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Credito: Héctor Rondón |
Recordando como aquel 02 de junio de 1962 Puerto Cabello amaneció de golpe.
Sabías que. En los hechos violentos que se originaron en la intentona golpista en contra del gobierno de Rómulo Betancourt, conocida como el Porteñazo, surgió como de la nada, un Sacerdote auxiliando a los soldados leales y a los insurrectos, caídos en la refriega militar.
Los principales enfrentamientos, desde muy temprano, ese lunes 02 de junio de 1962 se desarrollaban en el sector conocido como "La Alcantarilla". Allí en medio del traqueteo de las armas, apareció aquel hombre temerario, ataviado tan sólo de su sotana, para hacerse imponer como mediador de la paz inexistente en el sitio.
El asunto es que, justo en el momento, cuando el prelado se aprestaba a darle auxilio a un soldado, gravemente herido, apareció el "Flas" oportuno del reportero gráfico, quien dejaría como testimonio, la crueldad de la guerra. Por los medios internacionales voló la fotografía de Héctor Rondón.
A la imagen de Rondón donde el Cura toma de los brazos al soldado moribundo, se le otorgó el premio Pulitzer. Uno de los jefes de la insurrección de Puerto Cabello, el capitán Pedro Medina Silva, después señalaría que, lo del Cura y el policía herido, había sido un montaje, para mal poner a los golpistas derrotados. Este es otro saber republicano.