1) La vulnerabilidad del Nosotros y el Yo desde lo virtual.
Ante todo tenemos que reconocer los logros y avances que la tecnología virtual ha permitido, posibilita y ayuda en la producción de conocimiento, ciencia, tecnología y mejoras de la calidad de vida, la comunicación hasta ahora democrática de las redes.
Lo positivo de la vida y la negatividad de lo virtual. Yo soy un compendio del nosotros. Esto había sido así desde el comienzo de la humanidad, hasta finales del siglo XX. En el siglo XXI, pretenden transformar este proceso socio-histórico, sustituyéndolo por: "Yo soy un compendio del Yo-anónimo-Virtual". Se pretende suprimir al Nosotros, comunidad, vida con los otros, relaciones e interacciones, siendo representados por una máquina virtual y unos contenidos, ideologizada por los intereses de una élite, el " Yo anónimo-élite y El super-yo virtual quiere sustituir e imponerse al nosotros-yo humano.
2) Nueva generación de esclavos del Siglo XXI.
¿Cómo comienza y continúa la historia de la humanidad? La historia comenzó con la absoluta libertad. El Homo Sapiens fue totalmente libre sobre la tierra y lo árboles. Luego, miles de años después, se inició la esclavitud desarrollada en diferentes formas, producto de las guerras entre tribus, grupos y civilizaciones ancestrales. Comenzaron también las luchas por erradicar la esclavitud, el sometimiento de los ciudadanos.
La lucha por la libertad ha sido histórica e inacabada. En el pasado la esclavitud fue corporal, con cadenas y vigilantes, para trabajar para el esclavista. En el siglo XXI la esclavitud es psíquica e ideológica. Es el sujeto sujetado a los mensajes, los juegos, la pornografía virtual, a las pantallas. Estamos entrando en la era del Post-Humanismo. Corresponde a la humanidad impedir la "nueva era" de la desaparición del ser, convertido en un bits, con implantes cerebrales tecnológicos, es decir controlado en su totalidad.
3) El cogniesclavo.
Denominamos así al esclavo cognitivo virtual. Consume contenidos, pero no sabe analizar, ni tiene pensamiento crítico. Acumula información virtual, inclusive información falsa, y no sabe procesarla. Aprende palabras, ideas, ya no en la escuela o la universidad, sino en lo virtual y no sabe para que sirve esa información. Actúa como un autómata que come palabras, imágenes, bits, sin ni siquiera poder vomitarlo. Lo grave es que está surgiendo una generación de cogniesclavos. (Abrir Link: https://www.youtube.com/watch?v=SbgngNUhjTY)
En la matrix, el individuo y el Nosotros, es sustituido por un dato algorítmico consumido por los bits y por el mismo algoritmo, es decir se auto-consume, desaparece en la red virtual.
Lo grave es que la subjetividad se pierde, se fragmenta y debilita en la irrealidad virtual. Niños y adolescentes con grandes problemas cognitivos. Muchas horas en la pantalla, produce daño físico y psicológico, de comportamientos, de actitudes, daños para la vida.
Ya en Japón hay el Síndrome de Hikikomori hace referencia al aislamiento social voluntario de adolescentes y jóvenes que les lleva a evitar cualquier contacto físico con el exterior. Es decir, son personas que deciden dejar de salir de casa o incluso de su habitación. Es un fenómeno japonés que se ha expandido por otros países. Son cogniesclavos de la soledad inútil, porque no están meditando, ni elevando su conciencia en el plano espiritual, sino vegetando en un cuarto frente a la pantalla. ( Se estiman más de 600.000 casos de Hikikomori).
Pretender llenar el vacío existencial con contenidos virtuales, he allí un campo de investigación para los Psicólogos, Sociales, Psicólogos, Psicoanalistas, Sociólogos, Antropólogos, Educadores.
La realidad actual es frustrante para los sujetos que pasan 8, 10, 14 horas diarias en las pantallas, pues, el vacío existencial se pretende llenar con contenidos virtuales, comienza a producir trastornos, traumas, síndromes, comportamientos psicosociales donde se manifiesta la fragmentación, la escisión o hiancia de la subjetividad. . La existencia, el ser, requieren de las interacciones sociales, la comunicación con otros y otras, las caricias reales, el afecto, las vivencias de la vida cotidiana, inclusive sentir la variedad de las emociones y sentimientos reales en contacto con la alteridad, para sentirse bien. La subjetividad se desarrolla, se fortalece en comunidad, no aislado tragando contenidos virtuales.
Ratificamos que la tecnología virtual es importante para el desarrollo del conocimiento, para la mejor calidad de vida, siempre que se sepa usar y se aplique para lo bueno y lo bello. Hay un extenso y gran grupo de jóvenes que están aprovechando y utilizando las ventajas de la virtualidad para fortalecer sus conocimientos, para la creatividad y alcanzar niveles superiores de vida. La educación en contenidos virtuales es necesaria y útil.