La comunicación entre el tutor virtual y los estudiantes, entre estudiantes y entre estos y los contenidos del aprendizaje, constituyen elementos clave que posibilitan mayor interacción, motivación y participación, para el logro del aprendizaje significativo de los estudiantes en el aula virtual. Comunicar de manera multidireccional implica mantener un diálogo que permita que dos o más sujetos interactúen de manera recíproca, donde todos los participantes pueden actuar como emisor y receptor. Por ello, la importancia de utilizar estrategias didácticas y herramientas comunicacionales, que motiven y logren la participación entre estudiantes y con el tutor virtual, para mediante el envío y recepción de mensajes con retorno, sea posible mantener el diálogo que posibilite la comunicación en el aula virtual.
El diálogo es la base de toda comunicación que se produce como resultado del envío de un mensaje que provoca una reacción como respuesta en el receptor. Nunca olvide que la vida es como un eco, si a usted no le gusta lo que recibe de los demás, preste atención a lo que usted mismo emite (Riveiro1). De esa manera, podrá ser un buen comunicador. La comunicación es la más básica y vital de todas las necesidades después de la supervivencia física. La comunicación interpersonal, ha servido a lo largo de la historia para que los seres humanos se entiendan, conversen consigo mismo y colaboren. Sin embargo, esto no basta para una buena comunicación. "Para que el conocimiento no permanezca en el fondo del océano de la mente, lo que realmente importa es la capacidad de transmitir nuestros mensajes, nuestros pensamientos y sentimientos" (p.11). La comunicación no sólo se establece con palabras, realmente ellas representan sólo el siete por ciento de la capacidad que tienen las personas para influir en los demás. Comunicarse correctamente necesita antes de pronunciar cualquier palabra, formar una estructura de pensamientos que dé más poder a la comunicación.
Por otra parte, el Diálogo Didáctico Mediado (DDM) en educación a distancia acentúa las relaciones sociales y facilita la comunicación entre los integrantes del aula virtual. El DDM, es un constructo que trata de describir, explicar, comprender y predecir, las diferentes modalidades educativas a distancia con el fin de regular, con eficacia las intervenciones pedagógicas en ese ámbito, partiendo del supuesto que en los entornos educativos virtuales se establecen relaciones sociales, que deben orientarse hacia el diálogo con el objetivo de lograr la participación de todos los agentes (García Areito2). Se trata de un diálogo didáctico, pedagógico, de tipo conversación, colaboración, cooperación, interacción, intercambio y negociación, que se convierte en el principal protagonista, al relacionar los diferentes procesos y participantes en el aula virtual. El DDM propicia que en el aula virtual el tutor virtual, como líder del proceso educativo y facilitador de contenidos, interactúe con los estudiantes que constituyen el centro de atención de los aprendizajes, así como con los padres, la familia como apoyos internos y con la comunidad organizada que garantiza los apoyos externos.
Ahora bien, el tutor virtual atendiendo al nuevo enfoque de la educación universitaria debe seguir velando, que los estudiantes construyan conocimiento a partir de los conocimientos previos que poseen actuando como facilitador, motivador, guía para el aprendizaje, pero también debe trabajar por lograr que los estudiantes adquieran las competencias necesarias para actuar de manera eficaz y resiliente ante diversas situaciones que se le puedan presentar en el aula virtual. Todo ello, apoyado en el desarrollo de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación (TIC), que señalan a la educación a distancia como un proceso basado en conocimiento, comunicación e interacciones sociales, acelerado por la aparición de la cultura digital, que ha transformado el papel de tutores virtuales y estudiantes, induciendo la necesidad de cambios en las instituciones universitarias.
Ante estos escenarios aparece con mucha fuerza no solo la necesidad de alcanzar los objetivos y competencias trazadas en la unidad curricular; el cumplimiento de los contenidos; las estrategias didácticas; las evaluaciones, autoevaluaciones y coevaluaciones; la cooperación; la colaboración a través del trabajo en equipo; la ayuda ajustada y personalizada que brinda el tutor virtual al estudiante; sino, además ejecutar un conjunto de estrategias que faciliten la comunicación, a pesar de las adversidades, mediante el establecimiento de diferentes aulas virtuales. En tal sentido, el tutor virtual, ubicado en el aula virtual de una determinada asignatura, se comunica con los estudiantes situados en el aula virtual del hogar familiar en el Plan "Universidad en Casa", desde donde realizan todas sus actividades de aprendizaje. De igual forma, las autoridades universitarias a los diferentes niveles se comunican con los profesores, estudiantes, empleados, padres y la familia de la comunidad estudiantil, desde las salas virtuales institucionales. Utilizando estos escenarios las estrategias de comunicación pueden ser enunciadas de la siguiente manera:
(1) Establecer una adecuada coordinación, a través de la planificación y la gestión que realiza el tutor virtual, para incrementar la motivación, la interacción y la participación de los estudiantes en el logro de los aprendizajes significativos en el aula virtual.
(2) Desarrollar acciones que potencien y favorezcan la comunicación en el aula virtual, fomenten la iniciativa, seguimiento e intervención del tutor virtual, a la vez que fortalezcan su posición como diseñador, facilitador y dinamizador del ambiente virtual, obteniendo altos beneficios para la comunidad virtual de aprendizaje. Entre estas acciones se incluyen: presentación y discusión de materiales instruccionales escritos y noticias de interés para el contenido tratado; motivación a la participación de los estudiantes mediante preguntas y respuestas, realizando valoraciones positivas de los aportes de cada estudiante, que sean incluidas en la nota parcial y final de la asignatura; invitación por parte del tutor virtual a expertos para que presenten temas de actualidad referidos a los contenidos de la asignatura, con un espacio de reflexión crítica y discusión, que propicie la participación de los estudiantes y su evaluación; utilización de herramientas de comunicación como el video y el audio educativo, foros de discusión, chat de preguntas / respuestas y redes sociales; así como, discusión individual y colectiva de los errores más significativos y comunes encontrados en las evaluaciones, como elemento propiciador de la comunicación y mecanismo de realimentación, para que el estudiante conozca sus deficiencias y pueda mejorarlas.
(3) Potenciar la comunicación entre estudiantes, con la intervención del tutor virtual, que propicie la cooperación, la colaboración, el apoyo mutuo compartido y que al mismo tiempo los motive e implique en el proceso de aprendizaje, logrando un mayor interés por los contenidos y el seguimiento de la asignatura. Entre las estrategias se encuentran: en primer lugar, fomentar la colaboración mediante el trabajo en equipo, la asignación de trabajos que sean realizados de manera conjunta, pero evaluados como un componente colectivo y otro individual. Por ejemplo, el tutor virtual asigna un trabajo en equipo que consiste en realizar una búsqueda en Internet, para seleccionar un video educativo que trate acerca del tema de la asignatura que se está estudiando. La evaluación del trabajo se plantea con dos componentes; uno colectivo, mediante la selección y descripción del video, así como otro individual a través de la opinión de cada integrante del equipo acerca de la importancia del video con fines educativos, para el tema que se está tratando en la asignatura. El tutor virtual asigna una ponderación evaluativa a cada componente y determina la nota individual de cada integrante del equipo. En segundo lugar, motivar a los estudiantes para que propongan temas de interés relacionados con el contenido tratado en la asignatura, de manera de ser preparado por los propios estudiantes y presentados para su discusión colectiva.
(4) Fomentar la comunicación entre los tutores virtuales que imparten la misma asignatura mediante el uso de salas virtuales. Esto potencia la comunicación y la colaboración entre los tutores virtuales que trabajan en la misma asignatura, para unificar criterios a favor de la eficacia y la calidad del proceso educativo. Dentro de estas estrategias de comunicación se encuentran: creación de salas virtuales para que los tutores virtuales intercambien criterios académicos acerca de la forma de impartir la asignatura, la metodología a utilizar, las estrategias didácticas, las estrategias de evaluación, la cooperación, la colaboración mediante el trabajo en equipo, la ayuda ajustada y personalizada que el tutor virtual brinda a los estudiantes, presentación y discusión de materiales instruccionales, así como sesiones de discusión de las preguntas más comunes por parte de los estudiantes para unificar las mejores respuestas. Esta sala virtual también podría ser utilizada para discutir sobre posibles temas de trabajos de grado para los estudiantes. Otro tipo de sala virtual podría ser utilizada para la superación postgraduada y el trabajo de investigación de los tutores virtuales, donde pueden ser discutidas las diferentes líneas de investigación, así como la participación en cursos o estudios de postgrado y las publicaciones realizadas. Todo ello, incrementa el intercambio e interacción entre tutores virtuales que se desempeñan en áreas de conocimiento similares, propiciando el debate científico tendientes a la creación de equipos y redes de investigación.
(5) Implantar salas virtuales para el desarrollo del trabajo institucional de cara a la población estudiantil, los profesores, los representantes de los estudiantes y la comunidad organizada. Esto permite potenciar las relaciones entre las autoridades a los diferentes niveles institucionales con los profesores, estudiantes y familiares, la comunidad, incluyendo los gremios estudiantiles, asociaciones de profesores y de empleados universitarios, facilitando una comunicación fluida para incrementar la información y la participación. Estas salas virtuales pudieran abarcar diferentes temáticas como: información acerca del desarrollo y la gestión institucional ante los embates del COVID-19; información acerca de la marcha del proceso educativo, su vinculación con los tutores virtuales, los estudiantes, los padres, la familia y la comunidad, en el marco de Plan "Universidad en Casa"; reuniones informativas con los profesores a nivel de cátedra, departamento, escuela o facultad, para el chequeo de la marcha del proceso educativo; reuniones con las asociaciones de empleados y profesores; desarrollo de conferencias magistrales en línea con personalidades del mundo científico y académico, con participación de toda la comunidad universitaria; así como, balance institucional anual y perspectivas para el próximo año, entre otras.
Finalmente, es importante destacar que el diseño de aulas y salas virtuales para diferentes propósitos informativos, de gestión administrativa, de relaciones entre los diferentes sectores de la comunidad educativas y propias del proceso de enseñanza y aprendizaje, constituye un factor esencial para mantener a toda la comunidad universitaria comunicada e informada, siendo un factor fundamental para detectar a tiempo cualquier problema, que se oponga al buen funcionamiento y desarrollo del proceso de enseñanza y aprendizaje, permitiendo a autoridades, profesores, estudiantes, personal administrativo, empelados, padres y familia, actuar de manera resiliente, para detectar los posibles inconvenientes y proceder en la resolución de problemas.
Bibliografía
1Lair Riveiro, La comunicación eficaz, Barcelona, URANO, 1997.
2García Areito, Ignacio, El problema del abandono en estudios a distancia. Respuestas desde el Diálogo Didáctico Mediado. En Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, Vol. 2, N° 1, 2019.