"Migrantes "dorados" dícese de aquellas personas que huyen de su país después de cometer muchas fechorías como asesinatos, corrupción, terrorismo y delitos conexos como aliarse con el narcotráfico.
Se caracterizan por presentarse como "dirigentes políticos", perseguidos por sus "ideas" y acusar a la dirigencia política del país como dictadores, violadores de los derechos humanos cuando ellos mismos poseen un amplio prontuario delictivo.
Escaparon del país con ayuda de gobiernos extranjeros, como el de Estados Unidos, España, Colombia (en tiempos de la narcopolítica), Reino Unido, Portugal que son expertos en asilar a delincuentes. Son las "joyas" del robo, del pillaje.
También son descarados. Viven en los llamados palacetes, quintas o en lujosas urbanizaciones, son asiduos visitantes de tabernas desde donde hacen ruedas de prensa y amenazan con incendiar el país, pero ni siquiera se acercan a nuestra Patria. Se autocalifican de "exilados políticos", perseguidos por el "régimen del dictador Maduro", violador de derechos humanos y carente de democracia.
El expediente por fechorías abarca desde el intento de magnicidio contra el presidente Nicolás Maduro y el Alto Mando Político y Militar, quema de mujeres y hombres, lanzamiento de granadas y bombas incendias contra guarderías infantiles y hospital de niñas y niños, actos de terrorismo contra instituciones del Estado y aprovechamiento (es decir, robo) de dinero de la nación como lo sustraído de las empresas Monómeros y Citgo. Es un cuadro delictivo que tienen los llamados "exiliados dorados" por su carga de dinero robado a la nación.
Saben que no ganarán las elecciones del 28 de julio por que no tienen pueblo ni poder de convocatoria recuren a las amenazas de desconocer los resultados de los comicios que le son adversos. Ellos tienen la certeza de la derrota. Pero recurren a los llamados a la violencia. Voceros descalificados del fascismo a través de una rueda de prensa amenazaron con desconocer los resultados del CNE, pero afirmaron que reconocerán "sus resultados", es decir, los que divulgue Súmate", pues ya ellos tienen preparado el fraude. Son enemigos de la democracia, son terroristas, son fascistas.
Y tienen aliados nacionales, como la vencida y obsoleta junta directiva del Colegio Nacional de Periodistas que a través de los voceros de la familia Granier y Alberto Federico Ravell, de RCTV y Globovisión, Tinedo Guía y DelValle Canelón, acompañado de Marco Ruiz, de un sindicato inexistente, "exigen respeto a periodistas y trabajadores de la prensa" para que se respeten sus derechos a informar y que no sean agredidos. Pero guardaron silencio cuando la turba fascista de María Corina Machado y Edmundo González arremetieron contra los comunicadores en la UCV.
Así andan por el mundo y en lo interno los denominados "migrantes dorados", cubiertos de mucho dinero y oro sustraídos al país.