La comunicación multidireccional a través del diálogo mediado constituye un factor fundamental en el éxito de aprender a distancia en tiempos de pandemia. Esta comunicación, basada en el envío de mensajes de manera permanente entre los integrantes del aula virtual, se inserta como un componente esencial dentro de la activación de Plan "Universidad en Casa", donde participan las personas que cursan estudios universitarios y que aprenden desde sus hogares con la ayuda ajustada y personalizada del tutor virtual, así como el acompañamiento de los padres, la familia y la comunidad organizada.
En tal sentido, se entiende por comunicación multidireccional la interacción entre dos o más personas que actúan simultáneamente emitiendo mensajes y recibiendo una respuesta como reacción (Riveiro1). La comunicación ocurre cuando hay interacción recíproca entre los dos polos de la estructura relacional, conocidos como transmisor y receptor, realizando la ley de bivalencia donde todo transmisor puede ser receptor y todo receptor puede ser transmisor. Es la correspondencia de mensajes con posibilidad de retorno mecánico entre polos igualmente dotados del máximo coeficiente de comunicabilidad (Pascuali2). Los únicos entes capaces de presentar comportamientos comunicacionales y sociales encargados de transmitir y recibir intelectual y sensorialmente son los seres humanos, los cuales poseen el "con-saber" de la conciencia y la co-presencia para que exista comunicación, actuando simétricamente tratando de acondicionar la voluntad de entendimiento mutuo que es a lo que se le denomina diálogo (Pascuali3).
Los factores que intervienen en la comunicación multidireccional son: emisor o codificador, punto donde se codifica y transmite el mensaje; receptor o decodificador, punto donde se recibe y decodifica el mensaje, código, conjunto de reglas que el emisor utiliza para transmitir el mensaje; mensaje, contenido de la información que se desea transmitir; canal, medio por donde se transmite la información; referente, realidad que se percibe en el receptor producto del mensaje enviado; situación, tiempo y lugar en que se realiza el acto comunicativo; ruido, cualquier perturbación o distorsión que sufra la señal durante la transmisión; así como realimentación , información que recibe el emisor de la llegada del mensaje al receptor (Teijero4). Por otra parte, el proceso de comunicación multidireccional en el aula virtual debe producirse bajo condiciones de resiliencia del tutor virtual, que le permitan oponerse al abandono de los estudios universitarios, estimulando la retención y el deseo de aprender de manera significativa por parte de los estudiantes.
El diálogo en educación a distancia acentúa las relaciones sociales entre los integrantes del aula virtual. Con base a esto, el Diálogo Didáctico Mediado (DDM) es un constructo que trata de describir, explicar, comprender y predecir, las diferentes modalidades educativas a distancia con el fin de regular, con eficacia las intervenciones pedagógicas en ese ámbito, partiendo del supuesto que en los entornos educativos virtuales se establecen relaciones sociales, que deben orientarse hacia el diálogo con el objetivo de lograr la intervención de todos los participantes (García Areito5). Se trata de un diálogo didáctico, pedagógico, de tipo conversación, colaboración, cooperación, interacción, intercambio y negociación, que se convierte en el principal protagonista, al relacionar los diferentes procesos y participantes en el aula virtual. El DDM propicia que en el aula virtual el tutor virtual, como líder del proceso educativo y facilitador de contenidos, interactúe con los estudiantes que constituyen el centro de atención de los aprendizajes, así como con los padres, la familia como apoyos internos y con la comunidad organizada que garantiza los apoyos externos.
Todo lo anterior, permite afirmar a través de la teoría conversacional, considerada como la presunción de múltiples interacciones entre las partes involucradas que construyen conocimiento, que el aprendizaje se genera a través de variadas interlocuciones y conexiones humanas y no humanas. De ahí, que pueda entenderse la educación a distancia como un entramado comunicativo con finalidad pedagógica, donde el estudiante establece diálogos mediados con el tutor virtual, la institución educativa y los materiales instruccionales, con la finalidad de lograr los aprendizaje autónomos y colaborativos (García Aretio5). Todo ello, permite reafirmar la necesidad de promover el DDM a favor del aprendizaje y la retención universitaria oponiéndose a la deserción, ya que cuando se produce algún tipo de quiebra en las relaciones que propician el diálogo el sistema no fluye, mostrando debilidades que podrían llegar a la ruptura final del estudiante con la institución, o sea al abandono.
Ahora bien, ya afirmamos que el principal componente del DDM en el aula virtual son las relaciones sociales que el tutor virtual, como líder del proceso educativo, desarrolla y estimula en los estudiantes y el resto de los integrantes del aula virtual. Sin embargo, el otro componente importante es el mensaje, ya definido como el contenido de la información que el sujeto emisor desea transmitir. El principal emisor en el aula virtual es el tutor virtual que emite diversos contenidos. Por tanto, lo primero que debemos preguntarnos es: ¿cuáles son los contenidos que debe transmitir el tutor virtual a través de mensajes, para garantizar el aprendizaje significativo de los estudiantes en el aula virtual? (1) Relativos a los estudiantes y sus aprendizajes. Temas a tratar, metodología a desarrollar, estrategias didácticas, estrategias de evaluación, ayuda ajustada y personalizada, trabajo individual y en colaboración, procesos afectivos y motivacionales para el aprendizaje. (2) Relativos a los padres y familia. Organización y mantenimiento del aula virtual, satisfacción de las necesidades personales de los estudiantes, contactos con la institución educativa, atención al proceso de aprendizaje, vigilancia tecnológica y material en general. (3) Relativos a la comunidad organizada. Contactos con el hogar familiar, con la institución educativa, así como con organizaciones políticas y sociales. Esto enmarcado en desarrollar una política de resiliencia por parte del tutor virtual que se oponga a que el trabajo en el aula virtual se dificulte y pueda propiciar la ruptura del diálogo debido, por ejemplo a: dificultades de acceso a los contenidos para el aprendizaje vía Web; dificultades para relacionarse con el estudiante y con el resto de los integrantes del aula virtual; falta de atención al proceso de aprendizaje por parte de padres, familia y comunidad organizada; falta de vigilancia del comportamiento motivacional del estudiante; así como, falta de cuidado en las relaciones estudiante-familia-comunidad organizada.
Ahora bien, otro elemento importante a preguntarse sería ¿cómo deben estructurarse los mensajes para garantizar la comunicación en el aula virtual? Por ejemplo, los mensajes referidos a la preparación del curso antes, durante y una vez finalizado. Antes de comenzar el curso, el tutor virtual debe enviar mensajes tendientes a explicar las bondades de la plataforma tecnológica, en cuanto a formas de utilización, adaptación a diferentes dispositivos de comunicación, vías de acceso, flexibilidad actual y futura, cantidad de usuarios que admite, pruebas de arranque, integración con las redes sociales, privacidad y soporte. Además, debe enviar mensajes que contengan: el programa, las estrategias didácticas y de evaluación, la metodología, la ayuda ajustada y personalizada, así como el trabajo en colaboración. Otros mensajes deben estar dirigidos a incentivar y motivar la participación, así como el envío de materiales instruccionales para el estudio individual y en equipo. Durante el desarrollo del curso, los mensajes deben orientarse a introducir el tema, compartir el contenido de cada sesión, realizar intercambios mediante preguntas y respuestas, monitorear el tiempo, dejar espacio a la reflexión entre una y otra sesión. Finalizado el curso, el tutor virtual deberá realizar una encuesta que le permita recibir comentarios de los estudiantes, conocer qué aprendieron, qué les pareció el curso, qué les gustó y qué no les gustó, qué se podría mejorar, entre otras. La realimentación que reciba el tutor virtual le permitirá planificar aún mejor el siguiente curso.
La siguiente pregunta que nos hacemos está orientada a ¿qué tipo de formatos utilizar para elaborar el mensaje? El mensaje puede elaborarse de varias maneras: (1) tipo video educativo, para el estudio individual y la discusión colectiva que propicie formas de evaluación de los contenidos; (2) texto corto, tipo orientación, afirmación o pregunta con argumentación; (3) secuencia de imágenes comentadas y animadas; así como, tablas comparativas para análisis y discusión colectiva. Finalmente, nos preguntamos: ¿cuáles canales de comunicación utilizar? Redes sociales, páginas web, correo electrónico, WhastApp, videoconferencias y audioconferencias. Las redes sociales más utilizadas en educación a distancia son Facebook, Twitter y YouTube, también podrían utilizarse Instagram y Tik Tok. Las páginas web muestran un contenido más amplio con posibilidades de navegación. El correo electrónico es el medio de comunicación más utilizado de manera asíncrona ya que brinda un espacio importante para la reflexión. El uso de WhatsApp permite el intercambio de mensajes individuales con cierta extensión, además, de los grupos de WhatsApp para intercambios colectivos. El desarrollo de videoconferencias abre un espacio a la comunicación síncrona mediante el uso de salas de chat de intercambio colectivo multidireccional. Las audioconferencias pueden ser previamente grabadas y enviadas a los estudiantes vía WhatsApp o correo electrónico, para su estudio individual y discusión colectiva.
Finalmente, es significativo resaltar que a lo largo del discurso hemos logrado precisar la importancia de la comunicación multidireccional y caracterizar el DDM como mecanismo que acentúa las relaciones sociales entre los integrantes del aula virtual. Hemos enmarcado el DDM en el constructo utilizado para describir, explicar, comprender y predecir, las diferentes modalidades educativas a distancia, con el fin de regular con eficacia las intervenciones pedagógicas en el ámbito educativo. Ha quedado demostrada la importancia del mensaje como componente clave para la comunicación multidireccional que se produce en el aula virtual. Por otra parte, nos preguntamos y dimos respuesta a interrogantes como: ¿cuáles son los contenidos que debe transmitir el tutor virtual a través de mensajes, para garantizar el aprendizaje significativo de los estudiantes en el aula virtual?; ¿cómo deben estructurarse los mensajes para garantizar la comunicación en el aula virtual?; ¿qué tipo de formato utilizar para elaborar el mensaje?; así como, ¿cuáles canales de comunicación utilizar? Todo ello, para garantizar la comunicación eficaz en el aula virtual, mediante el envío de mensajes efectivos en el marco de las relaciones sociales, que permitan al tutor virtual y el resto de los integrantes del aula virtual actuar con resiliencia, oponiéndose a la ruptura del diálogo (DDM), contribuyendo al aprendizaje significativo de los estudiantes, estimulando la retención y evitando la deserción estudiantil.
Bibliografía
1Riveiro, Lair, La comunicación eficaz, Barcelona, URANO, 1997.
2Antonio Pascuali, Comprender la Comunicación, Caracas, Monte Ávila Editores, 1979.
3Antonio Pascuali, Comunicación y Cultura de Masas, Caracas, Monte Ávila Editores, 1980.
4Teijero Páez, Sergio, Educación a distancia en tiempos de COVID-19, Caracas, Ediciones ARA MACAO, 2021.
5García Areito, Ignacio, El problema del abandono en estudios a distancia. Respuestas desde el Diálogo Didáctico Mediado. En Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, Vol. 2, N° 1, 2019.