"HE ARADO EN EL MAR" Simón Bolívar.
Este próximo 24 de junio, celebraremos el grato recuerdo de la Batalla de Carabobo, que dio la emancipación de Venezuela, impulsó la de América y consolidó el prestigio de Simón Bolívar y su Estado Mayor. Al día siguiente, El Libertador le comunica al Congreso de Colombia la buena nueva. El Congreso ordena: "Para recordar a la posteridad la gloria de este día, se levantará una columna ática en el campo de Carabobo. El primer frente llevará esta inscripción: DÍA 24 DE JUNIO DEL AÑO XXI. SIMÓN BOLÍVAR, VENCEDOR, ASEGURÓ LA EXISTENCIA DE COLOMBIA". Condiciones previas facilitaron su triunfo militar: el Tratado de Armisticio con Morillo en Santa Ana de Trujillo, la sustitución de Morillo por el Mariscal La Torre (que conocía menos el terreno que Morillo), las ordenes del Libertador, para que su ejército separadamente atacara tropas españolas buscando su fragmentación, le dieron al Libertador la centralidad para poder comandar casi 6000 soldados en Carabobo. Desde una colina, Bolívar dirige la batalla que duró una hora. La Torre derrotado, huyó a Valencia, para continuar a Puerto Cabello. Coro y Puerto Cabello, aún permanecían en manos españolas. Bolívar se enfrentaba y derrotaba a un imperio, pero el conflicto interno de clases estaba vivo y los intereses de la oligarquía latifundista eran poderosos. Bolívar "le temía más a la paz que a la guerra". Las contradicciones de clases eran profundas.
Dos años antes en 1819, el Congreso de Angostura se había mostrado frio y cauteloso con las propuestas de Bolívar. La oligarquía terrateniente controlaba el Congreso. "Las intrigas de los legisladores me preocupan mucho" señaló El Libertador. En 1830, el mantuanaje de Bogotá lo llamará "Loganizo" (chorizo, mestizo). Era el santanderismo cabeza visible de la oligarquía terrófaga. Virreinato tenía que ser. Ya habían intentado su asesinato y no fracasaron en el de Sucre. "Ay balazo"… "Santo Dios, se ha derramado la sangre de Abel" exclamó Bolívar al saber la noticia…
En Angostura (1819), los congresistas "admitieron" y acordaron reunirse en Cúcuta en 1821, con el propósito de buscar formalmente la "unión" política y "territorial" de Colombia. Claro, con el puñal en la manga. Bolívar pidió al congreso "La libertad de vientre" de los esclavos: hijo o hija de esclavo nacerían libres. No se atrevió a pedir la libertad plena de los esclavos, para no provocar a los terratenientes, mayoritariamente representados en aquel Congreso. El y su familia eran de este mantuanaje: difícil contradicción….
El erróneo fusilamiento de Piar (sus tropas eran pueblo auténtico), contentó a la oligarquía; el curazoleño estaba incitando "una guerra de colores". Eran luchas de clases internas, que ya se había expresado como guerras civiles. Se pierden la Primera y Segunda República. El latifundio peligraba. Bolívar no olvidaba los consejos de Petión. Lo de República, tenía para la oligarquía menor importancia que sus latifundios.
Cierto, El Libertado debió enfrentar problemas muy difíciles: traiciones y deserciones, el papel godo y opositor de la iglesia católica española, las duras dificultades geográficas, la escases de pertrechos y los movimientos habilidosos de los terratenientes, que cuidaban sus conveniencias. Mantener el orden político y militar interno no era fácil. Persuadir a sus tropas de sus brillantes ideas emancipadoras y libertarias desconocidas por todos, debió ser tarea de inteligencia y ejemplo propio.
Desde los inicios independentistas de 1810, la oligarquía procuró controlar y contener el peligro del pardaje, de indios y esclavos. Desde el Congreso, podían bloquear animadversiones en su contra. Que la guerra se hiciera contra España y no contra ellos. EL LATIFUNDIO…EL LATIFUNDIO…
Los movimientos pre independentistas y los éxitos de los negros haitianos, mortificaban al mantuanaje. EL CENTRO DEL PROBLEMA ERA LA TENENCIA DE LA TIERRA. "El 5% de la población, eran dueños del 95% de las mejores tierras" acotó el Dr. Federico Brito Figueroa. Muerto Bolívar en 1830, la oligarquía elevó en Valencia a la condición de Presidente a su mejor QUINTA COLUMNA, A SU MEJOR "Caballo de Troya": José Antonio Páez. No es por casualidad, que Páez fomentara los odios contra Bolívar, pasara a retiro a las tropas libertadoras y en 1834, firmara la Ley de "Quita y Espera", que acrecentaba el latifundio. El mismo Páez a poco, era uno de los grandes latifundistas. Bolívar había "arado en el mar". El Decreto de Bolívar contra la corrupción era inútil…
La oligarquía procuró controlar los pasos de Bolívar; tenerlo de Presidente era mejor que liberando pueblos y territorios. Las facultades presidenciales eran pocas y las extraordinarias las concedía el Congreso, que ellos controlaban. Recordemos que 1810 se habían opuesto a la independencia, y propuesto una "Junta conservadora de los derechos de Fernando VII". El INMORTAL SIMÓN RODRIGUEZ, opinaba sobre su mejor alumno: "Bolívar merece ser defendido…Por no querer persuadirse de esta verdad-por no querer imitar a Bolívar- yerran gravemente los que mandan unos pueblos tan desordenados y tan pobres" Pudo más la codicia que la dignidad.
A Bolívar, de Venezuela Páez lo había expatriado y en Colombia presionaban por su exilio. La Convención de Ocaña (1828) estaba en su contra, pero el pueblo de Bogotá lo apoyaba y Manuelita lo salva de ser asesinado. Urdaneta conspiraba desde El Callao. En Maturín, Bermúdez lo tildó de: "hombre de criminales designios". Arismendi, lo llamó: "Tirano de Colombia". Mariño lo adversaba. Páez: "su nombre debe condenarse al olvido". Miguel Peña aplaudió su muerte. Bolívar profería: "mis enemigos….hollaron lo que me es más sagrado: mi reputación y mi amor a la libertad". Confesó, que "la independencia" era el único bien conquistado a costa de todos los demás. Derrotó a España, pero su propia clase: la oligarquía, lo derrotó a él. Los problemas estructurales de "Colombia" quedaban cruditos. Más aún, habían aumentado…."SI LA CULEBRA ES LA MISMA QUIENE ES EL MANTUANO HOY". CONTINUARÁ….