Antes que nada permitanme aclarar algo, sobre todo para aquellos que todavía siguen creyendo el cuento que antes de Chávez, en Venezuela no existía corrupción y el pais era un paraiso de honestidad y bienaventuranza donde todos éramos felices pero no lo sabíamos.
En Nuestro país al igual que en el resto del mundo siempre ha habido corrupción y ladronísmo, bueno al menos, que yo sepa, desde la invasión europea.
La corrupción y otros antivalores puede que sean intrínsecos a la naturaleza humana, (aunque personalmente no lo creo así) pero de lo que si no me cabe la menor duda es que desde el advenimiento de la era moderna, y en especial de los estados burgueses liberales capitalistas, estos antivalores han sido legalizados y normalizados, incluso premiados.
Nos regímos por leyes Eurocéntricas creadas por pensadores y académicos pagados y mantenidos por las clases dominantes. Leyes que castigan a los oprimidos y premian a los opresores. Que someten y asesinan al pueblo campesino y a los originarios mientras siguen beneficiando a los grandes terratenientes, que cada vez más, son monstruosas corporaciones transnacionales que solo producen monocultivos de exportación. Leyes diseñadas especialmente para que aquellos con poder y dinero puedan darles la vuelta, de allí el famoso dicho :"cuando se crea la ley se inventa la trampa"
Nuestros abogados estudian leyes cuyos fundamentos proceden de ideas pensadas por los dueños del poder, diseñadas específicamente para proteger a la "propiedad privada", y no me canso de decirlo, es "privada" porque se priva a los demas de su uso.
Si lo pensamos bien las fronteras y otras lineas divisorias creadas por el hombre moderno no existen para la madre naturaleza, ella tiene sus propias fronteras ecologicas que el humano moderno nunca ha reconocido y mucho menos respetado.
Nadie es, ni puede ser en realidad, dueño de la madre naturaleza, de los mares y rios, del espacio extraterrestre, del aire que respiramos. Algo que los pueblos originarios tenían muy claro, pero que el capitalismo en su imparable y destructora concepción del progreso, siempre ha negado.
Desde el comienzo de la modernidad y del liberalismo burgués y sobretodo desde el advenimiento del neoliberalismo y su obsesivo trauma privatizador las élites del imperialismo financiero se han encargado de apropiarse de los bienes de todos para su beneficio personal.
La mayor corrupción y origen de todas nuestras corrupciones es entonces, sin duda alguna, esa política racista y supremasista de apropiación por despojo, instalada a sangre y fuego, primero por los invasores europeos y luego por sus susesores del imperio corporativo del norte.
Observemos los ultimos escandalos de corrupción que involucran a altas figuras politicas en la UE. Muchos de esos casos no llegan a conocerse pues ni siquiera son tomados en cuenta por los medios de comunicación corporativos, o son solo tratados ligeramente por un corto tiempo para luego desaparecer entre las miles de noticias falsas, desisnformación y mentiras a las que ya nos tienen acostumbrados.
Los casos de corrupción que se están destapando en los Estados Unidos no se quedan atrás, la corrupción flagrante de la insestuosa relación entre senadores y congresistas con las grandes corporaciones da algo más que asco.
Lo que ocurre con las vacunas y otros medicamentos cuyos descubrimiento y desarrollo fueron financiados con el dinero de los contribuyentes gringos y que ahora les son vendido a esos mismos contribuyentes a precios exorbitantes, es ya algo escandaloso pero que los medios corporativos financiados por estas mismas transnacionales ni siquiera abordan. La corrupción en el gigante del norte lo abarca todo y ha sido casi totalmente legalizada, los Estados Unidos están gobernados por verdaderos mafiosos.
En el Sur global el tratar siempre de imitar y muchas veces simplemente copiar lo peor del norte imperialista y copiarlo mal es algo de muy vieja data.
Sobretodo en nuestra Venezuela con esa sempiterna torticulis cultural que nos obliga a mirar siempre hacia el norte y que venimos arrastrando desde la colonia, cuando los europeos de orilla vivían esperando la llegada de las naves europeas con sus trapos de moda, finos licores, libros y demás "tesoros" que los hacian sentir más cosmopolitas.
Nunca se dieron cuenta que esos "tesoros" eran producto del saqueo de nuestramerica y la explotación de originarios y esclavos, o tal vez si pero no les importó.
Despues eran los barcos y aviones gringos los que empezaron a traer sus espejitos.
Hoy las circunstancias han cambiado un poco, y la mayoría de los espejitos con que nos siguen engañando para que sigamos siendo consumidores compulsivos, vienen en su mayor parte de el gran gigante de China. Pero ese es otro tema.
Como ya dije, siempre copiamos lo peor y lo copiamos mal. Con la corrupción no es diferente.
Mientras que la corrupción, el amiguismo y las milmillonarias coimas de todo tipo existen tambien en los paises de la Union Europea hay una gran diferencia entre sus corrupciones y las nuestras. Las nuestras son copias baratas.
Me explico. Empresarios corruptos europeos (o no) entregan dinero a fucionarios corruptos (europeos o no )para que se les otorgue un contrato milmillonario para construir una obra équis, la obra se realiza normalmente a tiempo y con muy buenos materiales y con un acabado de primera, pero eso sí, casi siempre con un inmenso sobreprecio. El dinero lo ponen los contribuyentes y se lo embolsan los corruptos, pero al menos casi siempre queda una obra bien hecha... bueno casi siempre, hoy cada vez hay más exepciones.
En venezuela en cambio los contratos se entregan de la misma manera, por medio de sobornos y coimas o simple amiguismo y siempre con sobreprecios, pero pocas veces la obra se entrega a tiempo y lo más normal es que se usen materiales de baja calidad. El dinero lo ponen todos los venezolanos y se lo quedan los corruptos.
Mientras los corruptos europeos se esfuerzan (la mayoria de las veces) para que las cosas queden bien así sus ganancias sean un poco menores. En nuestro pais los corruptos solo piensan en obtener la mayor ganancia y utilizan materiales de baja calidad, entregando, la mayoría de las veces, obras mediocres solo para que se vean bien en la foto.
Dos estilos , una misma corrupción.