Por mi lares de la mesa de Guanipa y en la inmensa soledad de mi pequeño fundo, los días parecen que tienen como 34 horas o más. Son largos y el tiempo es más que relativo. Con días muy largo, me meto sobredosis revisando y leyendo en muchos portales web. Me leo a casi todos los articulistas de Aporrea. Tengo mis favoritos que nos los menciono ahora para no dejar a nadie por fuera.
En estos días me leí un artículo del amigo José Sant Roz, que es uno de mis favoritos y si él me lo permite, le hago llegar una observación o más bien un recadito que espero alcance a otros amigos articulistas de Aporrea. Mi interés ahora, es precisar, que nuestros lectores y lectoras son el combustible que nos empuja a escribir y a ello debemos respeto. No olvidar, que una fuente es un aspecto esencial en la preparación de un articulo de opinión. www.aporrea.org/oppsicion/a282429.html
Creo que la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) es una mafia de "religiosos" muy bien trajeados. Lo único "bueno" que muestra esta mafia son los trajes y las gorritas fucsia (creo que es de ese color) que siempre llevan muy cerca de su cogote. Todo lo demás y ello incluye su idea y sentido de Dios, es marcadamente perverso. La CEV es una mafia oscura y muy grosera con cualquiera versión de Jesús Cristo.
Si me apuran, soy de la idea, que esta CEV ha violentado la idea cristiana del niño Jesús, que pienso es la cosa más tierna que tiene la iglesia católica. Un niño naciendo en un pesebre es una cosa muy distinta a un obispo que con buenos perfumes, siempre son muy hediondos. Creo que desde la derecha o desde la izquierda, un obispo o alto jerarca de esta iglesia debería ser un ser extremadamente equilibrados y juiciosos. No es juego ni una casualidad, que siempre o alguna mayoría de la jerarquía eclesiástica ha estado involucrada con esa oscuridad que huele frescamente a pedofilia y a inquisición.
Dicho esto, paso al punto. Cuando me propuse leer este nuevo artículo del amigo José Sant Roz, me fui con mucho interés en su lectura. Mi interés estaba enfocado en querer leer una declaración u opinión en la cual uno de los miembros de la CEV se solidarizaba con las retratos donde Guaidó aparecía con miembros de los rastrojos. Tenía como hambre de ver a uno de la CEV, que siempre están muy "comprometidos" con la idea de Dios y la no violencia, celebrar y justificar los retratos de Guaidó con estos matones.
No fue así. El amigo José Sant Roz en este caso, se me pareció a "Chivita", un viejo amigo que ya nos dejó y que siempre afirmaba algo a través del al "muleta" de otro, pero nunca este viejo y querido amigo "Chivita", podía darnos fe o mostrarnos, lo que le digo un fulano o una fulana. Simplemente, él decía que lo decían.
Yo creo que esta CEV le vende el alma al diablo por cualquier cosa. Creo eso, pero creo en este caso, que lo único "evidente" en esta trabajo del amigo José Sant Roz, es que su sobrina fue a la homilía y que un cura se expresó muy bien del encuentro de Juan Guaidó con los Rastrojos. Dijo este cura, que Baltazar Porras fue en esa misma dirección. Pero no hay ninguna certeza que así fue la cosa y mire que creo, que cualquier obispo en Venezuela vio el encuentro Guaidó-Rastrojos como un encuentro de angelitos.
Un cura digo algo y la sobrina del amigo José lo habló en familia. No hay mas nada. Estoy muy segura, que en los trabajos de asensos del amigo José Sant Roz, como profesor de matemática, no hay una conclusión en la que diga que 2+2 = 4 porque lo dijo Pedro, Chucho, Jacinto y José. Segura estoy, que el amigo José fue capaz de confirmar matemáticamente que 2 +2 es alguna veces igual a 4.
Estoy muy segura que TODA la CEV tiró cohete de alegría, cuando se enteró que en Chacao había quemado a un chavista vivo. Seguro estoy de esto, como segura estoy, que el amigo José Sant Roz, reconocerá que los lectores y las lectoras son una cosa muy seria para los articulistas o cronistas. https://www.aporrea.org/oposición/a282429.html