¿Desde cuándo no duermen los comerciantes venezolanos? Muchos dicen que su insomnio se remonta a los inicios del primer gobierno de Nicolás Maduro. Pues, existen razones para tal conducta. Desde entonces, han extendido su jornada laboral, y prefieren quedarse en sus negocios en vez de irse a dormir tranquilamente a su hogar, a compartir con su familia.
Una de las primeras razones, obedece a la aparición de dólar today como una estrategia de guerra de los estados unidos para acabar con la economía venezolana. A partir de allí, los comerciantes, aunque digan que no, han hecho su agosto en la medida en que ese dólar paralelo fijaba el valor del mismo, diariamente, en dos tandas, a las nueve de la mañana y a la una de la tarde; y aun sigue esa modalidad.
Esto significaba y significa que el comerciante tenía que remarcar precios con la excusa de la renovación de inventario, los costos, que sé yo, cualquier cosa argumentaban. Eso se hacía o se hace en las noches, de allí la razón de su insomnio. ¿Usted sabe lo que es remarcar los productos uno a uno y todos los días, y a cada rato, porque el dólar aumenta todos los días hasta dos veces?
También hay quienes remarcan precios delante del cliente, es más, lo hacen en sus propias manos. Hubo y todavía hay una especie de adicción dolaristica que ha quedado en nuestros comerciantes, ellos cobran en dólares. Tras un aumento del dólar, aumento de precios; sin embargo, el comerciante remarca todos los días. Así el dólar no suba o baje algo, siempre el producto va hacia arriba. ¡Ni pendejos que fueran!
Otra cuestión que atentó y atenta en contra del pueblo, o del trabajador es la vigilancia que mantienen los comerciantes sobre los aumentos de salarios, pagos de bonos, pagos de aguinaldos, vacaciones de los educadores, etc. Si alguien está más pendiente de cada pago que reciben los empleados públicos, son los comerciantes, ni siquiera el mismo empleado, porque ya sabe en que lo gastará.
Por ejemplo, el cronograma de pago de los aguinaldos lo tienen fríamente calculado, se lo saben de memoria. Eso le sirve de guía para un día antes de la fecha establecida para cualquier pago, ya ellos, en la noche comienzan a remarcar precios, siempre con alguna excusa relacionada a los costos de sus productos, o a la inflación. Total el empleado público o el pueblo en general son una víctima anunciada desde que pone un pie en un comercio cualquiera.