Este total, explica la organización no gubernamental, arroja un promedio de un niño o adolescente -en el 81 % de las veces del sexo femenino- siendo víctima de abuso sexual cada 13 horas en el país.
«Se trata de una cifra parcial, aproximada, limitada a los casos que han podido ser conocidos por las autoridades», remarcó la ONG, en cuyos registros se indica que nueve víctimas tenían menos de seis años y otras 53 no han llegado a la adolescencia.
La red señaló que en la mayoría de los casos se trata de «situaciones de violencia que ocurren en entornos familiares o con personas cercanas a las familias», en las que «los agresores amenazan a sus víctimas y les hacen temer por las consecuencias de contar lo que ocurre».
Entre las responsabilidades identificadas, la ONG señala que 27 menores fueron víctimas de abusos por parte o con el consentimiento de sus madres y padres, en 10 ocasiones con la vinculación de un docente y en otros 52 casos con la participación de un vecino.
El martes pasado, Venezuela inauguró una fiscalía especializada en delitos de abuso sexual a niños y adolescentes, adscrita a la Dirección General para la Protección de la Familia y la Mujer, en colaboración con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Para la agencia de la ONU, el establecimiento de este despacho «es significativo porque se trata de la primera vez» que una instancia del Ministerio Publico «se dedicará exclusivamente a la protección de la niñez contra este tipo de transgresiones».