Venezuela al igual que todas estas dictaduras militares de América Latina no escapa a la práctica a finales del siglo pasado de la utilización de los falsos positivos, asesinatos, torturas y violaciones de los derechos humanos; algunos fueron gobernados por décadas, otros por años en países como Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil. Dirigieron los destinos de estos países bajo la sombra de la más horrorosa tiranía. La mayoría de estos militares desfilaron por la Escuela de las Américas, establecida inicialmente en Panamá en 1946, donde a través de manuales se les impartía enseñanza de los más horrendos métodos de asesinatos, tortura, chantaje, espionaje, entre otros. Fueron alumnos destacados de esa escuela por allá en sus años mozos: Augusto Pinochet (Chile); Rafael Videla, Leopoldo Galtieri, y Roberto Viola (Argentina) que inauguraron en este país una de las mas espantosas dictaduras; Alfredo Stroessner (Paraguay); Juan María Bordaberry (Uruguay). No se quedaron atrás en desatar contra las fuerzas progresistas toda una ola persecuciones. En Venezuela, a través de una triada de tres partidos: Acción Democrática, Copey y Unión Republicana Democrática; con sus líderes a la cabeza: Rómulo Betancourt, Rafael Caldera y Jobito Villalba, firmaron el mal llamado Pacto de Punto Fijo; con un rostro camuflajeado de "democracia"; pero en el fondo funcionaba una dictadura; así estuvieron turnándose bajo un poder, por donde desfilaron todos unos gobiernos, unos más asesinos que otros. En los gobiernos de Betancourt y de Leoni se institucionalizo la tortura, la desaparición y el asesinato; metían en un mismo saco al revolucionario alzado en armas, como el que hacia un trabajo social. Se perseguía con saña a simples opositores. Con el simple hecho de disentir eran catalogados como vagos y maleantes. Leoni es recordado como un presidente bonachón, esa era la imagen que resaltan los medios; pero su mandato se dio los asesinatos políticos más espantosos. En los demás gobiernos de Carlos Andrés Pérez, Luis Herrera, Rafael Caldera y Lusinchi; no solo se le dio continuidad a las torturas, asesinatos y desapariciones; sino a las masacres, que no es otra cosa que los asesinatos en masa. Entre una de las métodos de ingrata recordación puesta en práctica por estos gobiernos de la "democracia representativa" en Venezuela fue LAS DESAPARICIONES; que luego fue reeditada por las dictaduras del cono sur.
No estuvieron estos gobiernos exentos de las llamadas masacres, que también se convirtieron como una política de Estado; en oportunidades sin ninguna razón y en otras sin justificación alguna, planificaron y ejecutaron razias y asesinatos en masa contra individualidades divorciados de la política. En este orden el país atónito presencio la masacre de Cantaura (estado Anzoátegui) el 04/10/1982. No existe una cifra exacta del exterminio que sucedió allí; algunos dicen que fueron 60 otros que fueron más, lo cierto es que allí estaban reunidos un grupo de jóvenes, todos ellos, desarmados, no representaban ningún peligro para el Estado, fueron prácticamente aniquilados con bombarderos a través de una infernal lluvia de plomo y luego los que se salvaron, ya rendidos fueron fusilados. Una mayoría tenían un balazo en la cabeza. A ninguno de los asesinos se les abrió una investigación. La masacre de Tazón (Caracas) el 19/10/1984. Unos autobuses que se dirigían del núcleo de Maracay de la UCV a Caracas y en el sitio de Tazón los emboscaron y le cayeron a plomo limpio, sin que se realizara ningún enfrentamiento; saliendo heridos 34 estudiantes. No se castigo a nadie. La masacre de Yumare (estado Yaracuy) 08/05/1984. Fueron nueve las víctimas, no estaban alzados en armas, fueron cercados y detenidos, luego torturados y asesinados; posteriormente sobre sus ropas les colocaron prendas militares, haciéndolos pasar como si hubiese sido un enfrentamiento. Años después fue incriminado por estos asesinatos un lúgubre personaje, casi infaltable en otras masacres llamado Henry López Sisco; por cierto muy cercano a otro asesino, Luis Posada Carriles, que no necesita presentación. Masacre del Amparo (estado Apure) 10/1988. Fueron crímenes preparados con indolencia contra unos humildes pescadores para justificar una decisión gubernamental. Dieciséis (16) pescadores fueron llevados bajo engaño al Caño de las Coloradas a comerse un sancocho, fueron ametrallados desde sitios estratégicos. No contaron que dos ellos se salvarían y echarían el cuento. Jaime Lusinchi presidente para la época, trató por todos los medios de echarle tierra a tan horrendos crímenes, pero la verdad se impuso y salió a la luz pública que todo había sido obra de una artimaña. Esto consistía en que el Comando Especifico José Antonio Páez (CEJAP) que combatía a la guerrilla y además cobraba por prestarles "protección" a los ganaderos, iba a ser retirado de la zona, de ahí que apelan a esos falsos positivos, señalándolos de guerrilleros. En esta masacre participo López Sisco. Masacre del Caracazo (27 y 28 de febrero de 1989) Que fue el estallido social más cruento en la historia nuestra. Esto fue producto de las medidas neoliberales impuesta por el Fondo Monetario internacional y aplicados por el presidente para ese momento Carlos Andrés Pérez. En este caso los asesinatos pasan de los los 3.000.
Fueron 40 años que dejo una estela entre desaparecidos y asesinatos en nombre de la "Democracia" que según los entendidos, la dictadura de Marcos Pérez Jiménez quedo en pañales; se presumen cifras muy conservadoras que pudo haber superado los 10.000 entre asesinatos y desaparecidos. Es de reconocer que una vez que el presidente Chávez asumió la presidencia, coloca como objetivo fundamental la no violación de los derechos humanos, sin embargo se han dado algunos casos muy puntuales, donde sus responsables han sido presentados al Ministerio Publico y se le han aplicado las leyes según los casos.