Alguien gritó DOCTOR. ¿Y usted porqué voltea? . Porque aquí cualquiera es DOCTOR.
"El conocimiento es el activo más importante que podemos transmitir a las generaciones futuras" es una frase que se evoca a menudo cuando hablamos de la necesidad de invertir en ciencia, tecnología en innovación para el desarrollo de la sociedad. Y para que los profesionales se formen y adquieran las habilidades necesarias para generar ese activo llamado conocimiento, deben obtener el título académico de más alto grado educativo: el doctorado [1].
En el ámbito académico, se denomina como doctor a aquel alumno que consigue el grado académico más alto de la universidad, conocido como doctorado.
En la mayor parte de los países del mundo, el doctorado requiere de antes haber aprobado la titulación de máster, la cual se logra tras cumplir una maestría, que es también un estudio de postgrado.
El doctorado suele durar una media de cuatro años (pero puede alargarse lo inimaginable) en el que se hacen una serie de cursos teóricos sobre un campo en el que se profundiza con una fuerte orientación investigadora.
El proceso para obtener el título de doctor suele ser difícil, duro, muy vocacional y un porcentaje muy elevado de los que empiezan el doctorado jamás llegan a terminarlo. Ni qué decir tiene que hay que tener las cosas muy claras antes de meterse en uno. Una vez con el doctorado en la mano, aparte de la dedicación a la investigación es una vía para ser profesor titular o catedrático en la universidad.
Quién obtiene el doctorado es designado como doctor o doctora en la materia estudiada, doctor en Ingeniería Química por ejemplo.
Los licenciados en Ciencias Jurídicas, Abogacía, Leyes o Derecho se autoproclaman DOCTORES aun sin haber alcanzado tal grado académico. Me hacen recordar a un tal Guaidó.
A las personas que se dedican a curar o prevenir las enfermedades, aunque no tenga el doctorado, también se les llama DOCTORES.
El doctor es aquel individuo que cursó y se graduó de la carrera de medicina y como tal se ocupa profesionalmente de cuidar, preservar y atender la salud de los seres humanos que se presentan ante él con alguna afección o dolor.
Doctor es un término de origen latino que permite hacer referencia a una persona que se dedica a sanar diversas dolencias. La misma, ha recibido el último grado académico que otorga una universidad o un establecimiento autorizado para ello y posee los conocimientos necesarios para diagnosticar una determinada enfermedad y ponerle fin a través de un tratamiento particular.
¿Y qué me dice usted de los políticos?. Como les encanta que le digan DOCTOR. Y se enorgullecen sin serlo.
"Siga doctor", "¿cómo está doctor?", "cuénteme doctor", son algunas de las frases que los venezolanos están acostumbrados a escuchar en las oficinas y en pasillos de las entidades públicas.
Este calificativo de DOCTOR, según los expertos, se ha esgrimido como un sinónimo de respeto frente a alguna figura pública y ha dejado de lado su verdadero propósito que es el de hacer referencia a una persona que ha cursado este tipo de estudios universitarios y que ha desarrollado investigaciones de largo aliento. Por eso, Venezuela es el país de doctores sin doctorado.
El DOCTOR "EN SERIO" es quien se ha doctorado en universidades reconocidas y autorizadas a conferir el máximo grado académico, tanto en nuestro país como en el exterior.
El DOCTOR "PROTOCOLAR" es un tratamiento protocolar solamente, en el trato y saludo cotidiano, la tarjeta del profesional, sus documentos de trabajo y su sello, con algunas restricciones.
¿Cuáles son los canales institucionales por medio de los cuales queda habilitado un profesional a utilizar protocolarmente el tratamiento de doctor?
En una mayoría casi absoluta de países el tratamiento protocolar de doctor reconocido, al menos desde el siglo XIX, sólo corresponde a la profesión de medicina, al punto que en buenos diccionarios ingleses o americanos se lee "a person whose profession is to attend to and treat sick people", y en el diccionario de la Real Academia, se dice que doctor es sinónimo de médico, aunque este no tenga el título de doctor [2].
El doctorado es un estudio muy profundo y de mucha dedicación, que requiere un tiempo importante y es muy difícil que una empresa dé ese tiempo. Generalmente este tipo de estudios los hacen personas que están en investigación o docentes universitarios porque además se los están exigiendo en algunas universidades.
Para desarrollar con éxito tu tesis doctoral no tienes que ser un genio, basta con que tengas una respuesta sólida para la pregunta ¿para qué quiero un doctorado? Nadie puede contestar a esta pregunta por ti. Si no sabes para qué, desiste, no merece la pena que hagas la tesis. Si lo tienes claro, adelante. Pero recuerda que para tener éxito en tu emprendimiento debes tener iniciativa, tenacidad, flexibilidad, habilidades interpersonales, habilidades organizativas y habilidades comunicativas. Aun así, debes elegir bien a tu tutor de tesis, de él dependen muchas cosas durante tu trabajo.
Además, el doctorado tiene un grado de dificultad mayor porque muchos de los estudiantes que lo cursan deben dejar su vinculación laboral para dedicarse a hacer las investigaciones, lo que significa un costo alto debido al precio de los programas.
Recuerda, el doctorado es el principio, no el final, de tu carrera como investigador. No te obsesiones en desarrollar la labor de un Premio Nobel, haz un trabajo de calidad que le demuestre a tu tutor y al jurado de tu tesis que eres capaz de seguir desarrollando trabajos de calidad y defiende tu tesis cuanto antes. Recuerda las palabras de Frederick Phillips Brooks: "Todas las tesis no se acaban; se abandonan" [3].
El escaso conocimiento social del significado de ser doctor en nuestro país va en paralelo con una clase dirigente con estudios universitarios poco específicos o inadecuados y contrasta con la situación en otros países.
El mundo está produciendo más doctores que nunca pero la tendencia se debe a países donde la calidad del doctorado es baja. Es tiempo de analizar el significado real del doctorado y de abrir un diálogo social sobre la importancia por el "amor al conocimiento" que los doctores deben encarnar.
No olvidar, un DOCTOR es una persona que ha conseguido el último grado académico en la universidad, después de haber defendido una tesis doctoral.
Referencia:
1.- https://innovacionyciencia.com/articulos_cientificos/vale_la_pena_hacer_un_doctorado
2.- https://ucema.edu.ar/6/posgrado/doctorado-en-finanzas/doctor-en-serio