a comunista y socialistas, donde militaba Antonio Gramsci, partido del que Mussolini había sido expulsado por su extremo nacionalismo, a quienes atacó enviando a los Camisas Negras, y tomó el poder por la fuerza, aplicando los consejos de D'Annunzio, haciéndose también Il Duce.

Fascismo viene de fasce, un haz o manojo, en referencia al antiguo símbolo etrusco, que luego adoptaron los romanos. Un fajo de varas con un hacha en el centro, simbolizando la fuerza y el poder del gobernante; todos unidos bajo la misma autoridad, Mussolini llamó a sus grupos armados fasce, y Hitler copió esa opción fascista, adosándole un fuerte ingrediente racista, convirtiendo en enemigos a aniquilar, a comunistas, socialistas, y a cualquiera que no perteneciera a la raza aria, a quienes culpabiliza de los males de Alemania y la Europa blanca. Fueron perseguiros y asesinados judíos, gitanos, los sexo diversos, los enfermos mentales, epilépticos y cualquiera con alguna malformación genética. Nacía entonces el Nazismo, abreviatura de nacional socialismo, de lo cual nada tenía.

De manera habitual los síncopas facha o facho, son usados en sentido peyorativo, pues alude a la persona de ideología fascista, aunque el término original, en sentido estricto, se refiera a las ideologías fascistas, extendido por en su uso coloquial en la forma en que hay se alude, con un tinte despectivo contra los oponentes, como ideologías conservadoras o reaccionarias. La finalidad es la de desprestigiar o invalidar el discurso contrario, o se usa con referencia a cualquier dirigente o gobierno totalitario, autoritario o nacionalista, independientemente que la persona o grupo así calificado se reconozca o no como fascista.

El fascismo no ha dejado de ser un tema recurrente, por su complejidad controvertida se sigue estudiando sus contenidos, para entender de qué se trata en realidad y los peligros que encierra como movimiento político ideológico de extrema derecha, por ser autoritario frente a la democracia liberal y a los derechos humanos, vapuleados como son hoy desde regímenes camaleónicos y erráticos, o diríamos pragmáticos, que al instalarse en el poder por cualquier vía, pasan a controlar todo a su paso, para permanecer desde el gobierno, de forma ilícita si fuere el caso, desde las órdenes de un máximo líder, por lo general un autócrata o dictador, investido por el apoyo de las fuerzas armadas, quienes le brindan protección y lo sostienen en el cargo, pues también reciben sus coimas, por someter a la sociedad, desde un Estado de sitio, que niega cualquier posibilidad de alternancia en el gobierno y por ende en el poder que otorga la constitución, cuando no es violada sistemáticamente, como se suele hacer en los tiempos que corren en el mundo. A quienes osen demandar el respeto y el cumplimiento cabal de la Constitución y las leyes, son acusados de cualquier falta o delito, y sometidos por las autoridades administrativas del Estado fascista, que tilda al soberano, como el enemigo a quien se debe tener a raya, pues éste no sabe lo que le conviene, que es lo que el sátrapa de turno anuncia desde su hegemónica presencia en mítines y a través de los canales del Estado, y los poderes públicos obedientes a sus ejecutorias. Desde grupos entorno a los sectores del alto gobiernos, que se reparten los cargos por conchupancia y afinidad ideológica, les permiten enviar mensajes engañosos a la población que ignora lo que se cuece a fuego lento, cuchillo para su garganta, y a los opositores y disidentes, se les tilda de enemigos, desestabilizadores, terroristas, traidores y vende patria, asociados con gobiernos extranjeros para desconocer al gobierno interino que se mantienen con trampas y leguleyerismos, desde los restantes poderes al servicio de una parcialidad política y algunos seguidores que apenas son una representación significativa para realizar fraudes en las elecciones, donde el uso de los recursos de la nación se disponen por quienes mantienen secuestradas las instituciones públicas, de las que se sirve y se dan el vuelto.

Pero por mucho que se tongoneen, siempre se les verá el bojote, porque son un acumulado de mentiras, de engaños, de manipulación, de alienación y enajenan a las masas, sometiéndolas por hambre y necesidades imperativas para la subsistencia, como la salud, el bienestar y el decoro de las familias, sobre todo aquellas de los estratos IV y V de la población, que son las mayorías, y que por necesidad buscando cualquier posibilidad, se venden al mejor postor, ya que sus condiciones de vida son precarias, mientras se ve y se nota, cómo viven los enquistados del régimen, los burgueses revolucionarios, asociados con los empresarios y capitalistas, que desde las corporaciones hacen grandes negocios para provecho de la casta boliburguesa. Este es un régimen oprobioso, cuya única justificación válida argumental es la apetencia de los imperialistas por las reservas del país, de las cuales se reciben las divisas necesarias para mantener a los gobernantes en sus altos cargos, mientras el pueblo soberano lleva una década de sacrificios y trabajo, para que los parlamentarios vivan buchones. Son ellos y no los muchos que son pobres los que están usufructuando lo que es de todos y todas los y las connacionales, que en esta hora menguada para la nación venezolana, espera que los cambios que se venían dando con el chavismo, vuelvan a ser el referente de la patria bolivariana, y no sea el carapacho, lo que nos dejen quienes han entregado el lomito a las transnacionales.

Fascismo, es la exaltación del nacionalismo, la imposición del autoritarismo, la violencia por parte del régimen gobernante, que son sus medios predilectos para alcanzar los objetivos que se proponen, sin el pueblo. Siendo una ideología política, fue un movimiento que surgió en Italia en la década de los 20 del siglo pasado, en un contexto de crisis económica, social y política a finales de la I Gran Guerra intraeuropea. Una situación generalizada de descontento por las duras condiciones que impusieron desde el Tratado de Versalles, lo que aumentó aún más la crisis, ante el temor del comunismo ruso de Stalin. El exsocialista Benito Mussolini propuso el fascismo como la tercera postura frente al capitalismo liberal y al comunismo socialista, había fundado el Partido Nacional Fascista en 1919, luego se dedicó a organizar a las masas y marchó sobre Roma en 1922, donde estableció su dictadura. Su liderazgo se caracterizó por el autoritarismo, el nacionalismo extremo, el militarismo, y suprimiendo toda oposición política que le estorbara para sus propósitos. Promoviendo el centralismo bajo su único liderazgo fuerte y carismático, rechazando cualquier intento de democracia, socialismo o comunismo, y enfatizando la importancia de la nación y la raza, con el uso de la propaganda, que incitan a la violencia y al odio, que son diques de contención y un blindaje para conservar el poder del Estado fascista.

Si bien el fascismo fue más conocido en Italia, donde se manifestó, influyó tremendamente en los nuevos movimientos y regímenes de Europa, sobre todo en el nazismo de Adolf Hitler, y el Franquismo del español Francisco Franco. El impacto fue devastador y profundo para todo el mundo, si consideramos las repercusiones de la II Guerra Mundial, y que luego de establecido el Nuevo Orden Mundial tras la I Gran Guerra, todavía quedaba por dilucidar, cómo se terminarían de repartir el resto de los territorios que quedaban desgajados en los cinco continentes, donde las sociedades estaban afectadas de alguna manera por los regímenes fascistas que dieron cacería y persiguieron a las minorías, censurando la prensa, eliminando a los partidos políticos de oposición; militarizando a la sociedad. Incluso tuvo contribución de primer orden en la guerra y e Holocausto. A pesar de que estos regímenes fascistas fueron derrotados principalmente con la participación de los comunistas, que puso fin a la II Guerra Mundial, tal ideología ha dejado un legado que sigue perdurando, pues tiene cómo maniobrar y colarse en la política, desde el manejo de la economía y sus incidencias, sobre todo en los países en vías de desarrollo.

Fascismo y capitalismo se dan la mano y escalan al siguiente nivel desde las espigas tradicionales que se cuelan a través de las Falanges Española Tradicionalista de las Jons Venturas de los 30 y 40 en Venezuela y el resto de Hispanoamérica, donde el capitalismo ha hecho su nido, y como el camaleón va cambiando según el contexto, aplicando regímenes de fuerza que manejan a su antojo a través de inmensas remesas que permiten que se constituye el fajo, pero de billetes verdes, para mantener en el poder a los regímenes, contra todo intento de consolidar el socialismo, donde cabe la posibilidad de que las mayorías alcancen los mismos beneficios, las condiciones y oportunidades. Es el proyecto chavista, no el de NiMaMo y sus fasce, con su burguesía parasitaria revolucionaria, con un proyecto distinto al que se plasmó en la Constitución original de la República Bolivariana de Venezuela, y del Plan de la Patria, sin capitalismo de Estado para financiar desde las transnacionales a los accionistas de las empresas mixtas, cuyos capitales han sido dilapidados por los del grupo de los nimamistas en el poder luego de la desaparición forzada del líder de la revolución del 4F, que también fue traicionado.

El fascismo ha adoptado mil caras y se presenta en la actualidad con total parafernalia a través del poder de las grandes corporaciones como Vanguard y Blackrok, principales socios y apoderados de las otras cinco corporaciones que controlan todo lo que se puede entre sus accionistas, en lo social, industrial, económico, militar, científico, tecnológico, y para de contar, y que además desde los gobiernos, donde tienen a sus máximos representantes, ejercen medidas coercitivas de forma unilateral, para hacerse con los recursos de las naciones y minar su soberanía. Todo fluye y confluye hacia formas elaboradas de control social, donde se ataca principalmente el conocimiento de las causas que propician tales ardides, son acciones pensadas por tanques de pensamiento al servicio de los magnates, que desde hace un siglo vienen escalando de manera voraz contra todos los pueblos, atropellando principios y valores como nunca antes, y pareciera que es una reedición de las mismas condiciones que ya se vivieron siglos atrás con la esclavitud y los sirvientes aborígenes y negros en los territorios y pueblos que llegaron a ser repartidos hace un siglo por los fascistas; de manera que se descalifica y se oprime a la vez.

Desde los bárbaros a la civilización, se han impuesto siempre sobre los que han convivido directamente con la naturaleza, de la cual se obtienen todos los recursos que se requieren para la vida y la propia existencia en el planeta, donde estamos condenados a una eventual extinción de la propia especie humana, si no logramos revertir el orden de prioridades de las cosas que realmente son importantes, y no lo que seguimos haciendo, actuando como bárbaros, salvajes, olvidando que salimos de ese estado hace millones de años, cuando alcanzamos el ascenso del hombre, pero hoy volvemos a ser mercancía con un atraso en general en la mayoría de las poblaciones, que no se puede justificar de ninguna manera, porque ya no hay tiempo, ya lo anunciaron desde hace mucho tiempo, el tope es en 2050, y no habrá escapatoria sino para un puñado de gente que ya tienen sus sitios seguros para resistir a la hecatombe que vendrá. Y ya no se trata de supremacistas, puesto que ya no habrá posibilidad de actuar como tal, ya que no habrá sobre quién ejercer tal supremacía. Lo que ayer significó algo por las distintas y numerosas distinción asumidas, la clase, raza, sexo, nacionalidad, los linajes, o creencias religiosas y de cualquier tipo, pasarán a segundo plano, cuando las personas ya no estén frente a los Mussolini o Hitler, sino de algo peor.

La propia ignorancia no nos deja ver lo que tenemos enfrente, hasta donde se puede apreciar se ha defraudado a toda una nación, hay millones de connacionales que asumieron salir del propio país, dadas las condiciones de un régimen que no ha escatimado esfuerzos en querer imponerse llueva, truene o relampaguee. Claro, mientras no sean ellos los que expongan el pellejo, porque comen cuatro veces al día, tienen todo a pedir de boca, no les falta nada, agua, comida, medicinas, vivienda, la salud es relativa, se está enfermo o sano, pese a los millones o no que se tengan. Tienen protección las 24 horas y los 365 días del año, pero eso sí, están confinados a sus residencias y cuidado si se mueven mucho en el propio territorio sin las decenas o centenares de escoltas y seguridad para cada paso que deben dar. Ese es el precio que se paga baja ralea, que son capaces de venderle el alma al Diablo, o vender a sus seres queridos, con tal de seguir enquistados en el poder, y tener control sobre lo material. Pero hoy ya no hay nada oculto bajo el sol, y todos los velos, uno a uno, se están cayendo, dejando al desnudo todas las fechorías de los saltimbanquis, que tienen sus días contados de aquí al 10 de enero de 2025 hasta las 12 de la noche.

Ya no hay contraloría que valga, ni auditoría que se respete, pues los que delinquen están en el propio alto gobierno, lo que ha ocurrido en el país, podemos compararlo por su magnitud, con lo ocurrido en todos los gobiernos que nos han precedido desde 1811 hasta hoy. Son los militares los que sueñan con ser Il Duce, lo fue Páez como caudillo, y lo han sido todos los que han llegado al poder por medio de Golpes de Estado, o por maniobras apoyados por el imperialismo, o las grandes naciones poderosas del orbe, como lo son China y Rusia actualmente. Porque ellos saben que es mejor dejar en el cargo a u civil, y rodearlo de militares, policías, paramilitares y parapoliciales, además de las fuerzas de relleno que extraen de las masas, a quienes les meten en la cabeza ideologías, con el mendrugo que le dan y los sueldos y salarios de miseria que no permite la vida digna y que se merecen todos los venezolanos, todas las venezolanas, y también quienes han dejado sus años en Venezuela, donde gracias a Chávez se rescató la confianza y la autoestima, que hoy de nuevo está flaqueando, cuando hacemos el balance a casi u semestre desde el 28J, y todavía no hay a ciencia cierta, los datos, las datas, los números, las pruebas y garantías de quien ganó y quien perdió en las elecciones presidenciales chucutas y maniobreras del régimen, que hizo lo imposible para que no le arrebataran lo que por corrupto y por entreguistas perdió sin disparar un solo tiro. Esta es la triste realidad de un proceso que se inició hace cinco lustros y desde 2013, se fue alejando paulatinamente por pragmático, del Socialismo del Siglo XXI.

Qué no viene encima ahora con el triunfo del fascista Trump de nuevo en la Casa Blanca y con el equipo de blancos en el poder, por cierto, después de lo que se vivió en los últimos años en los EE.UU, con los escándalos del secuestro y desaparición de infantes por parte de pederastas y consumidores de sangre humana; el asalto al Congreso por los seguidores del actual designado presidente de esa nación que nos quiere conducir al desarrollo de la III Guerra Mundial, iniciada según el Papa Francisco en 2016, con motivo de su visita a Centro América. La tensión pica y se extiende, NiMaMo se nota preocupado y ojeroso, el desgaste no es para menos, mientras que vemos los rostros rozagantes de algunos de sus ministros y ministras, en la retaguardia, con sus tácticas y estrategias, parte de la doctrina y el apresto que teórica y prácticamente tienen todo a su favor, pues la cabeza que pende bajo la guillotina es una sola, en quien reposan los cinco poderes públicos por delegación constitucional, pero que de nada le servirán a la hora de que tenga que rendirle cuentas al soberano, a su propia conciencia, y a lo que estime más sagrado e importante en este mundo y en el que vendrá. Para existir lo único que se requiere es que estemos presentes y hayamos acumulado la suficiente experiencia para seguir adelante pese a lo que pase, antes de que nos toque dar el paso decisivo hacia la eternidad, con lo que nos llevaremos, es decir, lastres o un espíritu pobre.

Nota leída aproximadamente 509 veces.

Las noticias más leídas: