Lo que más llamaba la atención es que no se observaban filtraciones de ningún tipo, ni por el techo, ni agua corriendo por las paredes, nada visual solo ese fuerte sonido, grabamos el fenómeno para mostrarlo en el caso que debiese investigarse.
Una usuaria del Metro nos mostró de donde salía el sonido, del piso por donde pasa el Metro, donde hay una canaleta para que circule el agua.
Nos alegramos que no fuésemos portadores de malas y graves noticias, resultó una falsa alarma y quisimos compartir con aporreadores y aporreadoras esta experiencia.