El moderno Prometeo, o simplemente . Netanyahu "un monstruo" . El Nuevo Frankenstein destructor de vida o Prometeo moderno que arrebata el fuego sagrado de la vida a la divinidad. Es cierto, no un relato de ciencia ficción como tal. "un monstruo asesino de niños , de mujeres y ancianos -un genocida del Pueblo Palestina y El Líbano"
Nicolás Maduro, describe a Netanyahu como "un monstruo" El nuevo Frankenstein que comete crímenes con plena impunidad y más horrendos que los de Hitler.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, es "un monstruo creado por la Unión Europea y el imperio de Estados Unidos (...) que está librando un genocidio contra Palestina y El Líbano" con plena impunidad, afirmó Maduro, según ha recogido este martes la cadena libanesa Al Mayadeen.
El mandatario venezolano dijo también que ni siquiera el líder de la Alemania nazi Adolf "Hitler no se atrevió a hacer lo que está haciendo" Netanyahu. Lo que está sucediendo en la Franja de Gaza y el Líbano "no es una guerra", sino un "genocidio" vivo, denunció.
Maduro criticó a Netanyahu, diciendo que el dirigente sionista "todavía tiene la audacia de dar órdenes a las Naciones Unidas para que retiren las fuerzas de paz, presentes en el sur del Líbano por orden del Consejo de Seguridad [de Naciones Unidas]".
Desde que intensificó las agresiones al Líbano en septiembre pasado, Israel ha llevado a cabo una serie de ataques deliberados contra posiciones y personal de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (FINUL). Las fuerzas de mantenimiento de la paz han denunciado que cinco de sus soldados han resultado heridos en dichos ataques.
Ignorando las condenas mundiales por ataques a cascos azules, Netanyahu instó el domingo a las Naciones Unidas a retirar "inmediatamente" a sus fuerzas de paz del Líbano, donde cumplen la misión internacional de resguardar la Línea Azul, en la frontera del Líbano con los territorios palestinos ocupados por Israel.
Algunos expertos avisan que el régimen sionista busca apoderarse de la posición estratégica de la FINUL en el sur del Líbano al exigir el retiro de los cascos azules del territorio libanés.
El genocidio estadounidense-israelí en Gaza, que comenzó en octubre del año pasado, se ha cobrado hasta ahora la vida de casi 42 300 personas, en su mayoría mujeres y niños. Desde entonces, unos 98 700 habitantes de Gaza han resultado heridos.
Mientras que en El Líbano —donde el movimiento de Resistencia libanés Hezbolá lleva a cabo ataques desde octubre de 2023 contra Israel en apoyo a Gaza— más de 2300 personas han perdido la vida como consecuencia de las agresiones israelíes y más de un millón de personas han sido desplazadas.
El mandatario judío y su gobierno son tan fanáticos como las organizaciones terroristas que dicen combatir. O más porque ni Hamás ni Hezbolá han asesinado a 11000 criaturas inocentes. Lo más terrible del asunto es que esta vez no se nos ocultan los hechos, no hay que esperar a que los historiadores del futuro descubran las atrocidades que se perpetraron a escondidas.
Lo vemos a diario en informativos, leemos las escalofriantes cifras y nos vamos acostumbrando a ellas. Es el objetivo del terror en cascada que está llevando a cabo el cínico carnicero: que cada vez nos vaya pareciendo normal que un pequeño país arrase a todo un pueblo. Y que esa nación tan democrática como es EEUU, tan antirracista, dicen, no solo no mueva un dedo en favor de los masacrados por Israel sino que le mande tropas y armamento para que siga matando mujeres y niños.