La denuncia pública la hizo Amelia Conde, líder indígena uwöttüja, quien aseguró que los defensores ambientales son víctimas de las organizaciones criminales. De acuerdo con ella, el Arco Minero está acabando con los pueblos indígenas.
Ante la persistencia de delitos contra los derechos humanos, Amelia Conde reclamó al Estado venezolano aplicar medidas de protección para líderes indígenas en el Arco Minero del Orinoco y el medio ambiente.
Pese a algunas acciones que el Ejecutivo Nacional asegura que ejecuta en las zonas mineras como la despoblación y la reforestación de las zonas afectadas, Amelia reiteró que la minería sigue siendo una gran amenaza para las comunidades indígenas.
“Vivimos con miedo, la persecución a los líderes que defienden el territorio y el ambiente es cada vez más fuerte. Solo queremos estar en nuestra comunidad y trabajar nuestras tierras con libertad, como lo hacíamos antes”, destacó.
En medio de sus reclamos, Amelia señaló la importancia de empoderar a las mujeres indígenas y fomentar su participación en la toma de decisiones en las comunidades. A juicio de la líder indígena, es clave para asegurar un futuro sostenible y justo para todos los miembros de estas comunidades.
En julio de 2023, el Grupo de Investigaciones sobre la Amazonía (GRIAM) afirmó que actualmente la minería ilegal se ha extendido a los siete municipios del estado Amazonas, a diferencia de 1989, cuando se concentraba únicamente en la cabecera del río Orinoco, desempeñada por garimpeiros provenientes de Brasil.