¿Cómo 2023 será un año exitoso para los productores de energía en el mundo y particularmente para PDVSA?
En muchos sentidos, 2020 y 2021 han sorprendido a los mercados energéticos, pero mientras salimos de la pandemia, han surgido nuevos desafíos.
A medida que la transición energética continúa cobrando impulso, la guerra en Ucrania ha cambiado los mercados petroleros para siempre, alterando los flujos de petróleo existentes y creando una gran volatilidad.
Después del desastre y exodo del 2020, los administradores de activos en todo el mundo vuelven a inundar las acciones de energía, porque todos saben que en un entorno de leve recesión, la energía es un gran lugarn para estar.
A pesar de la turbulencia en los mercados de petróleo y gas, las empresas de energía han obtenido excelentes rendimientos en el segundo y tercer trimestre de 2022 y muchas de ellas han decidido devolver sus ganancias en forma de reinversiones.
A medida que los balances de las empresas de energía continúan mejorando, nuevas inversiones y mas flujo de efectivo es lo que todos los inversionistas buscarán aumentar. Es esta la coyuntura que debe aprovechar Venezuela.
En medio de las sanciones criminales de occidente, Venezuela ha experimentado graves dificultades para reincorporarse plenamente al mercado petrolero.
A pesar de ese desastre económico venezolano de valores atípicos para un pais petrolero, estamos obligados a ser optimistas en el retorno de PDVSA al mercado, a pesar de las poco optimistas predicciones de algunos economistas pro-occidente.
En tal sentido, debemos insistir que es el momento de dirigir nuestros esfuerzos a estrechar las relaciones comerciales de PDVSA con los inversionistas y empresas de Irán y del Grupo de Países BRICS, que aprovecharon para repotenciarse durante los años 2021 y 2022. Estamos seguros que tanto Putin como Lula serían los grandes aliados.
Esa debería ser la meta prioritaria de Venezuela para el 2023, ante la reticencia a invertir en Venezuela que ha demostrado EEUU contra los intereses del sector energético venezolano.
Venezuela no debería perder esa gran oportunidad que ofrece hoy el mercado oriental.