Servirse de un cargo público para enriquecimiento personal resulta no ya inmoral, sino criminal y abominable.
Cicerón
El escándalo de corrupción entre PDVSA y la Corporación Venezolana de Minería (CVM) debe ser conocido por todos los órganos del poder público del país. Esta inmoralidad puede ser más grande que los hechos de corrupción entre PDVSA y la CVG. Aquí se han manejados millones de dólares aún con consecuencias más graves por la pérdida de vidas humanas ante un Estado indolente, aliado y cómplice de las bandas armadas. es una situación difícil y temerosa. Pero hay que destapar está podredumbre, con las consecuencias que implica. Si es un peligro pero en este entramado financieros y pranatos, donde hay empresas involucradas, funcionarios públicos, empresas, así como también políticos y militares de alto rango, muchos han ocupado por años cargos en estas empresas e instituciones. Son miles de millones desfalcando y malversando a la Nación, porque es triste, ahora no hay servidores públicos, lo que hay son mercenarios y corruptos de cuello blanco y boinas rojas. Los directivos de la Corporación Venezolana de Minería (CVM), su presidente es el GM Carlos Osorio Zambrano, Andrés Morffe, Vicepresidente, mayor Marcos Ruiz viceministro de Mina -CVM y Díoven Mendoza, consultor jurídico. Sabemos que la corrupción se mimetiza y se hace casi invisible, pero hay quienes con su megalomanía y ego lo ostentan y muestran con descaro lo mal habido y robado.
En el primer artículo de esta saga, señalé el número del documentos y las firmas al pie del mismo del presidente de la Corporación Venezolana de Minería, el GM Carlos Osorio y la Sociedad Mercantil AGROMIN CUYUNI, C.A. representada por el ciudadano Fabio Enrique González Isaza, alias "El Negro". Esta acta fue avalada por el Almte Gilberto Pinto Blanco, ministro del poder popular de Desarrollo Minero Ecológico. Conocida está nefasta alianza como "El Acuerdo de Payapal", donde se afectaron los intereses del Estado, conociendo los protagonistas. Esta vinculación los hace socios con una serie de negocios ilícitos que realizan y son actividades financieras y económicas ilícitas, son negocios ilegales, como señalan los mineros de la zona Sur. Estos negocios son: La comercialización del combustible, comercialización de explosivos. Extorsión a molineros y mineros, control de las áreas entre el Pranato y GPAMO y la extracción de oro a Colombia. Fiscal general de la República Tarek William Saab y presidente Nicolás Maduro inicie está investigación. Todo en el Arco Minero del Orinoco debe ser investigado por un operativo anticorrupción realizado por la PNCC.
La investigación se debe centrar en el vínculo que existe entre PDVSA y la CVM para el despacho de combustible (gasolina y Gasoil) en la Zona Sur del estado Bolívar. Lo primero es revisar las cuentas de PDVSA. Auditar los libros o la información financiera en el sistema. En esas cuentas se debe reflejar el número de gandolas despachadas, despacho diario o frecuencia y precios del combustible. Igualmente en las cuentas de la CVM para contactar ambas empresas. Porque el despacho de combustible se ha pervertido. La relación de PDVSA y CVM. Lo del combustible entre estas empresas, ese es un trato interno que tienen ambas instituciones. PDVSA le vende el combustible a CVM y esta lo paga igual que lo pagan los dueños de las estaciones de servicios, aproximadamente una gandola vendida a las estaciones de servicios pagan unos 16.500 $US. El manejo del combustible en la zona minera es exclusiva de CVM. Ante los altos precios que lo venden en el Arco Minero del Orinoco, el combustible se hace escaso en la zona. Son muy pocas las bombas surtidas por la Corporación en la zona, ese es el motivo que se pasan meses sin combustible en varios municipios mineros al Sur del estado Bolívar. Cuando hay protestas de los choferes ante la escasez de gasolina, en ese caso CVM libera cuando le da la gana algún cupo para las bombas. Los dueños de vehículos pasan la de Caín en esta zona porque la CVM prefiere vender a su precio en las minas de oro y al pranato. Se puede contactar, si se va a la sede que la CVM ha destinado para vender combustible a las Alianzas y a los que no son alianzas, cualquiera que vaya a comprar, allá lo importante es que lleve oro para pagar. El combustible que se vende en el Arco Minero del Orinoco es responsabilidad de CVM, PDVSA dice, nosotros lo distribuimos y lo vendemos. Se debe investigar esta relación PDVSA y CVM en términos de distribución y venta de combustibles. Aquí la venta es discriminada. Esto es un acto de corrupción, la venta de combustibles a un alto precio y el Estado venezolano es estafado. Los precios de los combustibles en el Arco Minero del Orinoco impuesto por CVM y Fabio González Isaza "El Negro" son los siguientes: Tambor de gasolina 9.5 gramos de oro a los pequeños Mineros y alianzas de pequeña minería y 6 gramos de oro a las plantas
El tambor de gasoil lo vende a 4 gramos de de oro a las plantas y,a 6.5 gramos de oro a los pequeños mineros y alianza de pequeña minería.
CVM vende la gandola de combustible al pranato en un kilo y medio de oro, quienes los pagan con el oro provenientes de las vacunas que cobran a los mineros y además los obligan a comprarles el combustible a un alto precio.
Ver artículo.https://www.aporrea.org/contraloria/a320962.html
En investigaciones realizadas PDVSA le entrega todo el combustible exigido para el Arco Minero del Orinoco y de ahí en adelante con esa autonomía y monopolio absoluto que tiene CVM, el combustible lo venden por encima inclusive del precio internacional y se desata la relación nefasta criminal de la Corporación con el Pran Fabio González Isaza "El Negro", igual es la relación de PDVSA con CVM está dentro de la trama de corrupción y complicidad, a partir de esa asociación se desprende también un conjunto de acciones de monopolio contra la pequeña minería, desfavoreciendo y generando más desastres, más miseria, más pobreza y más fortalecimiento al pranato, porque en PDVSA, los gerentes de Guayana recibe órdenes de PDVSA central para que la estructura CVM tengan prioridades, asimismo para que pueda decidir sobre los asuntos mineros y mantener complacido al pranato para atemorizar y amenazar a los pequeños Mineros. Aquí con todos los riesgos que significa el entramado de la corrupción por la fiebre del oro y lo implicado que están las instituciones del Estado en este flagelo, seguiremos la denuncia hasta lograr justicia y que si realmente es verdadera la lucha por la corrupción es de inmediato que se debe iniciar un operativo anticorrupción en el Arco Minero del Orinoco. Esta historia continuará con la tercera entrega de esta saga.