La educación en contexto de emergencia conlleva a las oportunidades para acceder al aprendizaje inclusivo y de calidad para las distintas edades en situaciones de crisis. Esto incluye el desarrollo de la primera infancia, la educación primaria, secundaria, técnica, profesional superior y de adultos. Los estudios en la infancia y el derecho a la educación deben ser garantizados y protegidos en todos los contextos, incluidos durante emergencias. En este panorama se requiere una educación de calidad, pues favorece el desarrollo cognitivo y apoya el bienestar psicológico en momentos de dificultad, además de que fomenta un sentido de esperanza en los jóvenes y adultos (Global, Estimates 2022).
En la actualidad, hay un estimado de 224 millones de niños y niñas en edad escolar, los cuales necesitan apoyo en su proceso de formación, debido principalmente al impacto de las crisis humanitarias: conflictos armados, inundaciones, peligro de enfermedades como el Covid-19. Todo esto da notoriedad a la disrupción del proceso educativo que generan las crisis y los cierres de las escuelas, poniendo en evidencia las dificultades que sufren sobre todo los niños y adolescentes que viven en contextos de crisis, de desplazamiento, asilo y refugio. De los 224 millones de niños que están afectados por crisis, se estiman 78.2 millones fuera del sistema escolar, lo que tiene un doble efecto negativo, ya que por un lado impide en gran medida el desarrollo cognitivo, y por otro los pone en mayor riesgo de sufrir violencia (Global, Estimates 2022).
Se promedian 119.6 millones de estudiantes que viven crisis humanitarias. En este sentido, no están consiguiendo adquirir las competencias mínimas en matemáticas, ni lectoescritura, a pesar de asistir a la escuela. Asimismo, 24.2 millones de estudiantes han conseguido un nivel aceptable, pero siguen sufriendo los efectos de las crisis, por lo que requieren de algún apoyo humanitario especifico, como puede ser el ayuda psicosocial que es un componente principal en la educación en emergencias. Tales crisis humanitarias tienen un fuerte impacto y sus principales consecuencias se verifican en las escuelas cerradas, destruidas, sin docentes calificados, sin materiales apropiados y sin seguridad. A nivel mundial, los incidentes de uso militar de escuelas y universidades, se duplicaron en 2020 y 2021, en comparación con 2018 y 2019 con un total de al menos 5000 acontecimientos con 9000 estudiantes y docentes secuestrados, arrestados, heridos o asesinados en 85 países (Global, Estimates 2022).
Distintos informes mencionan que las niñas y las mujeres son blanco de ataque en la educación debido a su género, y ellas también son la población con mayor riesgo de sufrir violencia sexual en entornos escolares como en rutas hacia la escuela. El secuestro o reclutamiento de alumnas y profesoras se usa como recompensa para combatientes, convirtiéndolas en esclavas, ya sea con fines sexuales para que desempeñen otras funciones de apoyo a los militares. En crisis humanitarias se suelen asignar también a niñas, adolescentes y mujeres la responsabilidad de ´personas dependientes en el entorno familiar lo que representa otra de las limitantes que enfrentan las niñas y mujeres para continuar con sus estudios (Global, Estimates 2022).
A nivel mundial existen distintas experiencias relacionadas con la utilización de la educación en situaciones de emergencia (ESEM). Estas surgen de la necesidad de proporcionar el derecho a la educación frente a los desastres socio-naturales; entre ellos: conflictos armados, desplazamientos forzados, terremotos, inundaciones, sequías, epidemias e incendios. Hasta antes de la pandemia de Covid- 19, cada año, la ESEM se impartía a unos 175 millones de personas vulnerables a distintos tipos de riesgos alrededor del mundo. Principalmente en países en vías de desarrollo como los africanos. Del mismo modo, en naciones de ingresos medios con problemas especiales debido a su geografía, algunos en América Latina y el Caribe (Wolpert, R., Rodríguez, A, 2021).
En este mismo orden, existen razones por las que las instituciones educativas deben integrar la educación de emergencia como parte formal del sistema, debido a los siguientes factores:
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Los riesgos y situaciones críticas se incrementan en el futuro, a causa del cambio climático, el aumento de la pobreza y los conflictos políticos en las distintas regiones. Todo esto tiene incidencia en la vida escolar de millones de personas, sobre todo en los países con mayor desigualdad y dificultades socio-económicas.
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El acceso a la ESEM es una condición para avanzar hacia el desarrollo llevadero de los países y disminuir las pérdidas económicas, culturales y sociales después de una situación de contingencia.
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Este programa educativo va más alla de la respuesta humanitaria y la movilización de ayuda económica o técnica en momentos críticos, ya que es una perspectiva de trabajo que organiza grandes labores de carácter permanente para las comunidades educativas y autoridades: la preparación, la atención y la recuperación en situaciones de riesgo, crisis o desastre (Wolpert, R., Rodríguez, A, 2021).
Dentro de sus prioridades está garantizar la vida, la seguridad y la salud de las personas, a través de la planificación de políticas educacionales innovadoras y participativas, que presenten ayuda inmediata, así como los protocolos claros para el cuidado de los estudiantes y el personal educativo, tanto como una infraestructura fisica y servicios como el agua, la higiene y alimentación que hagan de las escuelas un espacio protector donde se busque reconstruir el bienestar socioemocional de estudiantes, docentes y familias, mediante el fortalecimiento de vínculos y la construcción de nuevas proximidades, la creación de entornos de inclusión, equidad y pacifismo, libres de violencia, así como resilientes ante los duelos y las dificultades (Wolpert, R., Rodríguez, A, 2021).
Bibliografías
Global Estimates. (2022). La educación en situaciones de emergencia, Garantizar el derecho básico a la educación especialmente en momentos de crisis y conflictos, Octubre 2023, https://educowebmedia.blob.core.windows.net/educowebmedia/educospain/media/docs/que-hacemos/educacion_emergencia.pdf
Rosa Wolpert, Adolfo Rodríguez. (2021). Integración de la educación en situaciones de emergencia a los sistemas educativos de Latinoamerica y el Caribe. https://revista.ilce.edu.mx/images/pdf/articulos/UNESCO-UNICEF.pdf