La taima que pide Elías y que nunca le dio a Sabino Romero/ ¿Dónde tienen a Javier Vivas Santana?
Por: Yuri Valecillo
Martes, 31/03/2020 02:39 AM
Fueron actos de una gran demagogia las que Elías Jaua protagonizo, cargado de los oropeles del poder, de la maquinaria mediática, de la complicidad del dinero, de los recursos de los servicios de inteligencia. Elías pide la taima que nunca dio, intenta hacernos confundir que defiende la patria, cuando todos olemos que los que defiende es su patrimonio, el suyo y el de sus socios, de sus colaboradores. Y entonces asoma el fantasma de la guerra civil. Caray por lo mas sentido el demagogo de ocasión al parecer no ve las bajas y no asume que hay una guerra civil contra ciudadanos desarmados, hay censura y persecusión política, hay decenas de sindicalistas detenidos sin formulas de juicio, asesinados por tortura, ajusticiados por FAES. En fin los venezolanos sufrimos los efectos de una guerra civil donde se criminaliza, persigue, reprime, expropia, injuria, tortura, desaparece a todo aquel que no piense como tu.
Creer que la “taima” de Elías es un llamado sincero es caer en la engañifa de algunos que consideran que el desastre que hoy vivimos en Venezuela es obra del desatino, de la falta de argumentos, del cerco económico y o de la corrupción, la impunidad, la persecusión política, la detención arbitraria, la corrupción desmedida, la coima, la falta de transparencia, la censura y es que Elías es hoy por primera ocasión molestado en su maravillosa forma de vida, el y sus chicos de “chavismo bravío” que al parecer son quienes se han venido dando a la tarea de marcar las casas de opositores con consignas llenas de amenazas contra todo quien no apoye a los cívicos/militares y los cívicos del madurismo están mas cerca de la marcialidad que de la civilidad republicana.
Lo cierto es que creer en la “taima” de Elías o sea en la madurista es creer en la conocida paz de los sepulcros, es sencillamente triste el llamado a la paz en una nación donde los crímenes de Estado se cuentan por millares, los delitos contra la cosa publica solo pueden ser calculados con calculadoras con infinitos ceros a la derecha, donde la persecución a dirigentes populares electos o no cabrían en una guía telefónica de Caracas de los años 80 del sigo XX.
Los días pasan y el desespero del gobierno es día a día mas evidente, pocos se atreven a defender a un gobierno plagado de fallas de origen, de errores de pánico, de mentiras evidentes y que destruirían cualquier polígrafo, de intentos de medo, de desempleo galopante, de salarios de hambre, de miseria infame, de desaparecidos, de torturados, de detenidos en cárceles de pesadilla, de discursos flojos, de cadenas de radio y televisión con anuncios de risa y de llanto. En fin de gente como tu y de palabras ligeras como la tuya la nación no solo esta cansada, esta asqueada, los aborrece y al final sabe esta patria hoy obligada a callar que nunca como ahora tu verdad no es verdad.
Notas a pie de pagina: Mientras desde el gobierno hablan de paz y amor, es alguna mazmorra, en algún oscuro lugar, en algún tétrico espacio, en algún lugar frÍo y sin ase alguno, en un punto de la geografía nacional el amigo, escritor, docente, periodista, redactor y critico a la junta cívico/militar que hoy decide los destinos de mas de 30 millones de personas. Se encuentra con seguridad muy maltratado Javier Vivas Santana. De repente Elías Jaua pides taima para este venezolano al cual el gobierno pretende silenciar para siempre. Yo exijo su libertad aunque desde los periódicos del gobierno callen su prisión y su tormento.